Muy por encima del 1,5 por ciento registrado entre enero y marzo y marcada por el dinamismo del comercio y la inversión, la economía nacional experimentó un crecimiento de 6,5 por ciento en el segundo trimestre de este año.
La cifra representa la mayor expansión en cinco años, luego del crecimiento de 7 por ciento registrado justamente en el segundo trimestre de 2005.
Con esta expansión del Producto Interno Bruto (PIB) la actividad estaría dejando atrás los daños que provocó el terremoto en el sistema productivo y confirma la acelerada recuperación de la economía después de la crisis.
En su informe de Cuentas Nacionales, el Banco Central apunta que se registró un día hábil más que en igual trimestre de 2009, con lo que el efecto calendario resultó igual a 0,2 puntos porcentuales.
Al reaccionar a la cifra, el Presidente Sebastián Piñera dijo que además de la creación de más empleos este dato traerá consigo un aumento del gasto social. En tanto, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, señaló que se trata de “una recuperación violenta, potente respecto de la caída que tuvo el país” el año pasado.
El gerente de estudios de la consultora Gemines, Alejandro Fernández, afirmó que este sorpresivo resultado impulsará un crecimiento mayor a cinco por ciento este 2010.
El economista Erik Haindl, a su vez, dice que la baja base de comparación explica la expansión de 6,5 por ciento del segundo trimestre, al mismo tiempo señala que esta cifra viene acompañada de un estancamiento de la productividad total de factores.
Respecto de la expansión mes a mes, la actividad productiva creció 4,3 por ciento comparado con el período inmediatamente anterior.
Asimismo, los datos del Central muestran una expansión de la demanda interna de 19,4 por ciento respecto del 11,8 por ciento del trimestre anterior, impulsada por la inversión en maquinaria y acumulación de existencias, y el consumo, la mayoría en bienes durables.
Muy por encima del 1,5 por ciento registrado entre enero y marzo y marcada por el dinamismo del comercio y la inversión, la economía nacional experimentó un crecimiento de 6,5 por ciento en el segundo trimestre de este año.
La cifra representa la mayor expansión en cinco años, luego del crecimiento de 7 por ciento registrado justamente en el segundo trimestre de 2005.
Con esta expansión del Producto Interno Bruto (PIB) la actividad estaría dejando atrás los daños que provocó el terremoto en el sistema productivo y confirma la acelerada recuperación de la economía después de la crisis.
En su informe de Cuentas Nacionales, el Banco Central apunta que se registró un día hábil más que en igual trimestre de 2009, con lo que el efecto calendario resultó igual a 0,2 puntos porcentuales.
Al reaccionar a la cifra, el Presidente Sebastián Piñera dijo que además de la creación de más empleos este dato traerá consigo un aumento del gasto social. En tanto, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, señaló que se trata de “una recuperación violenta, potente respecto de la caída que tuvo el país” el año pasado.
El gerente de estudios de la consultora Gemines, Alejandro Fernández, afirmó que este sorpresivo resultado impulsará un crecimiento mayor a cinco por ciento este 2010.
El economista Erik Haindl, a su vez, dice que la baja base de comparación explica la expansión de 6,5 por ciento del segundo trimestre, al mismo tiempo señala que esta cifra viene acompañada de un estancamiento de la productividad total de factores.
Respecto de la expansión mes a mes, la actividad productiva creció 4,3 por ciento comparado con el período inmediatamente anterior.
Asimismo, los datos del Central muestran una expansión de la demanda interna de 19,4 por ciento respecto del 11,8 por ciento del trimestre anterior, impulsada por la inversión en maquinaria y acumulación de existencias, y el consumo, la mayoría en bienes durables.
Muy por encima del 1,5 por ciento registrado entre enero y marzo y marcada por el dinamismo del comercio y la inversión, la economía nacional experimentó un crecimiento de 6,5 por ciento en el segundo trimestre de este año.
La cifra representa la mayor expansión en cinco años, luego del crecimiento de 7 por ciento registrado justamente en el segundo trimestre de 2005.
Con esta expansión del Producto Interno Bruto (PIB) la actividad estaría dejando atrás los daños que provocó el terremoto en el sistema productivo y confirma la acelerada recuperación de la economía después de la crisis.
En su informe de Cuentas Nacionales, el Banco Central apunta que se registró un día hábil más que en igual trimestre de 2009, con lo que el efecto calendario resultó igual a 0,2 puntos porcentuales.
Al reaccionar a la cifra, el Presidente Sebastián Piñera dijo que además de la creación de más empleos este dato traerá consigo un aumento del gasto social. En tanto, el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, señaló que se trata de “una recuperación violenta, potente respecto de la caída que tuvo el país” el año pasado.
El gerente de estudios de la consultora Gemines, Alejandro Fernández, afirmó que este sorpresivo resultado impulsará un crecimiento mayor a cinco por ciento este 2010.
El economista Erik Haindl, a su vez, dice que la baja base de comparación explica la expansión de 6,5 por ciento del segundo trimestre, al mismo tiempo señala que esta cifra viene acompañada de un estancamiento de la productividad total de factores.
Respecto de la expansión mes a mes, la actividad productiva creció 4,3 por ciento comparado con el período inmediatamente anterior.
Asimismo, los datos del Central muestran una expansión de la demanda interna de 19,4 por ciento respecto del 11,8 por ciento del trimestre anterior, impulsada por la inversión en maquinaria y acumulación de existencias, y el consumo, la mayoría en bienes durables.
