El accidente que mantiene a 33 mineros atrapados en el norte de Chile dio cuenta de una precariedad laboral que no se remite sólo al sector minero, sino que también a otros como el agrícola y el industrial, donde las organizaciones han insistido en la necesidad de modificar las reglamentaciones existentes.
Es por eso que, mientras se conmemoraba el día nacional de las asalariadas agrícolas, la Asociación de Mujeres Rurales e Indígenas (Anamuri) afirmaron que se permanecían en estado de alerta porque, en el escenario cotidiano de sus trabajos, numerosas mujeres mueren por la falta de una regulación de calidad.
Alicia Muñoz, presidenta de Anamuri, explicó que uno de los problemas principales que se presentan en este rubro tiene que ver con el uso de ciertos plaguicidas.
“Hoy tenemos más toneladas que entran al país y son productos extremadamente peligrosos. La Organización Mundial de la Salud hace mucho tiempo que pidió a los empresarios del mundo que pusiera restricciones a productos como por ejemplo el 1A y 1B, que son peligrosos para la vida de las personas y el medio ambiente”, dijo la dirigente.
Alicia Muñoz explicó que existen casos de graves violaciones a los derechos laborales que han sido publicados, como la muerte de dos temporeras en el ejercicio de sus funciones, casos que actualmente se encuentran en los tribunales de justicia y que aún permanecen impunes.
María Elena Rozas de la Red de Acción de Plaguicidas y sus alternativas para América Latina ( RAP-AL) manifestó que tiene poca esperanza por el resultado que tenga la comisión de Seguridad Laboral, convocada por El Ejecutivo a raíz del incidente en la mina San José.
“No sé cómo va a funcionar esta mesa de trabajo porque a lo largo del tiempo hemos visto que se crean muchas instancias como esta cuando hay incidentes y después no siguen funcionando o, simplemente, terminan en manos de quienes provocan estas condiciones laborales. Las autoridades del gobierno anterior y actuales se ponen la mano en el corazón por los mineros y por las condiciones laborales de ese sector, se horrorizan con eso, pero si uno mira al sector agrícola, la situación no es diferente”, sentenció Rozas.
Anamuri aseguró que la situación laboral de su rubro es “grave” y que el hecho de que la comisión anunciada por el Presidente Sebastián Piñera esté integrada mayoritariamente por asesores de los empresarios impedirá sacar adelante las mesas de negociación.
“Parece un intento más de pretender mostrar eficiencia frente a un problema cuya solución pasa por poner en primer lugar la vida y la salud de las y los trabajadores, situación que es imposible resolver sin la participación de las personas que trabajan día a día en terreno”, concluyeron las trabajadoras agrícolas.
De todas formas, habrá que esperar las conclusiones que emanen de la comisión convocada por el Jefe de Estado quien aseguró que hará “una profunda revisión de la legislación, de los reglamentos, de los procedimientos, de la institucionalidad, de los mecanismos de fiscalización y de los montos de las acciones para crear en Chile una cultura del trabajo digno, sano y seguro”.
El accidente que mantiene a 33 mineros atrapados en el norte de Chile dio cuenta de una precariedad laboral que no se remite sólo al sector minero, sino que también a otros como el agrícola y el industrial, donde las organizaciones han insistido en la necesidad de modificar las reglamentaciones existentes.
Es por eso que, mientras se conmemoraba el día nacional de las asalariadas agrícolas, la Asociación de Mujeres Rurales e Indígenas (Anamuri) afirmaron que se permanecían en estado de alerta porque, en el escenario cotidiano de sus trabajos, numerosas mujeres mueren por la falta de una regulación de calidad.
Alicia Muñoz, presidenta de Anamuri, explicó que uno de los problemas principales que se presentan en este rubro tiene que ver con el uso de ciertos plaguicidas.
“Hoy tenemos más toneladas que entran al país y son productos extremadamente peligrosos. La Organización Mundial de la Salud hace mucho tiempo que pidió a los empresarios del mundo que pusiera restricciones a productos como por ejemplo el 1A y 1B, que son peligrosos para la vida de las personas y el medio ambiente”, dijo la dirigente.
Alicia Muñoz explicó que existen casos de graves violaciones a los derechos laborales que han sido publicados, como la muerte de dos temporeras en el ejercicio de sus funciones, casos que actualmente se encuentran en los tribunales de justicia y que aún permanecen impunes.
María Elena Rozas de la Red de Acción de Plaguicidas y sus alternativas para América Latina ( RAP-AL) manifestó que tiene poca esperanza por el resultado que tenga la comisión de Seguridad Laboral, convocada por El Ejecutivo a raíz del incidente en la mina San José.
“No sé cómo va a funcionar esta mesa de trabajo porque a lo largo del tiempo hemos visto que se crean muchas instancias como esta cuando hay incidentes y después no siguen funcionando o, simplemente, terminan en manos de quienes provocan estas condiciones laborales. Las autoridades del gobierno anterior y actuales se ponen la mano en el corazón por los mineros y por las condiciones laborales de ese sector, se horrorizan con eso, pero si uno mira al sector agrícola, la situación no es diferente”, sentenció Rozas.
Anamuri aseguró que la situación laboral de su rubro es “grave” y que el hecho de que la comisión anunciada por el Presidente Sebastián Piñera esté integrada mayoritariamente por asesores de los empresarios impedirá sacar adelante las mesas de negociación.
“Parece un intento más de pretender mostrar eficiencia frente a un problema cuya solución pasa por poner en primer lugar la vida y la salud de las y los trabajadores, situación que es imposible resolver sin la participación de las personas que trabajan día a día en terreno”, concluyeron las trabajadoras agrícolas.
De todas formas, habrá que esperar las conclusiones que emanen de la comisión convocada por el Jefe de Estado quien aseguró que hará “una profunda revisión de la legislación, de los reglamentos, de los procedimientos, de la institucionalidad, de los mecanismos de fiscalización y de los montos de las acciones para crear en Chile una cultura del trabajo digno, sano y seguro”.
El accidente que mantiene a 33 mineros atrapados en el norte de Chile dio cuenta de una precariedad laboral que no se remite sólo al sector minero, sino que también a otros como el agrícola y el industrial, donde las organizaciones han insistido en la necesidad de modificar las reglamentaciones existentes.
Es por eso que, mientras se conmemoraba el día nacional de las asalariadas agrícolas, la Asociación de Mujeres Rurales e Indígenas (Anamuri) afirmaron que se permanecían en estado de alerta porque, en el escenario cotidiano de sus trabajos, numerosas mujeres mueren por la falta de una regulación de calidad.
Alicia Muñoz, presidenta de Anamuri, explicó que uno de los problemas principales que se presentan en este rubro tiene que ver con el uso de ciertos plaguicidas.
“Hoy tenemos más toneladas que entran al país y son productos extremadamente peligrosos. La Organización Mundial de la Salud hace mucho tiempo que pidió a los empresarios del mundo que pusiera restricciones a productos como por ejemplo el 1A y 1B, que son peligrosos para la vida de las personas y el medio ambiente”, dijo la dirigente.
Alicia Muñoz explicó que existen casos de graves violaciones a los derechos laborales que han sido publicados, como la muerte de dos temporeras en el ejercicio de sus funciones, casos que actualmente se encuentran en los tribunales de justicia y que aún permanecen impunes.
María Elena Rozas de la Red de Acción de Plaguicidas y sus alternativas para América Latina ( RAP-AL) manifestó que tiene poca esperanza por el resultado que tenga la comisión de Seguridad Laboral, convocada por El Ejecutivo a raíz del incidente en la mina San José.
“No sé cómo va a funcionar esta mesa de trabajo porque a lo largo del tiempo hemos visto que se crean muchas instancias como esta cuando hay incidentes y después no siguen funcionando o, simplemente, terminan en manos de quienes provocan estas condiciones laborales. Las autoridades del gobierno anterior y actuales se ponen la mano en el corazón por los mineros y por las condiciones laborales de ese sector, se horrorizan con eso, pero si uno mira al sector agrícola, la situación no es diferente”, sentenció Rozas.
Anamuri aseguró que la situación laboral de su rubro es “grave” y que el hecho de que la comisión anunciada por el Presidente Sebastián Piñera esté integrada mayoritariamente por asesores de los empresarios impedirá sacar adelante las mesas de negociación.
“Parece un intento más de pretender mostrar eficiencia frente a un problema cuya solución pasa por poner en primer lugar la vida y la salud de las y los trabajadores, situación que es imposible resolver sin la participación de las personas que trabajan día a día en terreno”, concluyeron las trabajadoras agrícolas.
De todas formas, habrá que esperar las conclusiones que emanen de la comisión convocada por el Jefe de Estado quien aseguró que hará “una profunda revisión de la legislación, de los reglamentos, de los procedimientos, de la institucionalidad, de los mecanismos de fiscalización y de los montos de las acciones para crear en Chile una cultura del trabajo digno, sano y seguro”.
