El ministro de Justicia, Teodoro Ribera, continúa complicado por sus vínculos con Eugenio Díaz, ex presidente de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA), actualmente formalizado y en prisión preventiva por distintos delitos de corrupción.
El ex presidente de la CNA estableció contacto con Ribera cuando éste era rector de la Universidad Autónoma, cargo que ocupó hasta asumir en Justicia en julio del año pasado.
Este miércoles la Cámara de Diputados aprobó la creación de dos comisiones que investigarán el caso. La primera, constituida a partir de la comisión de Educación, revisará temas administrativos; la segunda se enfocará en eventuales casos de lucro y estará integrada por parlamentarios de la Concertación.
Ribera reaccionó señalando que “como ministro estoy dispuesto a venir tan pronto a estas comisiones, porque es muy importante esclarecer los hechos profundamente. Me citan y vengo corriendo inmediatamente”.
También el director de Gendarmería, Luis Masferrer, declaró este miércoles sobre el caso y afirmó en forma tajante que fue el ministro Ribera quien le presentó el currículum de Eugenio Díaz, quien luego realizó asesorías a Escuela que pertenece a la institución.
“El ministro me presentó el currículum y me dijo ‘¿qué te parece?’. A mí me pareció que era la mejor persona que teníamos en ese momento, particularmente, por su vinculación con el Instituto Nacional de Derechos Humanos”, explicó.
Sin embargo, también se reveló que Eugenio Díaz se encontraba contratado por Gendarmería cuando se revisó la acreditación del instituto Incacea, del cual Ribera posee el 7,5 por ciento de la propiedad.
La acreditación fue analizada el pasado 4 de enero con la presencia del ex presidente de la CNA, pero fue rechazada por 13 integrantes de la instancia, que apuntaron a su mala situación económica y baja calidad académica.
“(Eugenio) Díaz y Juan José Ugarte (jefe de la División de Educación Superior del Mineduc) fueron las únicas dos personas que votaron a favor de acreditar el Incacea. En el caso de Díaz, sus argumentos fueron que el ingreso de los nuevos dueños mejoraría la situación del Instituto”, afirmó Patricio Basso, ex secretario ejecutivo de la Comisión.
Paralelamente, uno de los propietarios de la Universidad SEK, Jorge Segovia, se defendió también y descartó haber dado algún tipo de aporte a Eugenio Díaz. “A nosotros se nos pone ahí, pero ni siquiera se me ha citado a declarar. Ni como testigo ni como nada. A veces se hacen juicios previos sin tener todos los datos”, dijo.
“Lo de la Universidad SEK se está investigando, pero nunca ha dado ningún aporte económico al señor Eugenio Díaz”, indicó el también vicepresidente de la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP).
Investigación Contraloría
Por otro lado, hasta Contraloría General de la República llegaron los dirigentes de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), para solicitar una investigación a fondo del ministro de Justicia, Teodoro Ribera, en relación al “Caso Lucro” al interior de la Comisión Nacional de Acreditación (CNA).
El objetivo es esclarecer los vínculos e intereses que, eventualmente, tendría el secretario de Estado con el ex presidente del CNA, Eugenio Díaz, cuando siendo rector de la Universidad Autónoma el 2010, participó en la acreditación del plantel.
Así lo manifestó el presidente de la FECH, Andrés Fielbaum, quien indicó que el contralor también debe investigar la relación que tiene el ministro con la inmobiliaria Gaudí, pues “según su propia declaración de intereses sigue siendo accionista de esta empresa, que es la que arrienda terrenos a la Universidad Autónoma, que –como es de público conocimiento- es la mecanismo más usual que se ocupa para el ilegal lucro en las universidades”.
Fielbaum, además, agregó que “hay un antecedente de becas que entrega la municipalidad de San Miguel en la Universidad Autónoma que están firmadas, justamente, por la inmobiliaria, lo que hace aún más extraño el vínculo entre ambas instituciones”, dijo.