Raúl Zurita: "No soporto esta sociedad rasca de ricachones simples"


La poesía bíblica del Premio Nacional de Literatura 2000 llegó a Sala Master de Radio Universidad de Chile, donde el poeta Raúl Zurita conversó sobre su obra y su última publicación con Vivian Lavín en el programa Vuelan las Plumas.

Con “Zurita”, su última obra, el poeta señaló que “ya puede morir en paz”. Y pese a que confesó que no le gustan los datos y la autobiografía, en estas más de 700 páginas revela parte de sus fragmentos, en un intento vertiginoso de “reflejar la vida en un segundo” o corregirla a través del arte para llegar al paraíso.

El autor de “Purgatorio”, “Anteparaíso”, “Inrri” e “In Memoriam” se refirió a la condición extrema del arte, lo que siempre ha animado su obra: “He tratado, hasta donde me es posible y mi propia lucidez me alcanza, porque seguramente hay millones de fallas, de ser más o menos coherente y llevar las cosas a un cierto extremo, porque yo creo que el arte tiene vocación de extremos. Está bien ser demócrata cristiano en la política, es perfectamente respetable, pero en el arte no puedes ser demócrata cristiano. Puedes ser tal vez un fascista infinito, pero no puede ser un arte bien peinadito, de los equilibrios, porque eso no sirve para nada. El arte tiene vocación de extremos, así lo entiendo yo, porque solamente extremando puedes mostrar”, dijo.

Zurita agregó que no está para escribir bonito, sino para retratar temas urgentes como el amor, única forma de resistencia frente al hecho absoluto de la muerte, reflexión con la que se adentró en el silencio de los poetas, hoy producido por el triunfo absoluto del lenguaje publicitario y del modelo económico imperante.

Sin embargo, destacó con alegría el resurgir del movimiento estudiantil, pero aclaró que le correspondió “otra cosa”, refiriéndose a la dura labor de dar cuenta de la realidad que se vivió en los años de dictadura militar, donde realizó contundentes muestras artísticas.

Para Zurita, los nuevos tiempos traen nuevas realidades literarias, así como nuevas formas de expresión, cultura y arte: “La gente está leyendo muchísimo y está leyendo de otra manera. Está leyendo a través de internet, leyendo cinco cosas simultáneamente, un tipo que está frente a la pantalla está haciendo muchas cosas simultáneamente. Hay otros modos de lectura, que son bastante fascinantes. Lo que está sucediendo, que no está oficializado en el papel, pero sí está en la red, es muy potente, y tiene un enorme poder. La cantidad de poemas que circulan en la red tiene un efecto multiplicador, todavía ni sospechamos la magnitud de eso”, aseguró.

El poeta criticó la actual sociedad exitista en la que nos movemos: “No soporto esta sociedad rasca de ricachones simples”, afirmó, mientras se remontó a la pasión por la literatura y la necesidad de retornar y difundir las obras que nos removieron para transmitir así el fuego de la palabra a los habitantes del futuro.





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