Cada minuto es importante en el estado de salud de Celestino Córdova, que ya se acerca a los 100 días de huelga de hambre, medida que adoptó para presionar a Gendarmería a ser autorizado para la renovación de su rewe, ceremonia propia de la cultura mapuche y de su condición de machi.
Durante este miércoles, Córdova sufrió una caída que lo obligó a ser atendido en el Hospital de Temuco. Su vocera, Gabriela Calfucoy, comentó con nuestro medio los exámenes que se les fueron practicados.
“Le hicieron dos: electrocardiograma y radiografía. Lo otro no se lo quiso hacer y por lo mismo pidió que lo trasladara a Nueva Imperial”, señaló.
Cabe destacar que el machi no acepta nada que tenga que ver con la medicina tradicional, produciéndose incluso una distancia entre él y su equipo médico occidental. Por esa misma razón fue trasladado al Hospital Intercultural de Nueva Imperial, donde será atendido por personas de su cultura.
El golpe en la cabeza también implicó que suspendiera la huelga de hambre seca que comenzaría la autoridad mapuche. Gabriela Calfucoy agregó que “eso se va a tener que volver a evaluar, debido al golpe. Como todavía no tenemos clara la evaluación, no podemos arriesgar a que asuma esa decisión”.
El Instituto Nacional de Derechos Humanos había advertido que esta medida de huelga de hambre seca le daría menos de 72 horas de vida a Celestino Córdova, y aunque esto todavía no se concrete, la urgencia persiste. El gobierno, por su parte, no se ha movido de lo que ha sido su declaración inicial, diciendo que no dialogará mientras exista esta “presión” por parte del condenado.