Pese al éxito de las energías renovables el año pasado, el sector se mantiene amenazado en el país por la nueva Reforma Energética, dirigida por el gobierno de Mariano Rajoy desde 2012. La iniciativa tiene como objetivo de atajar el déficit público, del que ha culpado en gran parte a las energías renovables.
El gobierno promulgó la ley que une los sistemas de distribución energética del norte y centro-sur del país. Parlamentarios de distintos sectores valoran la medida, mientras las organizaciones apuntan que esto sólo atiende la demanda de la expansión de la gran minería.