Aviones de combate del Ejército sirio bombardearon el domingo el este de Damasco por tercer día consecutivo desde la declaración de la tregua gestionada por Naciones Unidas con motivo de la festividad religiosa del Eid al Adha, según informaron activistas de oposición. Los barrios afectados son los de Zamalka, Irbin y Harasta, donde los rebeldes del Ejército Libre Sirio tienen sus posiciones.

Poco después de la entrada en vigor de la tregua, el Ejército sirio acusó a «grupos terroristas armados» de haber violado el alto el fuego en varias provincias del país, mientras que aseguró que sus tropas respetaron la tregua pero se vieron «obligadas» a responder a los ataques. En las últimas horas, según la oposición, el Ejército sirio reanudó los bombardeos por tierra y aire contra regiones controladas por los grupos armados suníes, y aprovechado la tregua para recuperar el control sobre algunos barrios de Damasco.

Más de un centenar de personas fallecieron el sábado en el segundo día de alto el fuego entre las fuerzas gubernamentales y rebeldes sirias, según varias organizaciones opositoras. Hasta 103 personas han perdido la vida en todo el país, según los Comités de Coordinación Local (CCL), una organización activista radicada en Siria. Al menos 39 de los muertos se habrían producido en Damasco y los barrios periféricos.

La organización aseguró que el Ejército sirio ha violado en casi 500 ocasiones la tregua auspiciada el viernes por el enviado especial de la ONU y la Liga Árabe en Siria, Lajdar Brahimi. Brahimi impulsó esta tregua con motivo de la festividad del Eid al Adha para allanar el camino para emprender una transición política que termine con los más de 19 meses de conflicto armado en Siria.