Por poco más de tres horas se extendieron los alegatos de clausura en el juicio oral del denominado “caso bombas”, con las intervenciones del fiscal a cargo Víctor Núñez y los abogados del ministerio del Interior y el Consejo de Defensa del Estado.
Según informó a Radio Universidad de Chile, Julio Cortés, abogado defensor de Carlos Riveros, el Ministerio Público insistió en calificar los hechos investigados como “terroristas”, debido a la finalidad de atacar el orden social y que se graficaría en panfletos y publicaciones.
El jurista indicó que la Fiscalía Sur relativizó las irregularidades que se han denunciado en el caso, como la falsificación de nueve informes periciales y la declaración de un oficial de la Dipolcar, quien afirmó que el fiscal Francisco Jacier dictó la declaración de autoinculpación de Gustavo Fuentes Aliaga, bajo el cargo de colocación de artefacto explosivo.
El abogado Cortés señaló que “lo más insólito es que insisten en que el financiamiento quedó acreditado al intentar afirmar que las bibliotecas de las casa ocupas era fachadas”.
Un argumentó que consideró como “absurdo” ya que durante la etapa de presentación de pruebas abundaron libros y textos extraídos de estos centros culturales.
“Yo creo que a esta altura nadie puede dudar de la existencia de verdaderas bibliotecas en estos centros sociales, pero el Ministerio Público en esto es fiel a su versión inicial, que esto era una fachada y que era un nido de terroristas disfrazados de otras intenciones, pero que en realidad no se corresponde con la realidad y a la larga sencillamente insistieron con los argumentos iniciales haciéndose cargo de una gran cantidad de pruebas que desvirtúan completamente lo que ellos pretendían”, enfatizó el abogado defensor.
Cortés manifestó también que el ministerio del Interior reconoció que es muy difícil probar ambos delitos y por eso las pruebas que se han presentado han sido indirectas.
Esto, según el defensor, sería “una cierta confesión que no hay ninguna prueba contundente de las colocaciones”, según indicó.
Por ello es que se mostró confiado en que el Tercer Tribunal Oral de Santiago absuelva a los cuatro imputados de colocación de artefacto explosivo y a los dos bajo el cargo de financiamiento terrorista.
En ese sentido, el abogado Julio Cortés señaló “yo estuve ahí los seis meses y mi impresión es la misma, que es la convicción que la prueba que rindieron no sirve para acreditar participación individual en colocaciones de bombas y el financiamiento está desde el inicio mal planteado. No me imagino por dónde pueda haber una sentencia condenatoria de una o dos personas. Tengo la impresión también, que lo más probable es la absolución de todos o de la gran mayoría”.
Este martes intervendrán Cortés y el resto de los abogados defensores, por lo que, según el pronóstico del defensor, ésta semana se podría conocer el veredicto en el juicio oral del caso bombas.
Por poco más de tres horas se extendieron los alegatos de clausura en el juicio oral del denominado “caso bombas”, con las intervenciones del fiscal a cargo Víctor Núñez y los abogados del ministerio del Interior y el Consejo de Defensa del Estado.
Según informó a Radio Universidad de Chile, Julio Cortés, abogado defensor de Carlos Riveros, el Ministerio Público insistió en calificar los hechos investigados como “terroristas”, debido a la finalidad de atacar el orden social y que se graficaría en panfletos y publicaciones.
El jurista indicó que la Fiscalía Sur relativizó las irregularidades que se han denunciado en el caso, como la falsificación de nueve informes periciales y la declaración de un oficial de la Dipolcar, quien afirmó que el fiscal Francisco Jacier dictó la declaración de autoinculpación de Gustavo Fuentes Aliaga, bajo el cargo de colocación de artefacto explosivo.
El abogado Cortés señaló que “lo más insólito es que insisten en que el financiamiento quedó acreditado al intentar afirmar que las bibliotecas de las casa ocupas era fachadas”.
Un argumentó que consideró como “absurdo” ya que durante la etapa de presentación de pruebas abundaron libros y textos extraídos de estos centros culturales.
“Yo creo que a esta altura nadie puede dudar de la existencia de verdaderas bibliotecas en estos centros sociales, pero el Ministerio Público en esto es fiel a su versión inicial, que esto era una fachada y que era un nido de terroristas disfrazados de otras intenciones, pero que en realidad no se corresponde con la realidad y a la larga sencillamente insistieron con los argumentos iniciales haciéndose cargo de una gran cantidad de pruebas que desvirtúan completamente lo que ellos pretendían”, enfatizó el abogado defensor.
Cortés manifestó también que el ministerio del Interior reconoció que es muy difícil probar ambos delitos y por eso las pruebas que se han presentado han sido indirectas.
Esto, según el defensor, sería “una cierta confesión que no hay ninguna prueba contundente de las colocaciones”, según indicó.
Por ello es que se mostró confiado en que el Tercer Tribunal Oral de Santiago absuelva a los cuatro imputados de colocación de artefacto explosivo y a los dos bajo el cargo de financiamiento terrorista.
En ese sentido, el abogado Julio Cortés señaló “yo estuve ahí los seis meses y mi impresión es la misma, que es la convicción que la prueba que rindieron no sirve para acreditar participación individual en colocaciones de bombas y el financiamiento está desde el inicio mal planteado. No me imagino por dónde pueda haber una sentencia condenatoria de una o dos personas. Tengo la impresión también, que lo más probable es la absolución de todos o de la gran mayoría”.
Este martes intervendrán Cortés y el resto de los abogados defensores, por lo que, según el pronóstico del defensor, ésta semana se podría conocer el veredicto en el juicio oral del caso bombas.
Por poco más de tres horas se extendieron los alegatos de clausura en el juicio oral del denominado “caso bombas”, con las intervenciones del fiscal a cargo Víctor Núñez y los abogados del ministerio del Interior y el Consejo de Defensa del Estado.
Según informó a Radio Universidad de Chile, Julio Cortés, abogado defensor de Carlos Riveros, el Ministerio Público insistió en calificar los hechos investigados como “terroristas”, debido a la finalidad de atacar el orden social y que se graficaría en panfletos y publicaciones.
El jurista indicó que la Fiscalía Sur relativizó las irregularidades que se han denunciado en el caso, como la falsificación de nueve informes periciales y la declaración de un oficial de la Dipolcar, quien afirmó que el fiscal Francisco Jacier dictó la declaración de autoinculpación de Gustavo Fuentes Aliaga, bajo el cargo de colocación de artefacto explosivo.
El abogado Cortés señaló que “lo más insólito es que insisten en que el financiamiento quedó acreditado al intentar afirmar que las bibliotecas de las casa ocupas era fachadas”.
Un argumentó que consideró como “absurdo” ya que durante la etapa de presentación de pruebas abundaron libros y textos extraídos de estos centros culturales.
“Yo creo que a esta altura nadie puede dudar de la existencia de verdaderas bibliotecas en estos centros sociales, pero el Ministerio Público en esto es fiel a su versión inicial, que esto era una fachada y que era un nido de terroristas disfrazados de otras intenciones, pero que en realidad no se corresponde con la realidad y a la larga sencillamente insistieron con los argumentos iniciales haciéndose cargo de una gran cantidad de pruebas que desvirtúan completamente lo que ellos pretendían”, enfatizó el abogado defensor.
Cortés manifestó también que el ministerio del Interior reconoció que es muy difícil probar ambos delitos y por eso las pruebas que se han presentado han sido indirectas.
Esto, según el defensor, sería “una cierta confesión que no hay ninguna prueba contundente de las colocaciones”, según indicó.
Por ello es que se mostró confiado en que el Tercer Tribunal Oral de Santiago absuelva a los cuatro imputados de colocación de artefacto explosivo y a los dos bajo el cargo de financiamiento terrorista.
En ese sentido, el abogado Julio Cortés señaló “yo estuve ahí los seis meses y mi impresión es la misma, que es la convicción que la prueba que rindieron no sirve para acreditar participación individual en colocaciones de bombas y el financiamiento está desde el inicio mal planteado. No me imagino por dónde pueda haber una sentencia condenatoria de una o dos personas. Tengo la impresión también, que lo más probable es la absolución de todos o de la gran mayoría”.
Este martes intervendrán Cortés y el resto de los abogados defensores, por lo que, según el pronóstico del defensor, ésta semana se podría conocer el veredicto en el juicio oral del caso bombas.
