Actualmente en Chile más de 120 mil mujeres al año, de distintas edades y condición social, se realizan abortos clandestinos y cerca de dos mil sufren embarazos inviables, pero, según indica nuestra legislación, no pueden interrumpirlo, lo que hace que muchas veces pongan en riesgo sus vidas.
Por esta razón, los senadores PPD, Guido Girardi, PS Fulvio Rossi y DC, Ximena Rincón, junto a diversas organizaciones de la sociedad civil realizaron un llamado al Congreso para que este martes 6 de septiembre se apruebe por unanimidad la idea de legislar sobre el proyecto de ley de aborto terapéutico, y que su discusión se aborde con transparencia, seriedad y de cara a la ciudadanía.
En esa línea, la ex ministra de Salud y vocera del Movimiento por la Interrupción legal del embarazo, súmate (MILES), Soledad Barría, afirmó que “este país no puede esconder la cabeza y no discutir. Hoy están muriendo mujeres que ponen en peligro su vida por el embarazo y eso no puede ser. La salud de la mujer es una de las causales que tiene que ser discutida como una de las posibilidades para poder interrumpir el embarazo. La segunda es la violación que lleva a embarazos absolutamente indeseados porque son por medio de violencia”.
Además de conservar la vida de la madre y los casos de violación, piden que se incorpore como causal de aborto el riesgo de la madre cuando los fetos tienen malformaciones y son inviables, es decir, que nacerán muertos de todas maneras
Natalia Flores, secretaria ejecutiva del Observatorio de Género, se refirió a la necesidad de acabar con una legislación que restringe la libertad sexual y reproductiva de las mujeres, afectando con ello el pleno ejercicio de sus derechos y capacidad de decidir.
“Creemos que las mujeres tienen derecho a decidir especialmente cuando están en riesgo sus vidas. Es deber del Estado, de la sociedad y del Parlamento entregarle esa posibilidad a las mujeres. Además creemos que es en el espacio de la representación ciudadana a través del voto donde se debe llevar la discusión y debe dejarse de lado los temas tabús que estuvieron durante tanto tiempo cercados en nuestro Congreso”, sostuvo Flores.
Esta moción fue respaldada por diversas organizaciones como la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe, el Movimiento de Liberación Homosexual (MOVILH), y Mujeres Católicas por el Derecho a Decidir, las que afirmaron estar de acuerdo con estas tres causales, “sin dejar de ser católicas”.
Se busca entonces recuperar este instrumento, antes contemplado en el artículo 119 del Código Sanitario y que se perdió de forma arbitraria.
“Nuestro país tuvo esta legislación en el siglo XX. Desde el año 31 al 79, eliminada sin discusión pública como se hacían las cosas en aquella época. Después de mucho tiempo estamos discutiendo en el Parlamento un proyecto de ley que se hace cargo de lo que pasa con la vida de las mujeres y creo que merecemos como país al menos tener la discusión legislativa que sea transparente y pública y que dejemos de hacer las cosas a escondidas”, afirmó la senadora, Ximena Rincón.
Con esto se pide que la Cámara Alta pueda discutir y votar favorablemente alguna de las iniciativas de ley presentadas, ya que con la penalización sin excepciones de la interrupción del embarazo, hoy Chile está violando los compromisos internacionales que ha adquirido en materia de derechos humanos de las mujeres.
Actualmente en Chile más de 120 mil mujeres al año, de distintas edades y condición social, se realizan abortos clandestinos y cerca de dos mil sufren embarazos inviables, pero, según indica nuestra legislación, no pueden interrumpirlo, lo que hace que muchas veces pongan en riesgo sus vidas.
Por esta razón, los senadores PPD, Guido Girardi, PS Fulvio Rossi y DC, Ximena Rincón, junto a diversas organizaciones de la sociedad civil realizaron un llamado al Congreso para que este martes 6 de septiembre se apruebe por unanimidad la idea de legislar sobre el proyecto de ley de aborto terapéutico, y que su discusión se aborde con transparencia, seriedad y de cara a la ciudadanía.
En esa línea, la ex ministra de Salud y vocera del Movimiento por la Interrupción legal del embarazo, súmate (MILES), Soledad Barría, afirmó que “este país no puede esconder la cabeza y no discutir. Hoy están muriendo mujeres que ponen en peligro su vida por el embarazo y eso no puede ser. La salud de la mujer es una de las causales que tiene que ser discutida como una de las posibilidades para poder interrumpir el embarazo. La segunda es la violación que lleva a embarazos absolutamente indeseados porque son por medio de violencia”.
Además de conservar la vida de la madre y los casos de violación, piden que se incorpore como causal de aborto el riesgo de la madre cuando los fetos tienen malformaciones y son inviables, es decir, que nacerán muertos de todas maneras
Natalia Flores, secretaria ejecutiva del Observatorio de Género, se refirió a la necesidad de acabar con una legislación que restringe la libertad sexual y reproductiva de las mujeres, afectando con ello el pleno ejercicio de sus derechos y capacidad de decidir.
“Creemos que las mujeres tienen derecho a decidir especialmente cuando están en riesgo sus vidas. Es deber del Estado, de la sociedad y del Parlamento entregarle esa posibilidad a las mujeres. Además creemos que es en el espacio de la representación ciudadana a través del voto donde se debe llevar la discusión y debe dejarse de lado los temas tabús que estuvieron durante tanto tiempo cercados en nuestro Congreso”, sostuvo Flores.
Esta moción fue respaldada por diversas organizaciones como la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe, el Movimiento de Liberación Homosexual (MOVILH), y Mujeres Católicas por el Derecho a Decidir, las que afirmaron estar de acuerdo con estas tres causales, “sin dejar de ser católicas”.
Se busca entonces recuperar este instrumento, antes contemplado en el artículo 119 del Código Sanitario y que se perdió de forma arbitraria.
“Nuestro país tuvo esta legislación en el siglo XX. Desde el año 31 al 79, eliminada sin discusión pública como se hacían las cosas en aquella época. Después de mucho tiempo estamos discutiendo en el Parlamento un proyecto de ley que se hace cargo de lo que pasa con la vida de las mujeres y creo que merecemos como país al menos tener la discusión legislativa que sea transparente y pública y que dejemos de hacer las cosas a escondidas”, afirmó la senadora, Ximena Rincón.
Con esto se pide que la Cámara Alta pueda discutir y votar favorablemente alguna de las iniciativas de ley presentadas, ya que con la penalización sin excepciones de la interrupción del embarazo, hoy Chile está violando los compromisos internacionales que ha adquirido en materia de derechos humanos de las mujeres.
Actualmente en Chile más de 120 mil mujeres al año, de distintas edades y condición social, se realizan abortos clandestinos y cerca de dos mil sufren embarazos inviables, pero, según indica nuestra legislación, no pueden interrumpirlo, lo que hace que muchas veces pongan en riesgo sus vidas.
Por esta razón, los senadores PPD, Guido Girardi, PS Fulvio Rossi y DC, Ximena Rincón, junto a diversas organizaciones de la sociedad civil realizaron un llamado al Congreso para que este martes 6 de septiembre se apruebe por unanimidad la idea de legislar sobre el proyecto de ley de aborto terapéutico, y que su discusión se aborde con transparencia, seriedad y de cara a la ciudadanía.
En esa línea, la ex ministra de Salud y vocera del Movimiento por la Interrupción legal del embarazo, súmate (MILES), Soledad Barría, afirmó que “este país no puede esconder la cabeza y no discutir. Hoy están muriendo mujeres que ponen en peligro su vida por el embarazo y eso no puede ser. La salud de la mujer es una de las causales que tiene que ser discutida como una de las posibilidades para poder interrumpir el embarazo. La segunda es la violación que lleva a embarazos absolutamente indeseados porque son por medio de violencia”.
Además de conservar la vida de la madre y los casos de violación, piden que se incorpore como causal de aborto el riesgo de la madre cuando los fetos tienen malformaciones y son inviables, es decir, que nacerán muertos de todas maneras
Natalia Flores, secretaria ejecutiva del Observatorio de Género, se refirió a la necesidad de acabar con una legislación que restringe la libertad sexual y reproductiva de las mujeres, afectando con ello el pleno ejercicio de sus derechos y capacidad de decidir.
“Creemos que las mujeres tienen derecho a decidir especialmente cuando están en riesgo sus vidas. Es deber del Estado, de la sociedad y del Parlamento entregarle esa posibilidad a las mujeres. Además creemos que es en el espacio de la representación ciudadana a través del voto donde se debe llevar la discusión y debe dejarse de lado los temas tabús que estuvieron durante tanto tiempo cercados en nuestro Congreso”, sostuvo Flores.
Esta moción fue respaldada por diversas organizaciones como la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO), la Red de Salud de las Mujeres Latinoamericanas y del Caribe, el Movimiento de Liberación Homosexual (MOVILH), y Mujeres Católicas por el Derecho a Decidir, las que afirmaron estar de acuerdo con estas tres causales, “sin dejar de ser católicas”.
Se busca entonces recuperar este instrumento, antes contemplado en el artículo 119 del Código Sanitario y que se perdió de forma arbitraria.
“Nuestro país tuvo esta legislación en el siglo XX. Desde el año 31 al 79, eliminada sin discusión pública como se hacían las cosas en aquella época. Después de mucho tiempo estamos discutiendo en el Parlamento un proyecto de ley que se hace cargo de lo que pasa con la vida de las mujeres y creo que merecemos como país al menos tener la discusión legislativa que sea transparente y pública y que dejemos de hacer las cosas a escondidas”, afirmó la senadora, Ximena Rincón.
Con esto se pide que la Cámara Alta pueda discutir y votar favorablemente alguna de las iniciativas de ley presentadas, ya que con la penalización sin excepciones de la interrupción del embarazo, hoy Chile está violando los compromisos internacionales que ha adquirido en materia de derechos humanos de las mujeres.
