La reaparición de células malignas en la misma zona en la que se le detectó a Hugo Chávez un cáncer en junio de 2011 ha creado zozobra en Venezuela. El presidente, en una declaración a una cadena de radio y televisión, anunció anoche que en los últimos exámenes que se le han efectuado se ha detectado “la presencia en la misma área afectada de algunas células malignas nuevamente”. Durante su alocución Chávez, quien ya sufrió una recaída en febrero pasado, se mostró por momentos apesadumbrado pero tampoco le faltó humor y determinación.

Quedó claro que había llegado el momento de prever lo peor y tratar de despejar así la incertidumbre sobre el horizonte político. Chávez le puso nombre públicamente a su posible sucesor en caso de que ocurriera algo que, dijo, le inhabilitara para asumir un tercer mandato el próximo 10 de enero. “Ustedes elijan a Maduro como presidente de la República, se lo pido desde mi corazón”, dijo Chávez refiriéndose a la eventualidad de su desaparición.

La Constitución venezolana establece que si ocurriera una falta absoluta del presidente antes de la toma de la posesión habrá que convocar nuevas elecciones en un plazo de 30 días. Durante ese periodo la jefatura del Estado recae en el presidente del Parlamento. Sin embargo, Hugo Chávez precisó el sábado que, en ese supuesto, sería Nicolás Maduro el encargado de ejercer la presidencia.

Queda por ver qué impacto tendrán estos anuncios en las elecciones regionales previstas para dentro de una semana y que el oficialismo espera le permitan arrebatarle a la oposición algunos de sus bastiones, en particular el Estado de Miranda. Entretanto, este domingo, en el Twitter venezolano llovían mensajes de solidaridad destinados a Chávez.