Los funcionarios presentaron no sólo su rechazo al proyecto tal como está, sino también indicaciones para su mejoría ya que, según los dirigentes de diversas asociaciones gremiales de la salud, el texto es incluso peor respecto a la normativa anterior.
Se trata del proyecto de ley que otorga bonos para el retiro de los funcionarios, respecto al cual se alegan una serie de discriminaciones con el conjunto de los trabajadores y, especialmente, contra las mujeres.
Según Marina Guevara, presidenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de Servicios de Salud (Fenpruss), el proyecto no integra a los profesionales y no otorga un incremento de un mes de remuneración por año trabajado a las mujeres, además de otras distinciones: “Hay una discriminación en aquellos funcionarios que no se fueron en 2010, ellos no pueden postular al incentivo al retiro entre 2012 y 2014. Además, hay una discriminación en el caso de la mujer. Por eso, la Fenpruss no va a firmar y lo que solicita es negociar nuevamente la pérdida que ha tenido de 132 UF”, dijo.
Los empleados del sector público de salud alegan también porque el proyecto no contiene incrementos para los sectores más desfavorecidos en la remuneración, como son auxiliares, técnicos y administrativos. Además, se disminuye el bono de retiro para el estamento profesional de $11.890.000 a $8.900.000.
Óscar Riveros, presidente de la Federación de Trabajadores de la Salud Nacional, indicó que, pese a que hay gremios que han firmado el proyecto tal y como está, no se oponen al él: “Estamos empeñados en mejorarlo, porque se ha tratado, por algunos canales, de dar la impresión de que estamos frenando el proyecto y no es así, muy por el contrario. Queremos reafirmar que las luchas se dan hasta el final, pensamos que moral y éticamente no podemos estar de acuerdo con que este proyecto, tal como está, se deje afuera a gente que ha entregado su vida en vocación de salud”, explicó.
Por su parte, Jorge Conzález, vicepresidente de la Agrupación Nacional de Empelados Fiscales (ANEF), compartió esta opinión y apeló al perfeccionamiento del proyecto que, justamente, ellos plantean: “Creo que tienen el derecho de hacerlo legítimamente, estimaron que hasta ahí llegaban, pero nosotros creemos que todavía se puede avanzar. Creo que la pelea no es con ellos, quienes ya tienen un proyecto y un piso. Si logramos que ese piso se mejore, ellos también van a estar de acuerdo con nosotros”, indicó.
El proyecto de ley de incentivo al retiro del sector salud se encuentra en segundo trámite constitucional en el Senado, donde se deberán discutir las indicaciones luego del voto en contra de los artículos 3° y 5° por parte de la Cámara de Diputados.
Por ello los demandantes solicitaron una audiencia al ministro Mañalich para abordar estas demandas.
Los funcionarios presentaron no sólo su rechazo al proyecto tal como está, sino también indicaciones para su mejoría ya que, según los dirigentes de diversas asociaciones gremiales de la salud, el texto es incluso peor respecto a la normativa anterior.
Se trata del proyecto de ley que otorga bonos para el retiro de los funcionarios, respecto al cual se alegan una serie de discriminaciones con el conjunto de los trabajadores y, especialmente, contra las mujeres.
Según Marina Guevara, presidenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de Servicios de Salud (Fenpruss), el proyecto no integra a los profesionales y no otorga un incremento de un mes de remuneración por año trabajado a las mujeres, además de otras distinciones: “Hay una discriminación en aquellos funcionarios que no se fueron en 2010, ellos no pueden postular al incentivo al retiro entre 2012 y 2014. Además, hay una discriminación en el caso de la mujer. Por eso, la Fenpruss no va a firmar y lo que solicita es negociar nuevamente la pérdida que ha tenido de 132 UF”, dijo.
Los empleados del sector público de salud alegan también porque el proyecto no contiene incrementos para los sectores más desfavorecidos en la remuneración, como son auxiliares, técnicos y administrativos. Además, se disminuye el bono de retiro para el estamento profesional de $11.890.000 a $8.900.000.
Óscar Riveros, presidente de la Federación de Trabajadores de la Salud Nacional, indicó que, pese a que hay gremios que han firmado el proyecto tal y como está, no se oponen al él: “Estamos empeñados en mejorarlo, porque se ha tratado, por algunos canales, de dar la impresión de que estamos frenando el proyecto y no es así, muy por el contrario. Queremos reafirmar que las luchas se dan hasta el final, pensamos que moral y éticamente no podemos estar de acuerdo con que este proyecto, tal como está, se deje afuera a gente que ha entregado su vida en vocación de salud”, explicó.
Por su parte, Jorge Conzález, vicepresidente de la Agrupación Nacional de Empelados Fiscales (ANEF), compartió esta opinión y apeló al perfeccionamiento del proyecto que, justamente, ellos plantean: “Creo que tienen el derecho de hacerlo legítimamente, estimaron que hasta ahí llegaban, pero nosotros creemos que todavía se puede avanzar. Creo que la pelea no es con ellos, quienes ya tienen un proyecto y un piso. Si logramos que ese piso se mejore, ellos también van a estar de acuerdo con nosotros”, indicó.
El proyecto de ley de incentivo al retiro del sector salud se encuentra en segundo trámite constitucional en el Senado, donde se deberán discutir las indicaciones luego del voto en contra de los artículos 3° y 5° por parte de la Cámara de Diputados.
Por ello los demandantes solicitaron una audiencia al ministro Mañalich para abordar estas demandas.
Los funcionarios presentaron no sólo su rechazo al proyecto tal como está, sino también indicaciones para su mejoría ya que, según los dirigentes de diversas asociaciones gremiales de la salud, el texto es incluso peor respecto a la normativa anterior.
Se trata del proyecto de ley que otorga bonos para el retiro de los funcionarios, respecto al cual se alegan una serie de discriminaciones con el conjunto de los trabajadores y, especialmente, contra las mujeres.
Según Marina Guevara, presidenta de la Federación Nacional de Profesionales Universitarios de Servicios de Salud (Fenpruss), el proyecto no integra a los profesionales y no otorga un incremento de un mes de remuneración por año trabajado a las mujeres, además de otras distinciones: “Hay una discriminación en aquellos funcionarios que no se fueron en 2010, ellos no pueden postular al incentivo al retiro entre 2012 y 2014. Además, hay una discriminación en el caso de la mujer. Por eso, la Fenpruss no va a firmar y lo que solicita es negociar nuevamente la pérdida que ha tenido de 132 UF”, dijo.
Los empleados del sector público de salud alegan también porque el proyecto no contiene incrementos para los sectores más desfavorecidos en la remuneración, como son auxiliares, técnicos y administrativos. Además, se disminuye el bono de retiro para el estamento profesional de $11.890.000 a $8.900.000.
Óscar Riveros, presidente de la Federación de Trabajadores de la Salud Nacional, indicó que, pese a que hay gremios que han firmado el proyecto tal y como está, no se oponen al él: “Estamos empeñados en mejorarlo, porque se ha tratado, por algunos canales, de dar la impresión de que estamos frenando el proyecto y no es así, muy por el contrario. Queremos reafirmar que las luchas se dan hasta el final, pensamos que moral y éticamente no podemos estar de acuerdo con que este proyecto, tal como está, se deje afuera a gente que ha entregado su vida en vocación de salud”, explicó.
Por su parte, Jorge Conzález, vicepresidente de la Agrupación Nacional de Empelados Fiscales (ANEF), compartió esta opinión y apeló al perfeccionamiento del proyecto que, justamente, ellos plantean: “Creo que tienen el derecho de hacerlo legítimamente, estimaron que hasta ahí llegaban, pero nosotros creemos que todavía se puede avanzar. Creo que la pelea no es con ellos, quienes ya tienen un proyecto y un piso. Si logramos que ese piso se mejore, ellos también van a estar de acuerdo con nosotros”, indicó.
El proyecto de ley de incentivo al retiro del sector salud se encuentra en segundo trámite constitucional en el Senado, donde se deberán discutir las indicaciones luego del voto en contra de los artículos 3° y 5° por parte de la Cámara de Diputados.
Por ello los demandantes solicitaron una audiencia al ministro Mañalich para abordar estas demandas.
