Una vez que ingresó el proyecto de royalty al Congreso, se reactivó el debate acerca de los impuestos que debe pagar la gran minería para los aportes al Fisco de Chile.
En principio los recursos recaudados serían de mil millones de dólares en un período de tres años, para conseguir mayores recursos en beneficio de la reconstrucción.
El ministro de Minería Laurence Golborne señaló que es importante para el Gobierno recaudar los dineros a través de esta vía y que existe el compromiso para entregar recursos a las regiones. Sin embargo, esta embargo esta idea no está presente en el articulado del proyecto de ley, sino solamente en sus fundamentos informales.
Pese a ello, el secretario de Estado llamó a los parlamentarios a que aprueben el proyecto de ley y se hizo cargo de la anomalía del texto ratificando que los dineros irán a las regiones.
“Mirarlo de la mejor manera posible, entendiendo que no vamos a lograr un punto de acuerdo. En el mensaje está explícitamente establecido que un 30 por ciento de esos recursos va a ir a las regiones y se plantea dentro de las necesidades, la intención de destinar parte a seguridad minera”, señaló Golborne.
En la Concertación se critica que se soliciten mil millones de dólares para el royalty mineros, pero solamente 700 se destinarían para los procesos de reconstrucción.
En este sentido, el senador PS Juan Pablo Letelier, consideró que la idea tiene otra intención más allá del financiamiento para las regiones.
“Comprar votos de las regiones con esta forma, cuando lo que queremos las zonas mineras es una norma permanente que otorgue una parte de las riquezas que ellos logran generar, para que se reinviertan en desarrollos de Ciencia y Tecnología para promover el desarrollo”, indicó Letelier.
Una visión parecida tiene el senador de RN Baldo Prokurica, quien señaló que le interesa que exista un aporte permanente para las regiones, ya que esto no se ha cumplido desde que se creó la figura de royalty minero en el Gobierno de Ricardo Lagos.
Prokurica además insistió en que un porcentaje de estos dineros sea destinado a la seguridad en faenas mineras pequeñas y medianas.
“Este proyecto va a ser mejorado en la tramitación y va a haber un porcentaje importante para las regiones mineras, que es donde ocurren los accidentes como el que tenemos ahora y donde hay un número muy importante de mineros pequeños, artesanales, que trabajan en condiciones que hay que mejorar”, sostuvo Prokurica.
De esta manera el proyecto de royalty a la minería comenzará su tramitación en el Congreso Nacional, siendo visto primero por la Cámara de Diputados, donde seguramente se va a generar un fuerte debate.
Uno de los puntos es que se aplicará sobre las utilidades de las empresas y no sobre las ventas, por lo que no es en estricto sentido un royalty a la minería, sino un impuesto específico.
Una vez que ingresó el proyecto de royalty al Congreso, se reactivó el debate acerca de los impuestos que debe pagar la gran minería para los aportes al Fisco de Chile.
En principio los recursos recaudados serían de mil millones de dólares en un período de tres años, para conseguir mayores recursos en beneficio de la reconstrucción.
El ministro de Minería Laurence Golborne señaló que es importante para el Gobierno recaudar los dineros a través de esta vía y que existe el compromiso para entregar recursos a las regiones. Sin embargo, esta embargo esta idea no está presente en el articulado del proyecto de ley, sino solamente en sus fundamentos informales.
Pese a ello, el secretario de Estado llamó a los parlamentarios a que aprueben el proyecto de ley y se hizo cargo de la anomalía del texto ratificando que los dineros irán a las regiones.
“Mirarlo de la mejor manera posible, entendiendo que no vamos a lograr un punto de acuerdo. En el mensaje está explícitamente establecido que un 30 por ciento de esos recursos va a ir a las regiones y se plantea dentro de las necesidades, la intención de destinar parte a seguridad minera”, señaló Golborne.
En la Concertación se critica que se soliciten mil millones de dólares para el royalty mineros, pero solamente 700 se destinarían para los procesos de reconstrucción.
En este sentido, el senador PS Juan Pablo Letelier, consideró que la idea tiene otra intención más allá del financiamiento para las regiones.
“Comprar votos de las regiones con esta forma, cuando lo que queremos las zonas mineras es una norma permanente que otorgue una parte de las riquezas que ellos logran generar, para que se reinviertan en desarrollos de Ciencia y Tecnología para promover el desarrollo”, indicó Letelier.
Una visión parecida tiene el senador de RN Baldo Prokurica, quien señaló que le interesa que exista un aporte permanente para las regiones, ya que esto no se ha cumplido desde que se creó la figura de royalty minero en el Gobierno de Ricardo Lagos.
Prokurica además insistió en que un porcentaje de estos dineros sea destinado a la seguridad en faenas mineras pequeñas y medianas.
“Este proyecto va a ser mejorado en la tramitación y va a haber un porcentaje importante para las regiones mineras, que es donde ocurren los accidentes como el que tenemos ahora y donde hay un número muy importante de mineros pequeños, artesanales, que trabajan en condiciones que hay que mejorar”, sostuvo Prokurica.
De esta manera el proyecto de royalty a la minería comenzará su tramitación en el Congreso Nacional, siendo visto primero por la Cámara de Diputados, donde seguramente se va a generar un fuerte debate.
Uno de los puntos es que se aplicará sobre las utilidades de las empresas y no sobre las ventas, por lo que no es en estricto sentido un royalty a la minería, sino un impuesto específico.
Una vez que ingresó el proyecto de royalty al Congreso, se reactivó el debate acerca de los impuestos que debe pagar la gran minería para los aportes al Fisco de Chile.
En principio los recursos recaudados serían de mil millones de dólares en un período de tres años, para conseguir mayores recursos en beneficio de la reconstrucción.
El ministro de Minería Laurence Golborne señaló que es importante para el Gobierno recaudar los dineros a través de esta vía y que existe el compromiso para entregar recursos a las regiones. Sin embargo, esta embargo esta idea no está presente en el articulado del proyecto de ley, sino solamente en sus fundamentos informales.
Pese a ello, el secretario de Estado llamó a los parlamentarios a que aprueben el proyecto de ley y se hizo cargo de la anomalía del texto ratificando que los dineros irán a las regiones.
“Mirarlo de la mejor manera posible, entendiendo que no vamos a lograr un punto de acuerdo. En el mensaje está explícitamente establecido que un 30 por ciento de esos recursos va a ir a las regiones y se plantea dentro de las necesidades, la intención de destinar parte a seguridad minera”, señaló Golborne.
En la Concertación se critica que se soliciten mil millones de dólares para el royalty mineros, pero solamente 700 se destinarían para los procesos de reconstrucción.
En este sentido, el senador PS Juan Pablo Letelier, consideró que la idea tiene otra intención más allá del financiamiento para las regiones.
“Comprar votos de las regiones con esta forma, cuando lo que queremos las zonas mineras es una norma permanente que otorgue una parte de las riquezas que ellos logran generar, para que se reinviertan en desarrollos de Ciencia y Tecnología para promover el desarrollo”, indicó Letelier.
Una visión parecida tiene el senador de RN Baldo Prokurica, quien señaló que le interesa que exista un aporte permanente para las regiones, ya que esto no se ha cumplido desde que se creó la figura de royalty minero en el Gobierno de Ricardo Lagos.
Prokurica además insistió en que un porcentaje de estos dineros sea destinado a la seguridad en faenas mineras pequeñas y medianas.
“Este proyecto va a ser mejorado en la tramitación y va a haber un porcentaje importante para las regiones mineras, que es donde ocurren los accidentes como el que tenemos ahora y donde hay un número muy importante de mineros pequeños, artesanales, que trabajan en condiciones que hay que mejorar”, sostuvo Prokurica.
De esta manera el proyecto de royalty a la minería comenzará su tramitación en el Congreso Nacional, siendo visto primero por la Cámara de Diputados, donde seguramente se va a generar un fuerte debate.
Uno de los puntos es que se aplicará sobre las utilidades de las empresas y no sobre las ventas, por lo que no es en estricto sentido un royalty a la minería, sino un impuesto específico.
