El encuentro, organizado por la Universidad de Chile, en estrecha relación con INNOVA-CORFO, la FAO, y los ministerios de Bienes Nacionales, Agricultura y Energía, se realiza desde hoy y hasta este jueves en la sede de la Oficina Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación para América Latina y el Caribe.
Los objetivos del seminario sobre biomasa son entregar información a los sectores público y privado sobre las distintas fuentes alternativas no tradicionales de energía vegetal renovable y oportunidades de cultivos que podrían proveer materia prima para el desarrollo de la bioenergía, así como discutir sobre el potencial de expansión de la frontera agrícola en Chile.
El investigador de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, Manuel Paneque, pionero en la producción de Jatropha en el país, detalló parte de los beneficios y desafíos que tendría la producción de biocombustibles en Chile.
“Los aspectos fundamentales que hemos identificado nosotros en la intervención para que esto ocurra son la fuerte alza en los precios de los combustibles, no se han explotado todas las alternativas para la generación de energía de manera sustentable. Las necesidades de energía aumentan en forma sostenida, el sector agrícola en nuestro país no tiene ofertas de nuevas especies que sean capaces de introducirse en áreas que hoy no tienen competencia, es decir, no hay desarrollo agrícola, más fundamentalmente el norte de Chile, específicamente el secano costero, y por último el país necesita diversificar su matriz energética”, indicó el investigador.
En la misma línea, Francisco Marcos, especialista de la U. Politécnica de Madrid, defendió la sustentabilidad que tiene el cultivo de energía vegetal renovable en las economías emergentes.
“Un desarrollo sostenible cuando es a la vez equitativo y viable. Desde el punto de vista social es equitativo y es también económicamente equitativo, cuando un desarrollo desde el punto de vista social y medio ambiental es libre, pues es sostenible. No sólo es la economía y la sociedad, sino que también es el medio ambiente. Los bosques sustentables y los beneficios de estos cultivos: Obtención de bio combustibles, fijación del CO2, creación de empleos”, señaló el experto.
En medio de este escenario, varios grupos ecologistas se han mostrado escépticos frente a la propagación de los biocombustibles debido al encarecimiento que produciría en el precio de los alimentos y los efectos nocivos que dejaría en las hectáreas de bosque nativo.
Los organizadores de la actividad dijeron que como resultado de las presentaciones y de los debates generados durante la conferencia, se obtendrán las líneas fundamentales para establecer la RED DE BIOMASA DE CHILE, de manera de que se constituya en una instancia de trabajo en el tiempo.
El encuentro, organizado por la Universidad de Chile, en estrecha relación con INNOVA-CORFO, la FAO, y los ministerios de Bienes Nacionales, Agricultura y Energía, se realiza desde hoy y hasta este jueves en la sede de la Oficina Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación para América Latina y el Caribe.
Los objetivos del seminario sobre biomasa son entregar información a los sectores público y privado sobre las distintas fuentes alternativas no tradicionales de energía vegetal renovable y oportunidades de cultivos que podrían proveer materia prima para el desarrollo de la bioenergía, así como discutir sobre el potencial de expansión de la frontera agrícola en Chile.
El investigador de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, Manuel Paneque, pionero en la producción de Jatropha en el país, detalló parte de los beneficios y desafíos que tendría la producción de biocombustibles en Chile.
“Los aspectos fundamentales que hemos identificado nosotros en la intervención para que esto ocurra son la fuerte alza en los precios de los combustibles, no se han explotado todas las alternativas para la generación de energía de manera sustentable. Las necesidades de energía aumentan en forma sostenida, el sector agrícola en nuestro país no tiene ofertas de nuevas especies que sean capaces de introducirse en áreas que hoy no tienen competencia, es decir, no hay desarrollo agrícola, más fundamentalmente el norte de Chile, específicamente el secano costero, y por último el país necesita diversificar su matriz energética”, indicó el investigador.
En la misma línea, Francisco Marcos, especialista de la U. Politécnica de Madrid, defendió la sustentabilidad que tiene el cultivo de energía vegetal renovable en las economías emergentes.
“Un desarrollo sostenible cuando es a la vez equitativo y viable. Desde el punto de vista social es equitativo y es también económicamente equitativo, cuando un desarrollo desde el punto de vista social y medio ambiental es libre, pues es sostenible. No sólo es la economía y la sociedad, sino que también es el medio ambiente. Los bosques sustentables y los beneficios de estos cultivos: Obtención de bio combustibles, fijación del CO2, creación de empleos”, señaló el experto.
En medio de este escenario, varios grupos ecologistas se han mostrado escépticos frente a la propagación de los biocombustibles debido al encarecimiento que produciría en el precio de los alimentos y los efectos nocivos que dejaría en las hectáreas de bosque nativo.
Los organizadores de la actividad dijeron que como resultado de las presentaciones y de los debates generados durante la conferencia, se obtendrán las líneas fundamentales para establecer la RED DE BIOMASA DE CHILE, de manera de que se constituya en una instancia de trabajo en el tiempo.
El encuentro, organizado por la Universidad de Chile, en estrecha relación con INNOVA-CORFO, la FAO, y los ministerios de Bienes Nacionales, Agricultura y Energía, se realiza desde hoy y hasta este jueves en la sede de la Oficina Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación para América Latina y el Caribe.
Los objetivos del seminario sobre biomasa son entregar información a los sectores público y privado sobre las distintas fuentes alternativas no tradicionales de energía vegetal renovable y oportunidades de cultivos que podrían proveer materia prima para el desarrollo de la bioenergía, así como discutir sobre el potencial de expansión de la frontera agrícola en Chile.
El investigador de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, Manuel Paneque, pionero en la producción de Jatropha en el país, detalló parte de los beneficios y desafíos que tendría la producción de biocombustibles en Chile.
“Los aspectos fundamentales que hemos identificado nosotros en la intervención para que esto ocurra son la fuerte alza en los precios de los combustibles, no se han explotado todas las alternativas para la generación de energía de manera sustentable. Las necesidades de energía aumentan en forma sostenida, el sector agrícola en nuestro país no tiene ofertas de nuevas especies que sean capaces de introducirse en áreas que hoy no tienen competencia, es decir, no hay desarrollo agrícola, más fundamentalmente el norte de Chile, específicamente el secano costero, y por último el país necesita diversificar su matriz energética”, indicó el investigador.
En la misma línea, Francisco Marcos, especialista de la U. Politécnica de Madrid, defendió la sustentabilidad que tiene el cultivo de energía vegetal renovable en las economías emergentes.
“Un desarrollo sostenible cuando es a la vez equitativo y viable. Desde el punto de vista social es equitativo y es también económicamente equitativo, cuando un desarrollo desde el punto de vista social y medio ambiental es libre, pues es sostenible. No sólo es la economía y la sociedad, sino que también es el medio ambiente. Los bosques sustentables y los beneficios de estos cultivos: Obtención de bio combustibles, fijación del CO2, creación de empleos”, señaló el experto.
En medio de este escenario, varios grupos ecologistas se han mostrado escépticos frente a la propagación de los biocombustibles debido al encarecimiento que produciría en el precio de los alimentos y los efectos nocivos que dejaría en las hectáreas de bosque nativo.
Los organizadores de la actividad dijeron que como resultado de las presentaciones y de los debates generados durante la conferencia, se obtendrán las líneas fundamentales para establecer la RED DE BIOMASA DE CHILE, de manera de que se constituya en una instancia de trabajo en el tiempo.
