Una encuesta CEP, con un 25 por ciento de aprobación a su gestión, fue la antesala de un largamente anunciado cambio de gabinete.
Aunque en un principio se habló de un ajuste, con el transcurso de las horas, fuentes al interior de La Moneda comentaron de un verdadero remezón en el equipo cercano el Primer Mandatario. Sin embargo el comité político se mantuvo intacto.
Esta es la segunda modificación en la nueva administración de Sebastián Piñera, luego de la salida de los ministros de Educación, Gerardo Varela, y Cultura, Alejandra Pérez, en agosto pasado.
Con la introducción del subsecretario Ubilla, se dio inicio a la ceremonia en el salón Montt Varas en que se aceptó la renuncia de Roberto Ampuero, José Ramón Valente, Alfredo Moreno, Emilio Santelices, Juan Andrés Fontaine y Susana Jiménez
Enroques, retornos y salidas
Luego de las malas evaluaciones del Canciller Ampuero, es Teodoro Ribera, tras una breve titularidad en Justicia en el primer mandato de Sebastián Piñera, quien ocupará la cartera de Relaciones Exteriores a partir de este jueves.
En Economía, Fomento y Turismo asume Juan Andrés Fontaine dejando Obras Públicas.
Sebastián Sichel, hasta hoy vicepresidente de CORFO, asume la cartera de Desarrollo Social en reemplazo de Alfredo Moreno, quien a su vez se traslada al ministerio de Obras Públicas.
Jaime Mañalich vuelve la primera arena política para reemplazar a Emilio Santelices en Salud quien sale definitivamente del equipo de secretarios de Estado.
En cuanto a las salidas, la ministra Susana Jiménez, que debió enfrentar la polémica de la implementación de los medidores inteligentes, dejó el gabinete para ser reemplazada por Juan Carlos Jobet, exministro de Trabajo durante la primera administración del presidente Piñera y que es cercano a Evópoli.
“Es hora de la acción”
Posteriormente a la firma de los nuevos secretarios de Estado, el Primer Mandatario se refirió a las circunstancias económicas externas y el panorama de comercio internacional. “La economía mundial se ha debilitado, está creciendo mucho menos de lo que creció el año pasado y de lo que se anticipaba de lo que iba a crecer este año. El comercio mundial está cayendo, situación que no ocurría hacia muchas décadas y los precios de los productos que exportamos han bajado y los productos que importamos han subido”, señaló Sebastián Piñera.
Inmediatamente después, el jefe de Estado lanzó críticas al desempeño de la oposición en materia de los proyectos y reformas impulsadas por el gobierno. “Hay obstáculos que provienen, en parte, de la conducta de algunos sectores que han impedido que una agenda modernizadora en muchos frentes pueda avanzar y ver la luz del sol, y estoy convencido que esta agenda es necesaria y urgente”, enfatizó el mandatario, para posteriormente enumerar cinco puntos neurálgicos de ese programa.
“Y entre estas destaco la modernización tributaria, la agenda pro crecimiento y pro inversión, la modernización del Estado, todas ellas modernizaciones urgentes y necesarias para poder fortalecer nuestra capacidad de crecer”.
“La reforma a las pensiones, que nos va permitir cumplir con un anhelo que está en el alma de todos nuestros compatriotas, que es mejorar las pensiones de todos los jubilados de nuestro país y también los futuros jubilados, especialmente los que reciben el pilar solidario, pero también la clase media, las mujeres y los adultos mayores”.
“La modernización a nuestra legislación laboral para adecuarla a la realidad del siglo XXI, al dinamismo de la sociedad del conocimiento y la innovación, a los cambios que significa la cuarta revolución tecnológica para crear más y mejores empleos”.
“La modernización de nuestro sistema de salud que, sin duda, requiere cirugía mayor para básicamente mejorar el acceso, la oportunidad y la calidad de los servicios que reciben nuestros compatriotas cuando están enfermos”.
“La reforma a nuestra educación para mejorar la calidad en todos sus niveles para privilegiar la educación temprana, para fortalecer la educación técnico profesional y para mejorar la seguridad y la sana convivencia en las aulas de nuestras escuelas”.
El mandatario recalcó que todas estas modernizaciones no han podido salir adelante por la falta de voluntad y diálogo de la oposición.
“Todas estas modernizaciones están en el Congreso desde hace varios meses y a pesar de nuestra permanente voluntad de diálogo y acuerdo no han podido avanzar”.
A manera de justificar los seis cambios que hizo en las Secretarías de Estado, Piñera afirmó que “llegó el tiempo de las definiciones y el tiempo de la acción”.
Con respecto a los ministros que dejaron sus cargos, el jefe de Estado agradeció la vocación y entrega de cada uno de ellos, mientras que a los nuevos secretarios agradeció “la disposición y la voluntad”.
Además el Presidente enumeró los desafíos que debe enfrentar su gobierno.
“Mantener en marcha nuestra economía, mejorar la protección a nuestra clase media y a los sectores mas vulnerables, y aumentar la seguridad ciudadana”, finalizó.