Las autoridades japonesas confirmaron la llegada de tsunamis a la costa oeste de Japón, en particular a la prefectura de Ishikawa, horas después del sismo de magnitud preliminar 7,6 que ha sacudido la costa oeste del país.
Ishikawa estaba bajo “alerta de envergadura por tsunami”, la primera de esta naturaleza desde el devastador terremoto de 2011, y una que implica la aparición de olas de entre tres y cinco metros contra la costa.
Las autoridades también confirmaron la llegada de oleaje a las prefecturas de Yamagata, Niigata y Toyama, donde se tiene constancia de cuatro heridos, concretamente en la localidad de Kurobe, entre ellos una mujer de 80 años que se cayó al suelo durante el proceso de evacuación.
Al menos seis personas están atrapadas bajo escombros y queda por ver si un gran incendio declarado en Wajima, la localidad más afectada, ha dejado heridos.
El sismo de 7,6 ha sido el más intenso de la cadena de 20 terremotos registrados en las inmediaciones de la costa de Ishikawa y la vecina prefectura de Niigata.
La ciudad de Wajima, en la prefectura de Ishikawa, recibió los peores efectos del sismo. Al menos una decena de edificios se derrumbaron y habría ahora mismo seis personas atrapadas bajo los escombros, según hizo saber el secretario jefe del Gabinete japonés, Hayashi Yoshimasa, el primer alto responsable del Gobierno en comparecer ante los medios.
Además, los bomberos también están combatiendo un gran incendio declarado en la ciudad, que se está extendiendo por el barrio de Kawaicho sin que hasta ahora haya información sobre víctimas, según hizo saber la División de Prevención contra los Desastres en un comunicado recogido por Asahi Shimbun.
Hasta el momento, según el Ministerio de Defensa japonés, han sido evacuadas aproximadamente 1.000 residentes de la ciudad a través de la base militar, donde efectivos del 14º Regimiento General de las Fuerzas de Autodefensa de Japón han comenzado a llegar para atender las operaciones de rescate sobre el terreno.
Las centrales nucleares no registraron daños
El Gobierno japonés constató que unos 30 mil hogares se quedaron sin luz en toda la prefectura pero las centrales nucleares de la zona no parecen haber sido afectadas, de acuerdo con el secretario jefe de Gabinete.
Sólo se tiene constancia del incendio de un transformador eléctrico en la planta nuclear de Shiga, en la prefectura homónima, pero las llamas fueron extinguidas y la planta en sí no está afectada.
La operadora Kansai Electric Power Company no constató daños en las centrales nucleares de Ohi y Takahama, en la prefectura de Fukui, dos de las más vulnerables del litoral oeste ante un posible sismo, según la cadena pública japonesa NHK.
Tampoco se vio afectada de momento la central de Kashiwazaki-Kariwa, según un comunicado de la Tokyo Electric Power Company (TEPCO) recogido por el Asahi Shimbun.
Los residentes de la capital del país constataron réplicas en los edificios a consecuencia del temblor pero de momento no se tiene constancia de víctimas en la metrópolis.
No obstante, la Administración Meteorológica Nacional de Japón dio aviso de que el peligro no ha terminado. Según los especialistas de la agencia japonesa, las réplicas continuarán durante la próxima semana.
Especialmente peligrosos serán los próximos dos o tres días, durante los cuales existe la posibilidad de que se repitan fuertes temblores de magnitud superior a 7. Los sismólogos japoneses piden a los residentes locales, en este sentido, que extremen la vigilancia.