Diario y Radio Universidad Chile

Año XVI, 29 de marzo de 2024


Escritorio

Panguipulli en el centro de la injusticia

Columna de opinión por Francisca Fernández Droguett
Martes 23 de febrero 2021 9:16 hrs.


Compartir en

Estos últimos días nuevamente nos encontramos con el horror del asesinato de una lamien trans producto de varios disparos ejecutados por guardias del condominio Riñimapu, Panguipulli. Su nombre era Emilia Milén Herrera Obrecht, quien fuese parte del Lof Llazkawe, que se encuentra en proceso de recuperación territorial.

No son sólo años sino siglos de injusticia ante un Estado colonial y racista que ha sostenido como política expansiva la usurpación territorial de Wallmapu, desde la Caja de Colonización Agrícola, empresas forestales, agronegocios, represas, hidroeléctricas de paso, y ahora a través de la presión de inmobiliarias, que han condenado al territorio mapuche como espacio de la política extractivista, arrasando y despojando territorios y cuerpos.

Como no recordar el asesinato de otra lamien, Macarena Valdés Muñoz, quien en agosto del 2016 fuese encontrada por uno de sus cuatro hijos en su casa en Tranguil, Panguipulli, colgada supuestamente a causa de un suicidio, pero donde su familia y comunidad tienen la certeza de que fue asesinada por oponerse a la construcción de una hidroeléctrica de paso por parte de RP Global, hoy RP Arroyo, lo que ha sido corroborado por peritajes forenses. Macarena fue asesinada y luego colgada.

Y el horror sigue, y es así que hace unas semanas fuese asesinado, siendo acribillado, en plena vía pública de la ciudad de Panguipulli, Francisco Martínez, malabarista, por el simple hecho de oponerse a la realización de un control de identidad por parte de Carabineros de Chile, quien finalmente le da muerte.

La rabia se acrecienta ante la indolencia de los malos gobiernos, o por ser más precisa, criminales, que han fomentado la militarización constante de Wallmapu además de la criminalización de las diversas movilizaciones y la persecución en torno a la defensa territorial. 

Hoy adquiere carácter de urgencia exigir el fin de la violencia estatal y de los crímenes de odio, donde el reconocimiento de las territorialidades ancestrales, de las economías territoriales y las formaciones políticas propias del pueblo mapuche sean elementos centrales para transitar hacia una efectiva autodeterminación dando fin a siglos de injusticia y muerte.

La autonomía y el reconocimiento territorial del pueblo mapuche nos coloca ante el desafío de pensar nuestros propios procesos de autodeterminación de otros pueblos, territorios y colectividades. 


*La autora es integrante del Movimiento por el Agua y los Territorios y de la Coordinadora Feminista 8M

El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor y no refleja necesariamente la posición de Diario y Radio Universidad de Chile.