El jueves pasado explotó el supuesto montaje en la “Operación Huracán”. La información se conoció luego que Fiscalía instruyera una investigación a los policías uniformados vinculados con allanamiento y posterior detención de ocho comuneros mapuches acusados de asociación ilícita terrorista.
Las pruebas serían el problema. Según lo confirmó el Ministerio Público luego de una pericia realizada por sus técnicos se determinó que los mensajes en los que se basó la detención habrían sido “implantados” por Carabineros, la historia dejaba abierta una herida entre ambas instituciones.
El problema escaló pronto. Rápidamente los dardos se centraron en la figura del Director General Bruno Villalobos. Nuevamente se pedía su renuncia, tal como ocurrió cuando estalló el fraude al interior de la institución.
VER: http://radio.uchile.cl/2018/01/26/general-director-de-carabineros-nuevamente-en-el-ojo-del-huracan/
El calvario de Villalobos había empezado muchos meses antes. A comienzos de 2017 se destapó un millonario fraude al interior de Carabineros. En ese momento se hablaba de ocho mil millones de pesos defraudados y 21 imputados; la cifra actual se acerca a los 27 mil millones y la lista de los imputados llega a los 130.
Durante todo este tiempo la figura del director general ha estado en el centro de los cuestionamientos. Tempranamente, figuras del mundo político y social pidieron que fuera removido de su cargo. La Moneda resistió.
VER: http://radio.uchile.cl/2017/11/08/crecen-cuestionamientos-a-blindaje-politico-a-bruno-villalobos/
El apoyo de Michelle Bachelet y el Ministerio del Interior fue inquebrantable. Incluso cuando los más férreos detractores del alto mando estuvieron dentro del bloque de Gobierno, las autoridades se mantuvieron firmes en su decisión. Se reformularía la institución, se cambiaría la primera línea de Carabineros, pero Villalobos seguiría dirigiéndolos.
Nada los hizo cambiar de postura, tampoco las primeras horas después que estallara el presunto montaje en el marco de la “Operación Huracán”. Eso siguió así hasta que, en medio de la tormenta, el Director General tomó un avión hasta Miami haciendo uso de su feriado legal.
El subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, envió un comunicado público en el que le exigió reintegrarse a sus labores. “Mientras se desarrollan investigaciones administrativas y penales vinculadas a la denominada ‘Operación Huracán’, se le ha indicado a la autoridad policial que suspenda su feriado legal y retome sus funciones a la brevedad”, decía parte del comunicado que fue difundido por la prensa.
72 horas después, Bruno Villalobos arribaba al país y su primer destino sería La Moneda, mientras todos daban por hecho que su renuncia sería inminente, el Ejecutivo decidió ratificarlo en su cargo. En punto de prensa, el general señaló que el Ministro le impartió instrucciones para encontrar la “verdad judicial” en este caso.