A poco más de un año de que el Sello Pro Pyme comenzara a operar, el ministerio de Economía anunció un nuevo reglamento que busca disminuir las obligaciones de las compañías de menor tamaño.

La primera modificación apunta a reducir el cumplimiento de los pagos que deben realizar las Pymes a sus proveedores, de 100 a 95 por ciento, por lo que disminuirá la obligatoriedad de pagar a los vendedores dentro de los 30 días hábiles, ya sea por errores logísticos u otro tipo de inconvenientes.

Sin embargo, según Juan Araya, presidente de la Confederación Nacional de Pequeñas y Medianas Empresas (Conapyme), “el problema no se solucionará con otorgar más beneficios a las Pymes, sino que se tiene que obligar a las grandes compañías a que cumplan con los mismos requisitos de manera de homogenizar los deberes y derechos”.

Asimismo, Araya recalcó que el nuevo  reglamento no ha sido consultado a las Pymes, sino por el contrario “se ha elaborado entre cuatro paredes”.

“El tema del Sello Pyme fue un fracaso y cuando tú estás con un enfermo grave no sacas nada con darle más oxígeno para que dure un poquito más. El ministro creyó que las empresas iban a correr a inscribirse al Sello pyme. No ha sido así, porque la gran empresa no tiene interés en pagar a 30 días, porque cuando el retail paga a 60 días es enorme el ahorro que se hacen, acumulan IVA. Si una empresa recibe mil facturas de pequeños empresarios, es increíble la plata que les estamos prestando a 30 a días, sin ningún interés”, explicó Araya.

En tanto, Rafael Cumsille, presidente de la Confederación Nacional de Comercio Detallista y Turismo en Chile (Confedech), criticó a la autoridad del ramo,  pues “el reglamento tendría que establecer una obligación de pago, porque aquí hasta el momento es voluntario. La autoridad tiene que ponerse más firme, porque ya son abusos los que se cometen dentro del sistema económico, que se ha prestado para la arbitrariedad”, indicó.

“Si yo soy una gran empresa y no le pago a mis proveedores, solamente una semana que me atrase, son miles de millones de pesos de terceros que estoy utilizando, ya sea en el mercado financiero o para ir comprando más puntos de ventas y así se ha logrado el crecimiento en este país”, agregó el líder de Confedech.

Otra modificación del Sello Pro Pyme pretende reducir las auditorías externas,  de una por semestre a una al año, a fin de disminuir los costos de los pequeños y medianos emprendedores.

En esa línea, el presidente de Confedech, sostuvo que el fondo  del problema no está en más o menos beneficios, sino en regular el negocio e inversión que hacen las grandes empresas a partir de los dineros de las pymes.

“Si quiere estar en una gran cadena, tiene una serie de costos adicionales para poder ingresar con sus productos a esa empresa. Muchas veces usted es víctima de devoluciones arbitrarias, en plazos indefinidos. Lo más relevante es que a los proveedores no solo no se les paga ningún centavo ni intereses, sino que después se les hace víctima de una serie de pagos adicionales en base a publicidad, por ejemplo, ahora con la Teletón. Esos aportes, por lo general, son proporcionados por los proveedores”, aseguró Cumsille.

La tercera transformación consistirá en otorgar un ‘Pre Sello’ a las empresas que tengan divisiones alejadas de la casa matriz, para que en un período de dos años las Pymes puedan alcanzar el comprobante de calidad establecido por el Ejecutivo.

Una regulación nueva que se conocerá el próximo seis de diciembre, al menos por los pequeños empresarios, y que por cierto no ha dejado indiferente a las Pymes, quienes instaron al ministro Pablo Longueira a reglamentar primero, el funcionamiento abusivo de los grandes poderes económicos presentes en el mercado.