Una de las dos máquinas que perforan el cerro donde se encuentra la mina San José para abrir un ducto que permita rescatar a los 33 mineros atrapados desde el 5 de agosto alcanzó a los 123 metros de profundidad, mientras que la otra avanza en los 113 metros.
De esta manera, la máquina que primero comenzó a trabajar, la Strata 950, llegó a los 113 metros de profundidad, en tanto la T-130 que empezó a trabajar el domingo ya está en los 123 metros, superando incluso algunos inconvenientes técnicos ayer lunes, dijo el ingeniero René Aguilar.
Sin embargo, no se adelantará el rescate, aclaró el ingeniero, porque el trabajo de la T-130 manteniendo los plazos fijados para el rescate, fijado para noviembre o diciembre.