A inicios de esta semana, el líder del Partido Progresista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, dijo al Diario Electrónico de Radio Universidad de Chile que él llevaba 16 meses planteando una conversación con colectividades de la Concertación para analizar puntos de acercamiento, pero que hasta la fecha “no hay ninguna respuesta”. Días después, se produjeron llamadas y encuentros y al final se planeó una reunión de Carolina Tohá, presidenta del PPD, con el jefe del PRO para hablar, precisamente, de convergencia.
En tanto, este viernes se efectuó un encuentro de Tohá con el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, quien estuvo acompañado de los dirigentes de la colectividad Lautaro Carmona, Claudia Pascual, Hugo Gutiérrez y Juan Andrés Lagos. El tema: intercambiar apreciaciones sobre posibles acuerdos y acercamientos con vista a crear un bloque opositor al gobierno de derecha de Sebastián Piñera.
La dirigente del PPD está exponiendo sus propuestas en cuanto a generar una mayoría nacional opositora que vaya más allá de la Concertación y que, de partida, encare al gobierno de derecha y pueda constituirse en una alternativa y, luego, permita avanzar hacia la generación de un nuevo referente de la izquierda y el centro.
Frente a eso tanto el PRO como el PC ya plantearon una cuestión central: no están disponibles para “ampliar la Concertación”.
Enríquez-Ominami agregó tres puntos a la posibilidad de acuerdos. Generar antes que nada una coincidencia programática, establecer el mecanismo de primarias para resoluciones y trabajar en base al respeto a cada fuerza política.
Lautaro Carmona, secretario general del PC, comentó que los comunistas están escuchando las propuestas y analizando las visiones -algo que ocurrió en el encuentro con Carolina Tohá- y que más adelante podrían fijar alguna posición.
En todo caso, el PC ya estableció el objetivo de crear una nueva mayoría nacional democrática y de pactar un acuerdo electoral con colectividades de la Concertación para la elección de alcaldes.
Los comunistas han estado conversando con el PRO y se tienen acercamientos con el MAIZ, grupo que encabezan los ex socialistas, Jorge Arrate y Sergio Aguiló.
La tensión está instalada en la Concertación. Altos dirigentes del Partido Socialista y la Democracia Cristiana calificaron de inoportuna y un retroceso el planteamiento de Carolina Tohá, tienen reticencias con el PRO, siguen criticando a Enríquez-Ominami, y mantienen ciertas distancias ante una alianza con los comunistas.
Junto a eso, el PS y la DC dieron en los últimos días pasos de reforzamiento de su alianza política bilateral y se plantearon llegar a acuerdos estratégicos en materia electoral. Ello, de paso, conduciría a fortalecer la Concertación a partir de su estructuración actual.
Dirigentes, parlamentarios y expertos de la Concertación están trabajando el documento propositivo que la coalición presentaría el 5 de octubre (aniversario del triunfo del No contra la dictadura) que, según dijeron, marcaría un hito en el esfuerzo de reoxigenación del conglomerado. Uno de los puntos que debería abordar es, precisamente, el de la convergencia opositora, posible ampliación del conglomerado y alianzas futuras.
A inicios de esta semana, el líder del Partido Progresista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, dijo al Diario Electrónico de Radio Universidad de Chile que él llevaba 16 meses planteando una conversación con colectividades de la Concertación para analizar puntos de acercamiento, pero que hasta la fecha “no hay ninguna respuesta”. Días después, se produjeron llamadas y encuentros y al final se planeó una reunión de Carolina Tohá, presidenta del PPD, con el jefe del PRO para hablar, precisamente, de convergencia.
En tanto, este viernes se efectuó un encuentro de Tohá con el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, quien estuvo acompañado de los dirigentes de la colectividad Lautaro Carmona, Claudia Pascual, Hugo Gutiérrez y Juan Andrés Lagos. El tema: intercambiar apreciaciones sobre posibles acuerdos y acercamientos con vista a crear un bloque opositor al gobierno de derecha de Sebastián Piñera.
La dirigente del PPD está exponiendo sus propuestas en cuanto a generar una mayoría nacional opositora que vaya más allá de la Concertación y que, de partida, encare al gobierno de derecha y pueda constituirse en una alternativa y, luego, permita avanzar hacia la generación de un nuevo referente de la izquierda y el centro.
Frente a eso tanto el PRO como el PC ya plantearon una cuestión central: no están disponibles para “ampliar la Concertación”.
Enríquez-Ominami agregó tres puntos a la posibilidad de acuerdos. Generar antes que nada una coincidencia programática, establecer el mecanismo de primarias para resoluciones y trabajar en base al respeto a cada fuerza política.
Lautaro Carmona, secretario general del PC, comentó que los comunistas están escuchando las propuestas y analizando las visiones -algo que ocurrió en el encuentro con Carolina Tohá- y que más adelante podrían fijar alguna posición.
En todo caso, el PC ya estableció el objetivo de crear una nueva mayoría nacional democrática y de pactar un acuerdo electoral con colectividades de la Concertación para la elección de alcaldes.
Los comunistas han estado conversando con el PRO y se tienen acercamientos con el MAIZ, grupo que encabezan los ex socialistas, Jorge Arrate y Sergio Aguiló.
La tensión está instalada en la Concertación. Altos dirigentes del Partido Socialista y la Democracia Cristiana calificaron de inoportuna y un retroceso el planteamiento de Carolina Tohá, tienen reticencias con el PRO, siguen criticando a Enríquez-Ominami, y mantienen ciertas distancias ante una alianza con los comunistas.
Junto a eso, el PS y la DC dieron en los últimos días pasos de reforzamiento de su alianza política bilateral y se plantearon llegar a acuerdos estratégicos en materia electoral. Ello, de paso, conduciría a fortalecer la Concertación a partir de su estructuración actual.
Dirigentes, parlamentarios y expertos de la Concertación están trabajando el documento propositivo que la coalición presentaría el 5 de octubre (aniversario del triunfo del No contra la dictadura) que, según dijeron, marcaría un hito en el esfuerzo de reoxigenación del conglomerado. Uno de los puntos que debería abordar es, precisamente, el de la convergencia opositora, posible ampliación del conglomerado y alianzas futuras.
A inicios de esta semana, el líder del Partido Progresista (PRO), Marco Enríquez-Ominami, dijo al Diario Electrónico de Radio Universidad de Chile que él llevaba 16 meses planteando una conversación con colectividades de la Concertación para analizar puntos de acercamiento, pero que hasta la fecha “no hay ninguna respuesta”. Días después, se produjeron llamadas y encuentros y al final se planeó una reunión de Carolina Tohá, presidenta del PPD, con el jefe del PRO para hablar, precisamente, de convergencia.
En tanto, este viernes se efectuó un encuentro de Tohá con el presidente del Partido Comunista, Guillermo Teillier, quien estuvo acompañado de los dirigentes de la colectividad Lautaro Carmona, Claudia Pascual, Hugo Gutiérrez y Juan Andrés Lagos. El tema: intercambiar apreciaciones sobre posibles acuerdos y acercamientos con vista a crear un bloque opositor al gobierno de derecha de Sebastián Piñera.
La dirigente del PPD está exponiendo sus propuestas en cuanto a generar una mayoría nacional opositora que vaya más allá de la Concertación y que, de partida, encare al gobierno de derecha y pueda constituirse en una alternativa y, luego, permita avanzar hacia la generación de un nuevo referente de la izquierda y el centro.
Frente a eso tanto el PRO como el PC ya plantearon una cuestión central: no están disponibles para “ampliar la Concertación”.
Enríquez-Ominami agregó tres puntos a la posibilidad de acuerdos. Generar antes que nada una coincidencia programática, establecer el mecanismo de primarias para resoluciones y trabajar en base al respeto a cada fuerza política.
Lautaro Carmona, secretario general del PC, comentó que los comunistas están escuchando las propuestas y analizando las visiones -algo que ocurrió en el encuentro con Carolina Tohá- y que más adelante podrían fijar alguna posición.
En todo caso, el PC ya estableció el objetivo de crear una nueva mayoría nacional democrática y de pactar un acuerdo electoral con colectividades de la Concertación para la elección de alcaldes.
Los comunistas han estado conversando con el PRO y se tienen acercamientos con el MAIZ, grupo que encabezan los ex socialistas, Jorge Arrate y Sergio Aguiló.
La tensión está instalada en la Concertación. Altos dirigentes del Partido Socialista y la Democracia Cristiana calificaron de inoportuna y un retroceso el planteamiento de Carolina Tohá, tienen reticencias con el PRO, siguen criticando a Enríquez-Ominami, y mantienen ciertas distancias ante una alianza con los comunistas.
Junto a eso, el PS y la DC dieron en los últimos días pasos de reforzamiento de su alianza política bilateral y se plantearon llegar a acuerdos estratégicos en materia electoral. Ello, de paso, conduciría a fortalecer la Concertación a partir de su estructuración actual.
Dirigentes, parlamentarios y expertos de la Concertación están trabajando el documento propositivo que la coalición presentaría el 5 de octubre (aniversario del triunfo del No contra la dictadura) que, según dijeron, marcaría un hito en el esfuerzo de reoxigenación del conglomerado. Uno de los puntos que debería abordar es, precisamente, el de la convergencia opositora, posible ampliación del conglomerado y alianzas futuras.
