Con un debate sobre el estado actual y los pasos a seguir del proceso constituyente se realizó este lunes 8 de mayo el lanzamiento del Observatorio del Proceso Constituyente de la Fundación RED – Red de Estudios para la Profundización Democrática en el salón Eloísa Díaz de la Casa Central de la Universidad de Chile.
Tras el desarrollo de la etapa participativa del proceso y la redacción de las Bases Ciudadanas para la nueva Constitución en 2016, en abril pasado la Presidenta de la República envió el proyecto de reforma al capítulo XV de la Carta Magna, que es precisamente el que rige los mecanismos para su modificación. El Observatorio del Proceso Constituyente de la Fundación RED busca evaluar este proceso a partir de los estándares de la democracia participativa y del involucramiento ciudadano.
Ernesto Riffo, el Director de esta instancia, abrió la ceremonia describiendo el seguimiento del proceso que realizará su organización y destacó la importancia de la participación en el cambio a la Carta Fundamental.
“Parte de la crisis de representación se explica al menos en parte por la debilidad de la participación. Desde un comienzo el sistema político impuesto por la Constitución de 1980 tuvo una comprensión no democrática de la participación, y muestra en distintas partes el esfuerzo por separar lo social de lo político, en otras palabras, a la sociedad civil de los órganos representativos”, señaló.
Luego, el Ministro del Interior, Mario Fernández, junto con destacar la creación de esta instancia, se refirió a los próximos pasos del proceso: “Lo que la Presidenta propuso en su programa fue una nueva Constitución. No una reforma. Ello requiere la acción del poder constituyente originario; en castizo, el pueblo. Y esto se realizará a través de una convención constituyente que será elegida por dos terceras partes del Congreso”, señaló.
“Se ha enviado una reforma para modificar el capítulo XV al Congreso Nacional. Ese órgano es sede del poder constituyente. Es decir, se le pide a un órgano que renuncie a uno de sus poderes, quizás el mayor de todos. Y lo hacemos porque el compromiso fue que este proceso constituyente sería democrático, participativo y constitucional”, agregó.
A continuación, el senador de la Democracia Cristiana Ignacio Walker; el exmiembro del Consejo Ciudadano de Observadores, Hernán Larraín Matte; y la integrante de la Comisión de Contenidos Constitucionales de Revolución Democrática, Javiera Parada, evaluaron cómo el Gobierno ha llevado a cabo el proceso hasta ahora. La académica del Instituto de Asuntos Públicos de la Universidad de Chile Claudia Heiss moderó el panel de discusión.
El senador Ignacio Walker (DC) valoró la iniciativa del Gobierno para reformar el capítulo XV de la Constitución, y criticó la propuesta del ex Presidente Piñera. “La propuesta del Gobierno es inteligente porque obliga al acuerdo. Se requieren dos tercios del Congreso para modificar el capítulo XV, y dos tercios también para seleccionar a la Convención Constituyente”, indicó.
“Creo que la propuesta del ex Presidente Piñera es un retroceso. Bajar el número de parlamentarios es bastante populista. Menos parlamentarios, menos gasto fiscal es popular, pero es una jibarización de la representación y de la representatividad”, agregó.
Hernán Larraín Matte (Evópoli), en tanto, criticó el actuar de La Moneda tras la etapa participativa.
“Creo que el Gobierno está cometiendo un error, porque está debilitando el proceso constituyente. Esto es una paradoja, viniendo de alguien que desde la oposición fue muy escéptico de este proceso. Pero tras participar e involucrar a nuestro propio partido hoy vemos que lo que está haciendo el Gobierno es politizar este debate en una año electoral, cuando debería poder debatirlo la ciudadanía en otro contexto“, aseguró.
“Además la propuesta del Gobierno es ambigua. No resuelve la disyuntiva entre quienes creen en la asamblea constituyente y quienes no creen en ella. Este proyecto tiene la magia de ponerlos a todos juntos”, añadió.
Javiera Parada (RD) aseguró que el entusiasmo por participar de la primera fase del proceso no ha perdurado en el tiempo. “Creo que los chilenos no nos hemos felicitado lo suficiente por lo masivo y la calidad del debate constitucional que tuvimos el año pasado. Ninguna Constitución del mundo ha sido creada con un debate tan amplio. Pero la riqueza de ese proceso, que nos permitió ver que teníamos muchos más puntos en común que diferencias, se diluyó”, señaló.
“Quizás no estábamos preparados para tanta participación. Ni los partidos ni el Gobierno ni el equipo de sistematizadores. Y cuando fueron entregadas las bases no hubo un proceso para poner la nueva Constitución al centro de la decisión. Faltó decisión del Gobierno para mantener esa pulsión constituyente”, agregó.
*Por Uchile.cl