Hasta las dependencias del Arzobispado de Santiago llegó esta mañana el líder del PRO, Marco Enríquez-Ominami, para reunirse con Monseñor Ricardo Ezzati.
Luego del encuentro, que se prolongó por más de media hora, el precandidato presidencial señaló que “Vine a expresarle a Monseñor Ezzati que creemos que las instituciones de una sociedad deben ser sanas, que las sociedades son más sanas cuando las instituciones lo son, que creemos que las iglesias deben tener su espacio y que vinimos a dialogar. Hablamos de Estado laico y de los desafíos actuales de la Iglesia y vi un Monseñor comprometido, conectado con todos estos temas y que me pareció muy preparado para los desafíos que vienen”.
Enríquez-Ominami añadió que conversaron sobre el rol de las diversas instituciones en la sociedad, además de conversar sobre puntos relevantes para lograr un mayor desarrollo social. Al respecto afirmó: “No es lo mismo el Estado Laico que el Laicismo, son cosas distintas. El Estado laico supone fronteras que respiran entre el Estado y la religión, dicho en simple, las iglesias deben convivir en una sociedad. Y debemos todos convivir con nuestras fronteras, pero estas tienen que respirar, y eso es lo que he venido a expresar, que el Movimiento Progresista y sus fronteras son porosas, nos queremos entender con todas y con todos. El sueño que tengo y el Chile justo que quiero es un Chile no clasista y un Chile donde el Estado laico considera a todas las religiones”, sostuvo.
Consultado sobre la contingencia política luego de las inscripciones el día de ayer de las listas de candidatos municipales de los principales bloques políticos, el ex parlamentario recalcó que “La Concertación va más desunida que nunca, van en dos listas de concejales, no se pueden dar la mano entre ellos y veo en la Alianza un exceso de confianza en sí mismos. Creo que el país está muy enojado con este duopolio, con la partidocracia y que eso hace de las municipales una tremenda oportunidad para quienes queremos otra forma de hacer política. Yo no creo en estos partidos que son parte del pasado”.
Hasta las dependencias del Arzobispado de Santiago llegó esta mañana el líder del PRO, Marco Enríquez-Ominami, para reunirse con Monseñor Ricardo Ezzati.
Luego del encuentro, que se prolongó por más de media hora, el precandidato presidencial señaló que “Vine a expresarle a Monseñor Ezzati que creemos que las instituciones de una sociedad deben ser sanas, que las sociedades son más sanas cuando las instituciones lo son, que creemos que las iglesias deben tener su espacio y que vinimos a dialogar. Hablamos de Estado laico y de los desafíos actuales de la Iglesia y vi un Monseñor comprometido, conectado con todos estos temas y que me pareció muy preparado para los desafíos que vienen”.
Enríquez-Ominami añadió que conversaron sobre el rol de las diversas instituciones en la sociedad, además de conversar sobre puntos relevantes para lograr un mayor desarrollo social. Al respecto afirmó: “No es lo mismo el Estado Laico que el Laicismo, son cosas distintas. El Estado laico supone fronteras que respiran entre el Estado y la religión, dicho en simple, las iglesias deben convivir en una sociedad. Y debemos todos convivir con nuestras fronteras, pero estas tienen que respirar, y eso es lo que he venido a expresar, que el Movimiento Progresista y sus fronteras son porosas, nos queremos entender con todas y con todos. El sueño que tengo y el Chile justo que quiero es un Chile no clasista y un Chile donde el Estado laico considera a todas las religiones”, sostuvo.
Consultado sobre la contingencia política luego de las inscripciones el día de ayer de las listas de candidatos municipales de los principales bloques políticos, el ex parlamentario recalcó que “La Concertación va más desunida que nunca, van en dos listas de concejales, no se pueden dar la mano entre ellos y veo en la Alianza un exceso de confianza en sí mismos. Creo que el país está muy enojado con este duopolio, con la partidocracia y que eso hace de las municipales una tremenda oportunidad para quienes queremos otra forma de hacer política. Yo no creo en estos partidos que son parte del pasado”.
Hasta las dependencias del Arzobispado de Santiago llegó esta mañana el líder del PRO, Marco Enríquez-Ominami, para reunirse con Monseñor Ricardo Ezzati.
Luego del encuentro, que se prolongó por más de media hora, el precandidato presidencial señaló que “Vine a expresarle a Monseñor Ezzati que creemos que las instituciones de una sociedad deben ser sanas, que las sociedades son más sanas cuando las instituciones lo son, que creemos que las iglesias deben tener su espacio y que vinimos a dialogar. Hablamos de Estado laico y de los desafíos actuales de la Iglesia y vi un Monseñor comprometido, conectado con todos estos temas y que me pareció muy preparado para los desafíos que vienen”.
Enríquez-Ominami añadió que conversaron sobre el rol de las diversas instituciones en la sociedad, además de conversar sobre puntos relevantes para lograr un mayor desarrollo social. Al respecto afirmó: “No es lo mismo el Estado Laico que el Laicismo, son cosas distintas. El Estado laico supone fronteras que respiran entre el Estado y la religión, dicho en simple, las iglesias deben convivir en una sociedad. Y debemos todos convivir con nuestras fronteras, pero estas tienen que respirar, y eso es lo que he venido a expresar, que el Movimiento Progresista y sus fronteras son porosas, nos queremos entender con todas y con todos. El sueño que tengo y el Chile justo que quiero es un Chile no clasista y un Chile donde el Estado laico considera a todas las religiones”, sostuvo.
Consultado sobre la contingencia política luego de las inscripciones el día de ayer de las listas de candidatos municipales de los principales bloques políticos, el ex parlamentario recalcó que “La Concertación va más desunida que nunca, van en dos listas de concejales, no se pueden dar la mano entre ellos y veo en la Alianza un exceso de confianza en sí mismos. Creo que el país está muy enojado con este duopolio, con la partidocracia y que eso hace de las municipales una tremenda oportunidad para quienes queremos otra forma de hacer política. Yo no creo en estos partidos que son parte del pasado”.
