Los trabajadores de la empresa Gran Santiago, que cubre los recorridos de la Zona B del Transantiago, esta mañana anunciaron una huelga legal.
Los choferes exigen un aumento del 5 por ciento en los salarios y piden mejoras en los terminales y en la mantención de los microbuses.
Patricio Feliu, dirigente de los huelguistas, denunció malas condiciones laborales, entre las que se cuentan no tener baños ni agua potable para el normal funcionamiento de sus actividades.
“El 80 por ciento de los buses son máquinas enchuladas del sistema amarillo de transporte, por lo tanto, en la forma en que trabajan los operarios acá es bastante malo. Hay máquinas sin freno muchas veces lo que origina accidentes, neumáticos lisos, sin vidrios, se llueven por la malas condiciones de las carrocerías”, señaló el dirigente.
La movilización afectaría el transporte en las comunas de Huechuraba, Independencia, Quilicura, Renca, Recoleta y Conchalí, donde se trasladan unas siete mil personas diariamente.
Sin embargo, otros sindicatos de la empresa Gran Santiago no se sumaron al paro, ya que lograron acuerdos con anterioridad, que consideran la renovación de los buses y el mejoramiento de los paraderos, obras que comienzan en agosto.
“La gente hoy está mucho mejor con los bonos, el trabajador antiguo queda ganado 590 mil pesos, se incrementó en un 15 por ciento sus remuneraciones y a los nuevos también se les aumento un 15 por ciento. es un tema de capacidad de negociación y llegamos a buenos acuerdos con la empresa pensando en el futuro”, indicó Luis Campos, dirigente de uno de los sindicatos que no adhirió a la huelga.
Durante la mañana el servicio ha funcionado con relativa normalidad en la zona del alimentador B de la capital y según la gerencia de la empresa Gran Santiago serían pocos los empleados que se habrían adherido a la paralización.
Los trabajadores de la empresa Gran Santiago, que cubre los recorridos de la Zona B del Transantiago, esta mañana anunciaron una huelga legal.
Los choferes exigen un aumento del 5 por ciento en los salarios y piden mejoras en los terminales y en la mantención de los microbuses.
Patricio Feliu, dirigente de los huelguistas, denunció malas condiciones laborales, entre las que se cuentan no tener baños ni agua potable para el normal funcionamiento de sus actividades.
“El 80 por ciento de los buses son máquinas enchuladas del sistema amarillo de transporte, por lo tanto, en la forma en que trabajan los operarios acá es bastante malo. Hay máquinas sin freno muchas veces lo que origina accidentes, neumáticos lisos, sin vidrios, se llueven por la malas condiciones de las carrocerías”, señaló el dirigente.
La movilización afectaría el transporte en las comunas de Huechuraba, Independencia, Quilicura, Renca, Recoleta y Conchalí, donde se trasladan unas siete mil personas diariamente.
Sin embargo, otros sindicatos de la empresa Gran Santiago no se sumaron al paro, ya que lograron acuerdos con anterioridad, que consideran la renovación de los buses y el mejoramiento de los paraderos, obras que comienzan en agosto.
“La gente hoy está mucho mejor con los bonos, el trabajador antiguo queda ganado 590 mil pesos, se incrementó en un 15 por ciento sus remuneraciones y a los nuevos también se les aumento un 15 por ciento. es un tema de capacidad de negociación y llegamos a buenos acuerdos con la empresa pensando en el futuro”, indicó Luis Campos, dirigente de uno de los sindicatos que no adhirió a la huelga.
Durante la mañana el servicio ha funcionado con relativa normalidad en la zona del alimentador B de la capital y según la gerencia de la empresa Gran Santiago serían pocos los empleados que se habrían adherido a la paralización.
Los trabajadores de la empresa Gran Santiago, que cubre los recorridos de la Zona B del Transantiago, esta mañana anunciaron una huelga legal.
Los choferes exigen un aumento del 5 por ciento en los salarios y piden mejoras en los terminales y en la mantención de los microbuses.
Patricio Feliu, dirigente de los huelguistas, denunció malas condiciones laborales, entre las que se cuentan no tener baños ni agua potable para el normal funcionamiento de sus actividades.
“El 80 por ciento de los buses son máquinas enchuladas del sistema amarillo de transporte, por lo tanto, en la forma en que trabajan los operarios acá es bastante malo. Hay máquinas sin freno muchas veces lo que origina accidentes, neumáticos lisos, sin vidrios, se llueven por la malas condiciones de las carrocerías”, señaló el dirigente.
La movilización afectaría el transporte en las comunas de Huechuraba, Independencia, Quilicura, Renca, Recoleta y Conchalí, donde se trasladan unas siete mil personas diariamente.
Sin embargo, otros sindicatos de la empresa Gran Santiago no se sumaron al paro, ya que lograron acuerdos con anterioridad, que consideran la renovación de los buses y el mejoramiento de los paraderos, obras que comienzan en agosto.
“La gente hoy está mucho mejor con los bonos, el trabajador antiguo queda ganado 590 mil pesos, se incrementó en un 15 por ciento sus remuneraciones y a los nuevos también se les aumento un 15 por ciento. es un tema de capacidad de negociación y llegamos a buenos acuerdos con la empresa pensando en el futuro”, indicó Luis Campos, dirigente de uno de los sindicatos que no adhirió a la huelga.
Durante la mañana el servicio ha funcionado con relativa normalidad en la zona del alimentador B de la capital y según la gerencia de la empresa Gran Santiago serían pocos los empleados que se habrían adherido a la paralización.
