Hoy, en cerca de cinco mil casos al año se interrumpe el embarazo por causas médicas, entre los que se generan para proteger la vida de la madre y aquellos donde el feto es incompatible con la vida. Por esto en el Senado existen tres proyectos de ley sobre aborto terapéutico y ha comenzado un fuerte debate al respecto.
Frente a esto la Universidad de Chile ha estado activa, de hecho hace unos días la comisión de salud del Senado, junto a organizaciones de la sociedad civil y la Facultad de Medicina debatieron este tema y hoy se realizó esta reunión con parlamentarios.
Respecto del tema la decana de la Facultad de Medicina, Cecilia Sepúlveda, dijo: “Nos resulta de la mayor relevancia que se vaya a legislar sobre este problema que afecta el ejercicio de la profesión médica en la medida que no existe una legislación que realmente ampare y regule de manera adecuada y transparente lo que el médico debe hacer en estos casos, que como hemos escuchado, no son pocos”.
Senadores de distintos sectores buscan resolver por qué causales nuestra legislación debe despenalizar el aborto terapéutico: si para proteger a la madre, por inviabilidad del feto o en casos de violación. Allí existen diferentes opiniones.
Esto cuando hoy se están realizando diversas interrupciones de embarazo que están al margen de la ley y que deben ser reguladas.
“Hay que transparentar todos aquellos procedimientos médicos en el resguardo de la vida de la madre que hoy en nuestra legislación vigente no contempla. Y que podrían caer bajo el rotulo de aborto, y eso es una ilegalidad. Por eso hay que transparentar aquellos procedimientos para el resguardo de la vida de la madre y que finalmente se traducen en el fallecimiento, que no es algo buscado, pero es la muerte del ser que está en gestación y eso es algo que nosotros debemos abordar. El Senado tiene que enfrentar estos temas”, indicó la senadora de Renovación Nacional, Lily Pérez.
Sobre su apoyo a la iniciativa, tanto la senadora Lily Pérez, como la senadora DC, Ximena Rincón, afirmaron que los temas valóricos no son patrimonio de un sector, y que esto no les traerá consecuencias políticas ya que, aseguraron que “no existen órdenes de partidos”.
Las parlamentarias hicieron un llamado a dejar de lado los prejuicios en la discusión e informarse sobre este tema, con información no sólo de nuestro país, sino también de la Organización Mundial de la Salud, además de la experiencia internacional.
Por su parte, el senador socialista Fulvio Rossi afirmó que este no es sólo un tema valórico, sino que principalmente es un tema sanitario, de política pública y de derechos humanos de las mujeres. En esta línea, instó a los parlamentarios a poder mirar de forma más global el tema.
“Tenemos alteraciones cromosómicas incompatibles con la vida y hago ese énfasis porque algunas personas quizás con mala intención han dicho que estamos hablando de los Síndrome de Down, el que no es una alteración cromosómica incompatible con la vida. Me refiero a la 18 y la 13 que son incompatibles con la vida y corresponde a 480 casos al año, o sea tenemos casi mil mujeres al año que son torturadas en Chile, porque a mi juicio y según distintos tratados internacionales que promueven los derechos de las mujeres, obligar a una mujer a proseguir con el embarazo cuando sabemos el desenlace es una tortura”, explicó Rossi.
Estas son algunos de los fundamentos de los parlamentarios, en una discusión que también se ha ampliado a nuestra Universidad y donde los académicos y especialistas tienen mucho que decir.
Hoy, en cerca de cinco mil casos al año se interrumpe el embarazo por causas médicas, entre los que se generan para proteger la vida de la madre y aquellos donde el feto es incompatible con la vida. Por esto en el Senado existen tres proyectos de ley sobre aborto terapéutico y ha comenzado un fuerte debate al respecto.
Frente a esto la Universidad de Chile ha estado activa, de hecho hace unos días la comisión de salud del Senado, junto a organizaciones de la sociedad civil y la Facultad de Medicina debatieron este tema y hoy se realizó esta reunión con parlamentarios.
Respecto del tema la decana de la Facultad de Medicina, Cecilia Sepúlveda, dijo: “Nos resulta de la mayor relevancia que se vaya a legislar sobre este problema que afecta el ejercicio de la profesión médica en la medida que no existe una legislación que realmente ampare y regule de manera adecuada y transparente lo que el médico debe hacer en estos casos, que como hemos escuchado, no son pocos”.
Senadores de distintos sectores buscan resolver por qué causales nuestra legislación debe despenalizar el aborto terapéutico: si para proteger a la madre, por inviabilidad del feto o en casos de violación. Allí existen diferentes opiniones.
Esto cuando hoy se están realizando diversas interrupciones de embarazo que están al margen de la ley y que deben ser reguladas.
“Hay que transparentar todos aquellos procedimientos médicos en el resguardo de la vida de la madre que hoy en nuestra legislación vigente no contempla. Y que podrían caer bajo el rotulo de aborto, y eso es una ilegalidad. Por eso hay que transparentar aquellos procedimientos para el resguardo de la vida de la madre y que finalmente se traducen en el fallecimiento, que no es algo buscado, pero es la muerte del ser que está en gestación y eso es algo que nosotros debemos abordar. El Senado tiene que enfrentar estos temas”, indicó la senadora de Renovación Nacional, Lily Pérez.
Sobre su apoyo a la iniciativa, tanto la senadora Lily Pérez, como la senadora DC, Ximena Rincón, afirmaron que los temas valóricos no son patrimonio de un sector, y que esto no les traerá consecuencias políticas ya que, aseguraron que “no existen órdenes de partidos”.
Las parlamentarias hicieron un llamado a dejar de lado los prejuicios en la discusión e informarse sobre este tema, con información no sólo de nuestro país, sino también de la Organización Mundial de la Salud, además de la experiencia internacional.
Por su parte, el senador socialista Fulvio Rossi afirmó que este no es sólo un tema valórico, sino que principalmente es un tema sanitario, de política pública y de derechos humanos de las mujeres. En esta línea, instó a los parlamentarios a poder mirar de forma más global el tema.
“Tenemos alteraciones cromosómicas incompatibles con la vida y hago ese énfasis porque algunas personas quizás con mala intención han dicho que estamos hablando de los Síndrome de Down, el que no es una alteración cromosómica incompatible con la vida. Me refiero a la 18 y la 13 que son incompatibles con la vida y corresponde a 480 casos al año, o sea tenemos casi mil mujeres al año que son torturadas en Chile, porque a mi juicio y según distintos tratados internacionales que promueven los derechos de las mujeres, obligar a una mujer a proseguir con el embarazo cuando sabemos el desenlace es una tortura”, explicó Rossi.
Estas son algunos de los fundamentos de los parlamentarios, en una discusión que también se ha ampliado a nuestra Universidad y donde los académicos y especialistas tienen mucho que decir.
Hoy, en cerca de cinco mil casos al año se interrumpe el embarazo por causas médicas, entre los que se generan para proteger la vida de la madre y aquellos donde el feto es incompatible con la vida. Por esto en el Senado existen tres proyectos de ley sobre aborto terapéutico y ha comenzado un fuerte debate al respecto.
Frente a esto la Universidad de Chile ha estado activa, de hecho hace unos días la comisión de salud del Senado, junto a organizaciones de la sociedad civil y la Facultad de Medicina debatieron este tema y hoy se realizó esta reunión con parlamentarios.
Respecto del tema la decana de la Facultad de Medicina, Cecilia Sepúlveda, dijo: “Nos resulta de la mayor relevancia que se vaya a legislar sobre este problema que afecta el ejercicio de la profesión médica en la medida que no existe una legislación que realmente ampare y regule de manera adecuada y transparente lo que el médico debe hacer en estos casos, que como hemos escuchado, no son pocos”.
Senadores de distintos sectores buscan resolver por qué causales nuestra legislación debe despenalizar el aborto terapéutico: si para proteger a la madre, por inviabilidad del feto o en casos de violación. Allí existen diferentes opiniones.
Esto cuando hoy se están realizando diversas interrupciones de embarazo que están al margen de la ley y que deben ser reguladas.
“Hay que transparentar todos aquellos procedimientos médicos en el resguardo de la vida de la madre que hoy en nuestra legislación vigente no contempla. Y que podrían caer bajo el rotulo de aborto, y eso es una ilegalidad. Por eso hay que transparentar aquellos procedimientos para el resguardo de la vida de la madre y que finalmente se traducen en el fallecimiento, que no es algo buscado, pero es la muerte del ser que está en gestación y eso es algo que nosotros debemos abordar. El Senado tiene que enfrentar estos temas”, indicó la senadora de Renovación Nacional, Lily Pérez.
Sobre su apoyo a la iniciativa, tanto la senadora Lily Pérez, como la senadora DC, Ximena Rincón, afirmaron que los temas valóricos no son patrimonio de un sector, y que esto no les traerá consecuencias políticas ya que, aseguraron que “no existen órdenes de partidos”.
Las parlamentarias hicieron un llamado a dejar de lado los prejuicios en la discusión e informarse sobre este tema, con información no sólo de nuestro país, sino también de la Organización Mundial de la Salud, además de la experiencia internacional.
Por su parte, el senador socialista Fulvio Rossi afirmó que este no es sólo un tema valórico, sino que principalmente es un tema sanitario, de política pública y de derechos humanos de las mujeres. En esta línea, instó a los parlamentarios a poder mirar de forma más global el tema.
“Tenemos alteraciones cromosómicas incompatibles con la vida y hago ese énfasis porque algunas personas quizás con mala intención han dicho que estamos hablando de los Síndrome de Down, el que no es una alteración cromosómica incompatible con la vida. Me refiero a la 18 y la 13 que son incompatibles con la vida y corresponde a 480 casos al año, o sea tenemos casi mil mujeres al año que son torturadas en Chile, porque a mi juicio y según distintos tratados internacionales que promueven los derechos de las mujeres, obligar a una mujer a proseguir con el embarazo cuando sabemos el desenlace es una tortura”, explicó Rossi.
Estas son algunos de los fundamentos de los parlamentarios, en una discusión que también se ha ampliado a nuestra Universidad y donde los académicos y especialistas tienen mucho que decir.
