De visita en el país, la ex Presidenta Michele Bachelet dio a conocer los resultados del informe elaborado en conjunto por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), que establecen un Piso de Protección Social para buscar la igualdad.
Según distintos documentos entregados por organismos internacionales, aproximadamente 5 mil 100 millones de personas, es decir, el 75 por ciento de la población mundial, no está cubierta por una seguridad social adecuada; mil 400 millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al día; el 38 por ciento de la población mundial no tiene acceso a salud adecuada, y 884 millones de personas carecen de acceso a fuentes adecuadas de agua potable. En tanto, 925 millones de personas padecen hambre crónica y 100 millones acaban viviendo por debajo del umbral de la pobreza cuando se ven obligadas a hacer frente a los costes de la atención médica.
En ese marco, la actual secretaria general de ONU Mujeres, quien además presidió el grupo consultivo que asesoró este informe, señaló que los líderes de las potencias mundiales agrupadas en el G-20 deben pasar de las declaraciones a la acción, solicitando adhesión de las administraciones a esta propuesta que busca acelerar la concreción de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Para Juan Somavia, director general de la OIT, uno de los objetivos para Latinoamérica en este contexto es dotar de trabajo a quienes están en situación vulnerable.
“Es esencial que tengamos una visión de revalorizar el trabajo porque si no lo valorizamos o la dignidad que éste le trae a los seres humanos, la estabilidad que le da a las familias, la paz que le trae a una comunidad, no vamos a salir del subdesarrollo y vamos a continuar con la desigualdad”, sostuvo Somavia.
En ese sentido, el ministro de Planificación y Desarrollo Social, Joaquín Lavín, planteó que los gobierno anteriores pusieron un piso y este gobierno está subiendo el nivel de las metas, al subir un escalón más. “La protección social debe ser vista como una alianza entre el Estado y las familias, en que los dos deben cumplir su parte. Nada reemplaza al esfuerzo personal, a las ganas de salir adelante por sí mismo”, puntualizó el secretario de Estado.
Por su parte, Michele Bachelet profundizó señalando que se necesitan condiciones adicionales para lograr que las personas se acerquen a una vida digna.
“Hay que definir políticas de mercado del trabajo que puedan garantizar que esas tremendas desigualdades de ingreso no se sigan reproduciendo. La mayoría de las personas tienen trabajo, pero eso no es suficiente para salir de la pobreza. Hay que tener un trabajo digno y decente en todas sus características”, comentó la ex mandataria.
En la misma línea, al ser consultada por el movimiento social por la educación señaló que todos están de acuerdo en que en este momento ya no es suficiente con dotar de acceso a los servicios de bienestar, sino que el Estado debe garantizar la calidad de estos.
“Hoy cada Gobierno hace lo que le corresponde y lo que puede y, por lo tanto, hay una nueva etapa política donde la sociedad y todos los actores consideran que esta es una prioridad dado que están las condiciones, entonces es el momento de hacerse cargo y avanzar. Cada etapa tiene un momento y uno puedo aspirar a más”, señaló.
La ex Jefa de Estado no quiso responder a una posible candidatura presidencial, ya que señaló “no vengo al país con traje de candidata”, enfatizando que está concentrada en su labor en ONU Mujeres.
Desde septiembre, este informe ha sido presentado en Europa y Estados Unidos, y dentro de Latinoamérica. Además será presentado próximamente en Brasil, para luego viajar a África y Asia.
De visita en el país, la ex Presidenta Michele Bachelet dio a conocer los resultados del informe elaborado en conjunto por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), que establecen un Piso de Protección Social para buscar la igualdad.
Según distintos documentos entregados por organismos internacionales, aproximadamente 5 mil 100 millones de personas, es decir, el 75 por ciento de la población mundial, no está cubierta por una seguridad social adecuada; mil 400 millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al día; el 38 por ciento de la población mundial no tiene acceso a salud adecuada, y 884 millones de personas carecen de acceso a fuentes adecuadas de agua potable. En tanto, 925 millones de personas padecen hambre crónica y 100 millones acaban viviendo por debajo del umbral de la pobreza cuando se ven obligadas a hacer frente a los costes de la atención médica.
En ese marco, la actual secretaria general de ONU Mujeres, quien además presidió el grupo consultivo que asesoró este informe, señaló que los líderes de las potencias mundiales agrupadas en el G-20 deben pasar de las declaraciones a la acción, solicitando adhesión de las administraciones a esta propuesta que busca acelerar la concreción de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Para Juan Somavia, director general de la OIT, uno de los objetivos para Latinoamérica en este contexto es dotar de trabajo a quienes están en situación vulnerable.
“Es esencial que tengamos una visión de revalorizar el trabajo porque si no lo valorizamos o la dignidad que éste le trae a los seres humanos, la estabilidad que le da a las familias, la paz que le trae a una comunidad, no vamos a salir del subdesarrollo y vamos a continuar con la desigualdad”, sostuvo Somavia.
En ese sentido, el ministro de Planificación y Desarrollo Social, Joaquín Lavín, planteó que los gobierno anteriores pusieron un piso y este gobierno está subiendo el nivel de las metas, al subir un escalón más. “La protección social debe ser vista como una alianza entre el Estado y las familias, en que los dos deben cumplir su parte. Nada reemplaza al esfuerzo personal, a las ganas de salir adelante por sí mismo”, puntualizó el secretario de Estado.
Por su parte, Michele Bachelet profundizó señalando que se necesitan condiciones adicionales para lograr que las personas se acerquen a una vida digna.
“Hay que definir políticas de mercado del trabajo que puedan garantizar que esas tremendas desigualdades de ingreso no se sigan reproduciendo. La mayoría de las personas tienen trabajo, pero eso no es suficiente para salir de la pobreza. Hay que tener un trabajo digno y decente en todas sus características”, comentó la ex mandataria.
En la misma línea, al ser consultada por el movimiento social por la educación señaló que todos están de acuerdo en que en este momento ya no es suficiente con dotar de acceso a los servicios de bienestar, sino que el Estado debe garantizar la calidad de estos.
“Hoy cada Gobierno hace lo que le corresponde y lo que puede y, por lo tanto, hay una nueva etapa política donde la sociedad y todos los actores consideran que esta es una prioridad dado que están las condiciones, entonces es el momento de hacerse cargo y avanzar. Cada etapa tiene un momento y uno puedo aspirar a más”, señaló.
La ex Jefa de Estado no quiso responder a una posible candidatura presidencial, ya que señaló “no vengo al país con traje de candidata”, enfatizando que está concentrada en su labor en ONU Mujeres.
Desde septiembre, este informe ha sido presentado en Europa y Estados Unidos, y dentro de Latinoamérica. Además será presentado próximamente en Brasil, para luego viajar a África y Asia.
De visita en el país, la ex Presidenta Michele Bachelet dio a conocer los resultados del informe elaborado en conjunto por la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), que establecen un Piso de Protección Social para buscar la igualdad.
Según distintos documentos entregados por organismos internacionales, aproximadamente 5 mil 100 millones de personas, es decir, el 75 por ciento de la población mundial, no está cubierta por una seguridad social adecuada; mil 400 millones de personas viven con menos de 1,25 dólares al día; el 38 por ciento de la población mundial no tiene acceso a salud adecuada, y 884 millones de personas carecen de acceso a fuentes adecuadas de agua potable. En tanto, 925 millones de personas padecen hambre crónica y 100 millones acaban viviendo por debajo del umbral de la pobreza cuando se ven obligadas a hacer frente a los costes de la atención médica.
En ese marco, la actual secretaria general de ONU Mujeres, quien además presidió el grupo consultivo que asesoró este informe, señaló que los líderes de las potencias mundiales agrupadas en el G-20 deben pasar de las declaraciones a la acción, solicitando adhesión de las administraciones a esta propuesta que busca acelerar la concreción de los Objetivos de Desarrollo del Milenio.
Para Juan Somavia, director general de la OIT, uno de los objetivos para Latinoamérica en este contexto es dotar de trabajo a quienes están en situación vulnerable.
“Es esencial que tengamos una visión de revalorizar el trabajo porque si no lo valorizamos o la dignidad que éste le trae a los seres humanos, la estabilidad que le da a las familias, la paz que le trae a una comunidad, no vamos a salir del subdesarrollo y vamos a continuar con la desigualdad”, sostuvo Somavia.
En ese sentido, el ministro de Planificación y Desarrollo Social, Joaquín Lavín, planteó que los gobierno anteriores pusieron un piso y este gobierno está subiendo el nivel de las metas, al subir un escalón más. “La protección social debe ser vista como una alianza entre el Estado y las familias, en que los dos deben cumplir su parte. Nada reemplaza al esfuerzo personal, a las ganas de salir adelante por sí mismo”, puntualizó el secretario de Estado.
Por su parte, Michele Bachelet profundizó señalando que se necesitan condiciones adicionales para lograr que las personas se acerquen a una vida digna.
“Hay que definir políticas de mercado del trabajo que puedan garantizar que esas tremendas desigualdades de ingreso no se sigan reproduciendo. La mayoría de las personas tienen trabajo, pero eso no es suficiente para salir de la pobreza. Hay que tener un trabajo digno y decente en todas sus características”, comentó la ex mandataria.
En la misma línea, al ser consultada por el movimiento social por la educación señaló que todos están de acuerdo en que en este momento ya no es suficiente con dotar de acceso a los servicios de bienestar, sino que el Estado debe garantizar la calidad de estos.
“Hoy cada Gobierno hace lo que le corresponde y lo que puede y, por lo tanto, hay una nueva etapa política donde la sociedad y todos los actores consideran que esta es una prioridad dado que están las condiciones, entonces es el momento de hacerse cargo y avanzar. Cada etapa tiene un momento y uno puedo aspirar a más”, señaló.
La ex Jefa de Estado no quiso responder a una posible candidatura presidencial, ya que señaló “no vengo al país con traje de candidata”, enfatizando que está concentrada en su labor en ONU Mujeres.
Desde septiembre, este informe ha sido presentado en Europa y Estados Unidos, y dentro de Latinoamérica. Además será presentado próximamente en Brasil, para luego viajar a África y Asia.
