Encabezadas por la CUT y la Confech, un amplio cúmulo de organizaciones estudiantiles, medioambientales, sindicales y de empleados fiscales se reunirá mañana miércoles en Tucapel Jiménez con la Alameda.
La concentración, que comenzará a las cinco de la tarde, será de carácter pacífico, según aseguraron sus convocantes, y será de apoyo al Movimiento Social de la Región de Aysén y sus demandas.
Marjorie Cuello, secretaría general de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Valparaíso, declaró que, como estudiantes, “nos ponemos al servicio y solidarizamos con las demandas de Aysén”.
La vocera de la Confech agregó que Aysén es “evidencia de un problema que se repite en las mayorías de las regiones” y rechazó la represión que, a su juicio, han vivido los patagones, haciendo un símil con la violencia ejercida el año pasado contra el movimiento estudiantil.
“Como Confech queremos reprochar profundamente la represión de la que es víctima hoy la ciudadanía de Aysén, que nosotros vivimos durante el año pasado en nuestras movilizaciones donde nuestros compañeros fueron golpeados. Hoy los habitantes de Aysén son brutalmente golpeados por las fuerzas del Gobierno”, enfatizó la dirigente universitaria.
Los convocantes señalaron que el permiso para la concentración está en manos de la intendencia de Santiago y que están a la espera de su aprobación aunque aseguraron que la protesta se realizará sí o sí.
Gestos de apoyo que no sólo emanan desde el mundo social, sino también desde el Poder Legislativo.
El presidente del Senado, Guido Girardi, realizó fuertes críticas a lo que calificó como incapacidad del Gobierno de solucionar el conflicto generado por “demandas que son atendibles y justas”. Además, sostuvo que la administración de Sebastián Piñera opta por la violencia y la amenaza, en alusión a la posibilidad de aplicar la Ley de Seguridad del Estado, por sobre el diálogo.
En este sentido, el parlamentario fue tajante al señalar que “frente a la incapacidad de dialogar y negociar, lo que utiliza el Gobierno es la amenaza, la represión, la fuerza bruta, el Estado policíaco y esa es la tónica en todas las movilizaciones. En vez de diálogo, acuerdo, negociaciones y resolver los problemas finalmente se opta por el camino de la represión, la amenaza de la Ley de Seguridad Interior del Estado, que me parece un absurdo, que es una situación exagerada y que lo único que va a provocar es radicalizar estos conflictos”.
Una opinión que fue compartida por Patricio Rodrigo, presidente de Patagonia sin Represas, quien, en compañía de Girardi, llamó al Gobierno a retomar las negociaciones con los patagones.
El dirigente medio ambientalista le pidió al Gobierno que “deje la represión a un lado y se abra al diálogo es necesario conversar con la ciudadanía, los problemas se resuelven fraternalmente en una mesa de diálogo y no poniendo la represión por delante. Ahora estamos en una democracia, esto ya no es una dictadura, por lo tanto necesitamos que haya un diálogo fraterno entre hermanos y que tenemos objetivos superiores que lograr”.
Emplazamiento al diálogo y rechazo a la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado que también se ha producido desde el mismo oficialismo, ya que el jefe de la bancada de diputados de la UDI, Felipe Ward, señaló que “éste no es el momento propicio para adoptar dicha medida; hay que esperar y seguir impulsando el diálogo”.
Encabezadas por la CUT y la Confech, un amplio cúmulo de organizaciones estudiantiles, medioambientales, sindicales y de empleados fiscales se reunirá mañana miércoles en Tucapel Jiménez con la Alameda.
La concentración, que comenzará a las cinco de la tarde, será de carácter pacífico, según aseguraron sus convocantes, y será de apoyo al Movimiento Social de la Región de Aysén y sus demandas.
Marjorie Cuello, secretaría general de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Valparaíso, declaró que, como estudiantes, “nos ponemos al servicio y solidarizamos con las demandas de Aysén”.
La vocera de la Confech agregó que Aysén es “evidencia de un problema que se repite en las mayorías de las regiones” y rechazó la represión que, a su juicio, han vivido los patagones, haciendo un símil con la violencia ejercida el año pasado contra el movimiento estudiantil.
“Como Confech queremos reprochar profundamente la represión de la que es víctima hoy la ciudadanía de Aysén, que nosotros vivimos durante el año pasado en nuestras movilizaciones donde nuestros compañeros fueron golpeados. Hoy los habitantes de Aysén son brutalmente golpeados por las fuerzas del Gobierno”, enfatizó la dirigente universitaria.
Los convocantes señalaron que el permiso para la concentración está en manos de la intendencia de Santiago y que están a la espera de su aprobación aunque aseguraron que la protesta se realizará sí o sí.
Gestos de apoyo que no sólo emanan desde el mundo social, sino también desde el Poder Legislativo.
El presidente del Senado, Guido Girardi, realizó fuertes críticas a lo que calificó como incapacidad del Gobierno de solucionar el conflicto generado por “demandas que son atendibles y justas”. Además, sostuvo que la administración de Sebastián Piñera opta por la violencia y la amenaza, en alusión a la posibilidad de aplicar la Ley de Seguridad del Estado, por sobre el diálogo.
En este sentido, el parlamentario fue tajante al señalar que “frente a la incapacidad de dialogar y negociar, lo que utiliza el Gobierno es la amenaza, la represión, la fuerza bruta, el Estado policíaco y esa es la tónica en todas las movilizaciones. En vez de diálogo, acuerdo, negociaciones y resolver los problemas finalmente se opta por el camino de la represión, la amenaza de la Ley de Seguridad Interior del Estado, que me parece un absurdo, que es una situación exagerada y que lo único que va a provocar es radicalizar estos conflictos”.
Una opinión que fue compartida por Patricio Rodrigo, presidente de Patagonia sin Represas, quien, en compañía de Girardi, llamó al Gobierno a retomar las negociaciones con los patagones.
El dirigente medio ambientalista le pidió al Gobierno que “deje la represión a un lado y se abra al diálogo es necesario conversar con la ciudadanía, los problemas se resuelven fraternalmente en una mesa de diálogo y no poniendo la represión por delante. Ahora estamos en una democracia, esto ya no es una dictadura, por lo tanto necesitamos que haya un diálogo fraterno entre hermanos y que tenemos objetivos superiores que lograr”.
Emplazamiento al diálogo y rechazo a la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado que también se ha producido desde el mismo oficialismo, ya que el jefe de la bancada de diputados de la UDI, Felipe Ward, señaló que “éste no es el momento propicio para adoptar dicha medida; hay que esperar y seguir impulsando el diálogo”.
Encabezadas por la CUT y la Confech, un amplio cúmulo de organizaciones estudiantiles, medioambientales, sindicales y de empleados fiscales se reunirá mañana miércoles en Tucapel Jiménez con la Alameda.
La concentración, que comenzará a las cinco de la tarde, será de carácter pacífico, según aseguraron sus convocantes, y será de apoyo al Movimiento Social de la Región de Aysén y sus demandas.
Marjorie Cuello, secretaría general de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Valparaíso, declaró que, como estudiantes, “nos ponemos al servicio y solidarizamos con las demandas de Aysén”.
La vocera de la Confech agregó que Aysén es “evidencia de un problema que se repite en las mayorías de las regiones” y rechazó la represión que, a su juicio, han vivido los patagones, haciendo un símil con la violencia ejercida el año pasado contra el movimiento estudiantil.
“Como Confech queremos reprochar profundamente la represión de la que es víctima hoy la ciudadanía de Aysén, que nosotros vivimos durante el año pasado en nuestras movilizaciones donde nuestros compañeros fueron golpeados. Hoy los habitantes de Aysén son brutalmente golpeados por las fuerzas del Gobierno”, enfatizó la dirigente universitaria.
Los convocantes señalaron que el permiso para la concentración está en manos de la intendencia de Santiago y que están a la espera de su aprobación aunque aseguraron que la protesta se realizará sí o sí.
Gestos de apoyo que no sólo emanan desde el mundo social, sino también desde el Poder Legislativo.
El presidente del Senado, Guido Girardi, realizó fuertes críticas a lo que calificó como incapacidad del Gobierno de solucionar el conflicto generado por “demandas que son atendibles y justas”. Además, sostuvo que la administración de Sebastián Piñera opta por la violencia y la amenaza, en alusión a la posibilidad de aplicar la Ley de Seguridad del Estado, por sobre el diálogo.
En este sentido, el parlamentario fue tajante al señalar que “frente a la incapacidad de dialogar y negociar, lo que utiliza el Gobierno es la amenaza, la represión, la fuerza bruta, el Estado policíaco y esa es la tónica en todas las movilizaciones. En vez de diálogo, acuerdo, negociaciones y resolver los problemas finalmente se opta por el camino de la represión, la amenaza de la Ley de Seguridad Interior del Estado, que me parece un absurdo, que es una situación exagerada y que lo único que va a provocar es radicalizar estos conflictos”.
Una opinión que fue compartida por Patricio Rodrigo, presidente de Patagonia sin Represas, quien, en compañía de Girardi, llamó al Gobierno a retomar las negociaciones con los patagones.
El dirigente medio ambientalista le pidió al Gobierno que “deje la represión a un lado y se abra al diálogo es necesario conversar con la ciudadanía, los problemas se resuelven fraternalmente en una mesa de diálogo y no poniendo la represión por delante. Ahora estamos en una democracia, esto ya no es una dictadura, por lo tanto necesitamos que haya un diálogo fraterno entre hermanos y que tenemos objetivos superiores que lograr”.
Emplazamiento al diálogo y rechazo a la aplicación de la Ley de Seguridad del Estado que también se ha producido desde el mismo oficialismo, ya que el jefe de la bancada de diputados de la UDI, Felipe Ward, señaló que “éste no es el momento propicio para adoptar dicha medida; hay que esperar y seguir impulsando el diálogo”.
