Arquitectos y constructores civiles de la Universidad de Valparaíso dieron a conocer estudios sobre los efectos del terremoto del 27 de febrero en inmuebles de la ciudad, las estimaciones establecen el nivel de riesgo del área patrimonial y la peligrosidad de caída de fachadas en las principales calles de la ciudad.
El primer estudio fue una pesquisa de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad de Valparaíso, que salieron el mismo sábado 27 de febrero a revisar el estado de las fachadas de diferentes inmuebles en la ciudad puerto.
Los especialistas realizaron un catastro de los daños en fachadas de 103 inmuebles tradicionales del céntrico sector de Pedro Montt, calle Victoria e Independencia, además de parte del barrio Puerto. En principio un 28 por ciento de las fachadas de los inmuebles investigados presentaban después del terremoto un cierto riego de caída.
Los resultados del estudio “Diagnóstico preliminar efectos del sismo del sábado 27 de febrero 2010”, fueron dados a conocer por el académico Uriel Padilla, de la Escuela de Construcción Civil, estimando los niveles de riesgo para la población en cuanto a peligro de caída de fachadas.
“En este momento el nivel es bajo y asociamos a eso que ha habido mejoramiento del grado de deterioro, pero aún así recomendamos a la gente que mire hacia arriba y no al piso. No alcanza a ser el 50, entonces estadísticamente si hablamos sobre el 50 o bajo el 50, ahí podríamos calificar, pero en este caso no. Es advertir a la comunidad que, en estos momentos, tiene que resolver el tema, no solo poner una latita donde se me cayó un metro cuadrado de revoque”, sostuvo Padilla.
El segundo estudio fue difundido por los arquitectos Osvaldo Bizama y José Agustín Vásquez, trabajo realizado para la Municipalidad de Valparaíso y a cargo de académicos de la Escuela de Arquitectura.
Este estudio consistió en la evaluación de inmuebles en el casco histórico de la ciudad, contando 160, muchos de ellos dañados gravemente, que no se notan en apariencia, según lo señalado por Vásquez.
“Cerca de un 30 por ciento tenía daño estructural, distinto a que una cosa esté a punto de colapsar. Un daño estructural puede ser que haya un muro de sostén en un edificio que tenga una grieta horizontal que recorra todo el edificio, pero que no ha sufrido desplazamiento. Cuando uno ve que el muro está desplazado, desaplomado, ahí hay un riesgo de colapso evidente”, indicó Vásquez.
Ambos arquitectos señalaron que esta condición es crítica, considerando la nominación de Valparaíso como Patrimonio de la Humanidad, ya que su juicio esto se aborda sólo desde la apariencia, sin considerar lo de fondo.
El estudio realizado por la Escuela de Construcción Civil fue entregado al Rector Aldo Valle, para que se difunda en los canales pertinentes, mientras tanto, la información recogida en el estudio por la Escuela de Arquitectura fue entregada al municipio.
Arquitectos y constructores civiles de la Universidad de Valparaíso dieron a conocer estudios sobre los efectos del terremoto del 27 de febrero en inmuebles de la ciudad, las estimaciones establecen el nivel de riesgo del área patrimonial y la peligrosidad de caída de fachadas en las principales calles de la ciudad.
El primer estudio fue una pesquisa de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad de Valparaíso, que salieron el mismo sábado 27 de febrero a revisar el estado de las fachadas de diferentes inmuebles en la ciudad puerto.
Los especialistas realizaron un catastro de los daños en fachadas de 103 inmuebles tradicionales del céntrico sector de Pedro Montt, calle Victoria e Independencia, además de parte del barrio Puerto. En principio un 28 por ciento de las fachadas de los inmuebles investigados presentaban después del terremoto un cierto riego de caída.
Los resultados del estudio “Diagnóstico preliminar efectos del sismo del sábado 27 de febrero 2010”, fueron dados a conocer por el académico Uriel Padilla, de la Escuela de Construcción Civil, estimando los niveles de riesgo para la población en cuanto a peligro de caída de fachadas.
“En este momento el nivel es bajo y asociamos a eso que ha habido mejoramiento del grado de deterioro, pero aún así recomendamos a la gente que mire hacia arriba y no al piso. No alcanza a ser el 50, entonces estadísticamente si hablamos sobre el 50 o bajo el 50, ahí podríamos calificar, pero en este caso no. Es advertir a la comunidad que, en estos momentos, tiene que resolver el tema, no solo poner una latita donde se me cayó un metro cuadrado de revoque”, sostuvo Padilla.
El segundo estudio fue difundido por los arquitectos Osvaldo Bizama y José Agustín Vásquez, trabajo realizado para la Municipalidad de Valparaíso y a cargo de académicos de la Escuela de Arquitectura.
Este estudio consistió en la evaluación de inmuebles en el casco histórico de la ciudad, contando 160, muchos de ellos dañados gravemente, que no se notan en apariencia, según lo señalado por Vásquez.
“Cerca de un 30 por ciento tenía daño estructural, distinto a que una cosa esté a punto de colapsar. Un daño estructural puede ser que haya un muro de sostén en un edificio que tenga una grieta horizontal que recorra todo el edificio, pero que no ha sufrido desplazamiento. Cuando uno ve que el muro está desplazado, desaplomado, ahí hay un riesgo de colapso evidente”, indicó Vásquez.
Ambos arquitectos señalaron que esta condición es crítica, considerando la nominación de Valparaíso como Patrimonio de la Humanidad, ya que su juicio esto se aborda sólo desde la apariencia, sin considerar lo de fondo.
El estudio realizado por la Escuela de Construcción Civil fue entregado al Rector Aldo Valle, para que se difunda en los canales pertinentes, mientras tanto, la información recogida en el estudio por la Escuela de Arquitectura fue entregada al municipio.
Arquitectos y constructores civiles de la Universidad de Valparaíso dieron a conocer estudios sobre los efectos del terremoto del 27 de febrero en inmuebles de la ciudad, las estimaciones establecen el nivel de riesgo del área patrimonial y la peligrosidad de caída de fachadas en las principales calles de la ciudad.
El primer estudio fue una pesquisa de la Escuela de Construcción Civil de la Universidad de Valparaíso, que salieron el mismo sábado 27 de febrero a revisar el estado de las fachadas de diferentes inmuebles en la ciudad puerto.
Los especialistas realizaron un catastro de los daños en fachadas de 103 inmuebles tradicionales del céntrico sector de Pedro Montt, calle Victoria e Independencia, además de parte del barrio Puerto. En principio un 28 por ciento de las fachadas de los inmuebles investigados presentaban después del terremoto un cierto riego de caída.
Los resultados del estudio “Diagnóstico preliminar efectos del sismo del sábado 27 de febrero 2010”, fueron dados a conocer por el académico Uriel Padilla, de la Escuela de Construcción Civil, estimando los niveles de riesgo para la población en cuanto a peligro de caída de fachadas.
“En este momento el nivel es bajo y asociamos a eso que ha habido mejoramiento del grado de deterioro, pero aún así recomendamos a la gente que mire hacia arriba y no al piso. No alcanza a ser el 50, entonces estadísticamente si hablamos sobre el 50 o bajo el 50, ahí podríamos calificar, pero en este caso no. Es advertir a la comunidad que, en estos momentos, tiene que resolver el tema, no solo poner una latita donde se me cayó un metro cuadrado de revoque”, sostuvo Padilla.
El segundo estudio fue difundido por los arquitectos Osvaldo Bizama y José Agustín Vásquez, trabajo realizado para la Municipalidad de Valparaíso y a cargo de académicos de la Escuela de Arquitectura.
Este estudio consistió en la evaluación de inmuebles en el casco histórico de la ciudad, contando 160, muchos de ellos dañados gravemente, que no se notan en apariencia, según lo señalado por Vásquez.
“Cerca de un 30 por ciento tenía daño estructural, distinto a que una cosa esté a punto de colapsar. Un daño estructural puede ser que haya un muro de sostén en un edificio que tenga una grieta horizontal que recorra todo el edificio, pero que no ha sufrido desplazamiento. Cuando uno ve que el muro está desplazado, desaplomado, ahí hay un riesgo de colapso evidente”, indicó Vásquez.
Ambos arquitectos señalaron que esta condición es crítica, considerando la nominación de Valparaíso como Patrimonio de la Humanidad, ya que su juicio esto se aborda sólo desde la apariencia, sin considerar lo de fondo.
El estudio realizado por la Escuela de Construcción Civil fue entregado al Rector Aldo Valle, para que se difunda en los canales pertinentes, mientras tanto, la información recogida en el estudio por la Escuela de Arquitectura fue entregada al municipio.
