El fortalecimiento de la educación pública y el potenciar a la Universidad de Chile como líder en formación académica e investigación son los puntos donde convergen los tres candidatos a la rectoría de la casa de estudios más antigua del país. Sin embargo, las propuestas de financiamiento de los académicos, que cada año emigran al sector privado, es lo que los diferencia.
Un proceso de elección que no cuenta con la participación del alumnado, quienes no sólo pueden votar, sino que tampoco en el debate recién desarrollado se les concede el derecho a opinar ni preguntar a quienes pretenden liderar su casa de estudios.
Con poco más de ocho minutos, cada uno de los candidatos pudo explicar las principales propuestas de su programa.
Desde una mirada crítica a la actual administración, el decano de la Facultad de Ciencias, Raúl Morales, insistió en que no “comparte el modelo impuesto por Víctor Pérez, actual rector, pues es un método que “hacia afuera se vende como una universidad pública, pero en la práctica, lo definimos como universidad privada”.
El doctor Morales enfatizó en la necesidad de potenciar la investigación y luchar contra la excesiva centralización de la universidad. Además, aseguró que en caso de va a equilibrar las remuneraciones de los académicos para impedir el éxodo de docentes al sector privado.
En tanto, el actual rector de la Universidad de Chile, Víctor Pérez, enumeró los logros obtenidos durante su gestión. Destacó entre ellos el retiro voluntario, la inversión de siete mil millones de pesos en el Hospital Clínico, la disminución de la deuda histórica y el emblemático proyecto Juan Gómez Millas. Logros que calificó como “una meta cumplida para el 2010”.
No obstante, Pérez recalcó que la deuda de la Universidad de Chile es que ésta “lidere la recuperación de la educación pública”. Para ello, propone “aumentar el número de estudiantes, darles oportunidad a estudiantes de quintiles más bajos que entren a la universidad por elementos complementarios a la PSU y avanzar en los proyectos educativos tanto de pregrado como postgrado”. Agregó también la necesidad de que la Universidad de Chile “incida en la formación de profesores”.
Finalmente el ex prorrector Jorge Las Heras se sumó a los planteamientos que piden al gobierno mayores recursos a las entidades de educación fiscales. Pero centró sus palabras en el que, según él, “es uno de los serios problemas de la universidad”: la comunicación y el dar a conocer el trabajo que se desarrolla en cada una de sus unidades académicas, pues “ni el Estado ni la sociedad chilena conocen lo que hacemos”.
La jornada de debate estuvo marcada por la denominada “funa de los estudiantes de enfermería”, quienes manifestando su preocupación por la crisis que experimenta su facultad y por no poder hacer preguntas a los candidatos, “se pusieron de pie y alzaron la voz”, insistiendo en que ninguno de los tres candidatos ha propuesto medidas reales que permitan mejorar las condiciones laborales de los profesores. Un elemento que incide directamente en la formación académica.
Las elecciones de rector se efectuarán el próximo 6 de mayo, con un nuevo sistema de votación que, por primera vez, establece un sistema de validación de los votos proporcional a las horas académicas de los docentes.
Ahora existirán tres modalidades de voto. Los docentes que cumplan jornada completa con un voto; los de media jornada con medio voto y los que tengan menos de 27 horas académicas, sólo un octavo de voto.