El Instituto Artístico de Estudios Secundarios de la Universidad de Chile (ISUCH) celebró su septuagésimo noveno aniversario, en una ceremonia, donde según sus asistentes fue el punto de inicio para un proceso de mejoramiento de la institución.
Según explicaron, existe un problema de espacio, una merma en la matrícula y problemas de financiamiento, y a pesar de esto, las autoridades aseguran que el establecimiento cumple con un buen funcionamiento.
Según la decana de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, Clara Luz Cárdenas, este colegio ofrece una alternativa única en el país, sobre la cual se deben hacer esfuerzos para mantener: “Necesitamos buscar otro espacio y solicitar un apoyo para el colegio en ese sentido porque vale la pena. El colegio es único en el país y está entregando una educación que, en relación a lo artístico, es muy buena y complementaria con lo que tienen que hacer los jóvenes estudiantes de arte”, dijo.
Según fue descrito por el director del ISUCH, Jorge Morán, existe un problema de espacio, pero a esto se suma una merma de matrícula que se cree, es producto del movimiento estudiantil.
Ello se produce en el contexto de un colegio de financiamiento similar al sistema mixto, lo que se suma a un déficit de estudiantes que podría llegar al 60 por ciento, por lo que para ofrecer más matrícula, según Morán, se hacen necesarias nuevas facilidades: “Nos gustaría tener otro espacio, contar con instalaciones más adecuadas para un colegios y ciertamente con medios más actuales que puedan permitir un mayor progreso en los estudiantes que ya de por sí, tal como lo ha dicho la decana, están por sobre la media de cualquier colegio del país”, subrayó.
Jorge Morán aseguró que existe un buen nivel docente, colaborativo y que funciona armoniosamente, pero bajo un paradigma difícil de comprender y que pone ciertas limitantes: “Creemos que podemos hacer mucho más. Tenemos un cuerpo de profesores muy entusiasta, nos capacitamos entre nosotros mismos porque tampoco tenemos esa posibilidad. Somos una institución rara, porque somos un colegio privado dentro de una universidad pública. Eso implica que nos tenemos que someter a las normas de las instituciones públicas con muchas ambiciones de ser autónomos en muchas cosas y no lo podemos hacer”, advirtió.
De esta manera, como punto de partida de cara al octogésimo aniversario, el ISUCH planea reforzar sus acercamientos con las autoridades universitarias, de quienes si bien reconocen una importante ayuda, aseguran que plantearán nuevas inquietudes y aportes.
El Instituto Artístico de Estudios Secundarios de la Universidad de Chile (ISUCH) celebró su septuagésimo noveno aniversario, en una ceremonia, donde según sus asistentes fue el punto de inicio para un proceso de mejoramiento de la institución.
Según explicaron, existe un problema de espacio, una merma en la matrícula y problemas de financiamiento, y a pesar de esto, las autoridades aseguran que el establecimiento cumple con un buen funcionamiento.
Según la decana de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, Clara Luz Cárdenas, este colegio ofrece una alternativa única en el país, sobre la cual se deben hacer esfuerzos para mantener: “Necesitamos buscar otro espacio y solicitar un apoyo para el colegio en ese sentido porque vale la pena. El colegio es único en el país y está entregando una educación que, en relación a lo artístico, es muy buena y complementaria con lo que tienen que hacer los jóvenes estudiantes de arte”, dijo.
Según fue descrito por el director del ISUCH, Jorge Morán, existe un problema de espacio, pero a esto se suma una merma de matrícula que se cree, es producto del movimiento estudiantil.
Ello se produce en el contexto de un colegio de financiamiento similar al sistema mixto, lo que se suma a un déficit de estudiantes que podría llegar al 60 por ciento, por lo que para ofrecer más matrícula, según Morán, se hacen necesarias nuevas facilidades: “Nos gustaría tener otro espacio, contar con instalaciones más adecuadas para un colegios y ciertamente con medios más actuales que puedan permitir un mayor progreso en los estudiantes que ya de por sí, tal como lo ha dicho la decana, están por sobre la media de cualquier colegio del país”, subrayó.
Jorge Morán aseguró que existe un buen nivel docente, colaborativo y que funciona armoniosamente, pero bajo un paradigma difícil de comprender y que pone ciertas limitantes: “Creemos que podemos hacer mucho más. Tenemos un cuerpo de profesores muy entusiasta, nos capacitamos entre nosotros mismos porque tampoco tenemos esa posibilidad. Somos una institución rara, porque somos un colegio privado dentro de una universidad pública. Eso implica que nos tenemos que someter a las normas de las instituciones públicas con muchas ambiciones de ser autónomos en muchas cosas y no lo podemos hacer”, advirtió.
De esta manera, como punto de partida de cara al octogésimo aniversario, el ISUCH planea reforzar sus acercamientos con las autoridades universitarias, de quienes si bien reconocen una importante ayuda, aseguran que plantearán nuevas inquietudes y aportes.
El Instituto Artístico de Estudios Secundarios de la Universidad de Chile (ISUCH) celebró su septuagésimo noveno aniversario, en una ceremonia, donde según sus asistentes fue el punto de inicio para un proceso de mejoramiento de la institución.
Según explicaron, existe un problema de espacio, una merma en la matrícula y problemas de financiamiento, y a pesar de esto, las autoridades aseguran que el establecimiento cumple con un buen funcionamiento.
Según la decana de la Facultad de Artes de la Universidad de Chile, Clara Luz Cárdenas, este colegio ofrece una alternativa única en el país, sobre la cual se deben hacer esfuerzos para mantener: “Necesitamos buscar otro espacio y solicitar un apoyo para el colegio en ese sentido porque vale la pena. El colegio es único en el país y está entregando una educación que, en relación a lo artístico, es muy buena y complementaria con lo que tienen que hacer los jóvenes estudiantes de arte”, dijo.
Según fue descrito por el director del ISUCH, Jorge Morán, existe un problema de espacio, pero a esto se suma una merma de matrícula que se cree, es producto del movimiento estudiantil.
Ello se produce en el contexto de un colegio de financiamiento similar al sistema mixto, lo que se suma a un déficit de estudiantes que podría llegar al 60 por ciento, por lo que para ofrecer más matrícula, según Morán, se hacen necesarias nuevas facilidades: “Nos gustaría tener otro espacio, contar con instalaciones más adecuadas para un colegios y ciertamente con medios más actuales que puedan permitir un mayor progreso en los estudiantes que ya de por sí, tal como lo ha dicho la decana, están por sobre la media de cualquier colegio del país”, subrayó.
Jorge Morán aseguró que existe un buen nivel docente, colaborativo y que funciona armoniosamente, pero bajo un paradigma difícil de comprender y que pone ciertas limitantes: “Creemos que podemos hacer mucho más. Tenemos un cuerpo de profesores muy entusiasta, nos capacitamos entre nosotros mismos porque tampoco tenemos esa posibilidad. Somos una institución rara, porque somos un colegio privado dentro de una universidad pública. Eso implica que nos tenemos que someter a las normas de las instituciones públicas con muchas ambiciones de ser autónomos en muchas cosas y no lo podemos hacer”, advirtió.
De esta manera, como punto de partida de cara al octogésimo aniversario, el ISUCH planea reforzar sus acercamientos con las autoridades universitarias, de quienes si bien reconocen una importante ayuda, aseguran que plantearán nuevas inquietudes y aportes.
