El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desocupación bajó a 8,6 por ciento en el trimestre febrero- abril, lo que refleja una disminución de 0,4 punto porcentual respecto del período móvil anterior.
A diferencia de lo que fue la medición previa, en la actual encuesta nacional de empleo se logró realizar la totalidad del levantamiento de datos de las zonas más afectadas por el terremoto.
Según el ente estadístico, este resultado se explica por el aumento del empleo total pues si bien disminuyó en sectores como agricultura y en pesca, de manera esperable por la estacionalidad del periodo y por el impacto del terremoto en las regiones de Biobío y Maule, aumentó en otras ramas de actividad, compensando dichas pérdidas.
Al revisar los resultados por regiones, los datos muestran que sólo las de Valparaíso y Bíobío registraron una tasa superior al diez por ciento alcanzando el 10,4y el 10,6 por ciento respectivamente.
En el otro extremo, las regiones con el menor desempleo entre febrero y abril fueron las de Aysén, con sólo un 3,5 por ciento y O’Higgins, donde cayó desde un dato previo de seis a un 5,3 por ciento.
El economista jefe de BanChile Inversiones, Rodrigo Aravena, dijo que el 8,6 por ciento de desocupación está lejos de las proyecciones del mercado y explicó que la cifra refleja el ciclo de recuperación de la actividad económica.
“La cifra fue menor a la que estábamos esperando. De hecho, creíamos que iba a ser sobre el nueve por ciento y esto deja en evidencia que la economía chilena está en un proceso de recuperación importante que no se da sólo por tener tasas de interés bajas y una política fiscal expansiva todavía, sino que aquí hay un dinamismo del mercado laboral”, dijo el experto.
Respecto del impacto real del sismo sobre el mercado del trabajo en el Bío-Bío y el Maule, el economista de la Universidad de Chile, Joseph Ramos, sostuvo que pese a lo esperado, la catástrofe generó plazas de trabajo que no existían antes del 27 de febrero.
“Si bien el terremoto destruyó por algún tiempo algunos puestos permanentes en industrias dañadas, ha creado trabajos transitorios, pero efectivos y reales, en todo lo que es la reparación y los inicios de la reconstrucción. Se vislumbra un año positivo para el empleo ya que el desempleo va a descender en medio o un punto más de lo que habría sido en ausencia del sismo”, precisó Ramos.
En tanto, la ministra del Trabajo, Camila Merino, calificó como “positiva” la cifra de desocupación de 8,6% para el trimestre febrero-abril.
La autoridad, sin embargo, aseguró que están preocupados con lo que ocurre en ciertas regiones como la del Bío Bío que “perdió muchos empleos y otras ciudades para lo cual tenemos programado temas específicos”.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desocupación bajó a 8,6 por ciento en el trimestre febrero- abril, lo que refleja una disminución de 0,4 punto porcentual respecto del período móvil anterior.
A diferencia de lo que fue la medición previa, en la actual encuesta nacional de empleo se logró realizar la totalidad del levantamiento de datos de las zonas más afectadas por el terremoto.
Según el ente estadístico, este resultado se explica por el aumento del empleo total pues si bien disminuyó en sectores como agricultura y en pesca, de manera esperable por la estacionalidad del periodo y por el impacto del terremoto en las regiones de Biobío y Maule, aumentó en otras ramas de actividad, compensando dichas pérdidas.
Al revisar los resultados por regiones, los datos muestran que sólo las de Valparaíso y Bíobío registraron una tasa superior al diez por ciento alcanzando el 10,4y el 10,6 por ciento respectivamente.
En el otro extremo, las regiones con el menor desempleo entre febrero y abril fueron las de Aysén, con sólo un 3,5 por ciento y O’Higgins, donde cayó desde un dato previo de seis a un 5,3 por ciento.
El economista jefe de BanChile Inversiones, Rodrigo Aravena, dijo que el 8,6 por ciento de desocupación está lejos de las proyecciones del mercado y explicó que la cifra refleja el ciclo de recuperación de la actividad económica.
“La cifra fue menor a la que estábamos esperando. De hecho, creíamos que iba a ser sobre el nueve por ciento y esto deja en evidencia que la economía chilena está en un proceso de recuperación importante que no se da sólo por tener tasas de interés bajas y una política fiscal expansiva todavía, sino que aquí hay un dinamismo del mercado laboral”, dijo el experto.
Respecto del impacto real del sismo sobre el mercado del trabajo en el Bío-Bío y el Maule, el economista de la Universidad de Chile, Joseph Ramos, sostuvo que pese a lo esperado, la catástrofe generó plazas de trabajo que no existían antes del 27 de febrero.
“Si bien el terremoto destruyó por algún tiempo algunos puestos permanentes en industrias dañadas, ha creado trabajos transitorios, pero efectivos y reales, en todo lo que es la reparación y los inicios de la reconstrucción. Se vislumbra un año positivo para el empleo ya que el desempleo va a descender en medio o un punto más de lo que habría sido en ausencia del sismo”, precisó Ramos.
En tanto, la ministra del Trabajo, Camila Merino, calificó como “positiva” la cifra de desocupación de 8,6% para el trimestre febrero-abril.
La autoridad, sin embargo, aseguró que están preocupados con lo que ocurre en ciertas regiones como la del Bío Bío que “perdió muchos empleos y otras ciudades para lo cual tenemos programado temas específicos”.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que la tasa de desocupación bajó a 8,6 por ciento en el trimestre febrero- abril, lo que refleja una disminución de 0,4 punto porcentual respecto del período móvil anterior.
A diferencia de lo que fue la medición previa, en la actual encuesta nacional de empleo se logró realizar la totalidad del levantamiento de datos de las zonas más afectadas por el terremoto.
Según el ente estadístico, este resultado se explica por el aumento del empleo total pues si bien disminuyó en sectores como agricultura y en pesca, de manera esperable por la estacionalidad del periodo y por el impacto del terremoto en las regiones de Biobío y Maule, aumentó en otras ramas de actividad, compensando dichas pérdidas.
Al revisar los resultados por regiones, los datos muestran que sólo las de Valparaíso y Bíobío registraron una tasa superior al diez por ciento alcanzando el 10,4y el 10,6 por ciento respectivamente.
En el otro extremo, las regiones con el menor desempleo entre febrero y abril fueron las de Aysén, con sólo un 3,5 por ciento y O’Higgins, donde cayó desde un dato previo de seis a un 5,3 por ciento.
El economista jefe de BanChile Inversiones, Rodrigo Aravena, dijo que el 8,6 por ciento de desocupación está lejos de las proyecciones del mercado y explicó que la cifra refleja el ciclo de recuperación de la actividad económica.
“La cifra fue menor a la que estábamos esperando. De hecho, creíamos que iba a ser sobre el nueve por ciento y esto deja en evidencia que la economía chilena está en un proceso de recuperación importante que no se da sólo por tener tasas de interés bajas y una política fiscal expansiva todavía, sino que aquí hay un dinamismo del mercado laboral”, dijo el experto.
Respecto del impacto real del sismo sobre el mercado del trabajo en el Bío-Bío y el Maule, el economista de la Universidad de Chile, Joseph Ramos, sostuvo que pese a lo esperado, la catástrofe generó plazas de trabajo que no existían antes del 27 de febrero.
“Si bien el terremoto destruyó por algún tiempo algunos puestos permanentes en industrias dañadas, ha creado trabajos transitorios, pero efectivos y reales, en todo lo que es la reparación y los inicios de la reconstrucción. Se vislumbra un año positivo para el empleo ya que el desempleo va a descender en medio o un punto más de lo que habría sido en ausencia del sismo”, precisó Ramos.
En tanto, la ministra del Trabajo, Camila Merino, calificó como “positiva” la cifra de desocupación de 8,6% para el trimestre febrero-abril.
La autoridad, sin embargo, aseguró que están preocupados con lo que ocurre en ciertas regiones como la del Bío Bío que “perdió muchos empleos y otras ciudades para lo cual tenemos programado temas específicos”.
