El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que el desempleo durante el trimestre agosto- octubre se ubicó en un 6,6 por ciento, variando 0,1 puntos porcentuales, respecto del trimestre móvil anterior y una disminución de 0,6 puntos sobre los doce meses anteriores.
Frente a estas cifras, el ministro de Economía, Pablo Longueira, aseguró que los resultados “confirman que vamos por el camino correcto y que estamos dando pasos importantes para aumentar la participación de las mujeres en el empleo formal”.
El secretario de Estado proyectó que para el año 2013 la tasa de desempleo fluctuará entre un 6 y 6,5 por ciento, añadiendo que se continuará “sorteando la crisis, como lo hemos hecho hasta ahora, con una demanda interna dinámica y una economía sólida”.
Según Longueira, pese a la crisis internacional, Chile cuenta con un activo mercado laboral y la economía ha alcanzado pleno empleo, que contrario a lo que muchos han advertido, no generará presiones inflacionarias.
Aunque la afirmación sobre el pleno empleo fue desestimada por el economista Andrés Solimano, el positivo escenario es real a nivel estadístico y las proyecciones del ministro de Economía podrían concretarse, según dijo.
“Hay un escenario en que el ritmo de crecimiento se mantiene, aunque las proyecciones de América Latina, en general, que hacen los organismos internacionales muestran una desaceleración para el año que viene y la economía mundial no está en una buena situación. Sin embargo, si Chile sigue creciendo a los ritmos actuales, usando ciertos coeficientes de producción, podrían darse esas proyecciones de empleo”, explicó el ex director de Flacso.
De igual manera, Solimano llamó a hacer radiografía de la calidad del empleo, en todos sus aspectos, lo que debería apoyarse con políticas laborales que vayan en esta línea.
“No hay que mirar solo la cantidad del empleos, sino la calidad de los empleos que se generan. Es importante entrar en una segunda generación de políticas laborales que pongan énfasis en eso. Faltaría trabajar más en esos conceptos, es lo que recomienda la Organización Internacional del Trabajo y el análisis de las cifras laborales debe hacerse incorporando también estas consideraciones, no solamente el número de ocupación”, sostuvo.
El especialista, finalmente, aseguró que en el empleo en Chile se dan muchas informalidades, trabajos de baja productividad, concentración en servicios y comercio, por lo que difícilmente se podría hablar de pleno empleo.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que el desempleo durante el trimestre agosto- octubre se ubicó en un 6,6 por ciento, variando 0,1 puntos porcentuales, respecto del trimestre móvil anterior y una disminución de 0,6 puntos sobre los doce meses anteriores.
Frente a estas cifras, el ministro de Economía, Pablo Longueira, aseguró que los resultados “confirman que vamos por el camino correcto y que estamos dando pasos importantes para aumentar la participación de las mujeres en el empleo formal”.
El secretario de Estado proyectó que para el año 2013 la tasa de desempleo fluctuará entre un 6 y 6,5 por ciento, añadiendo que se continuará “sorteando la crisis, como lo hemos hecho hasta ahora, con una demanda interna dinámica y una economía sólida”.
Según Longueira, pese a la crisis internacional, Chile cuenta con un activo mercado laboral y la economía ha alcanzado pleno empleo, que contrario a lo que muchos han advertido, no generará presiones inflacionarias.
Aunque la afirmación sobre el pleno empleo fue desestimada por el economista Andrés Solimano, el positivo escenario es real a nivel estadístico y las proyecciones del ministro de Economía podrían concretarse, según dijo.
“Hay un escenario en que el ritmo de crecimiento se mantiene, aunque las proyecciones de América Latina, en general, que hacen los organismos internacionales muestran una desaceleración para el año que viene y la economía mundial no está en una buena situación. Sin embargo, si Chile sigue creciendo a los ritmos actuales, usando ciertos coeficientes de producción, podrían darse esas proyecciones de empleo”, explicó el ex director de Flacso.
De igual manera, Solimano llamó a hacer radiografía de la calidad del empleo, en todos sus aspectos, lo que debería apoyarse con políticas laborales que vayan en esta línea.
“No hay que mirar solo la cantidad del empleos, sino la calidad de los empleos que se generan. Es importante entrar en una segunda generación de políticas laborales que pongan énfasis en eso. Faltaría trabajar más en esos conceptos, es lo que recomienda la Organización Internacional del Trabajo y el análisis de las cifras laborales debe hacerse incorporando también estas consideraciones, no solamente el número de ocupación”, sostuvo.
El especialista, finalmente, aseguró que en el empleo en Chile se dan muchas informalidades, trabajos de baja productividad, concentración en servicios y comercio, por lo que difícilmente se podría hablar de pleno empleo.
El Instituto Nacional de Estadísticas (INE) informó que el desempleo durante el trimestre agosto- octubre se ubicó en un 6,6 por ciento, variando 0,1 puntos porcentuales, respecto del trimestre móvil anterior y una disminución de 0,6 puntos sobre los doce meses anteriores.
Frente a estas cifras, el ministro de Economía, Pablo Longueira, aseguró que los resultados “confirman que vamos por el camino correcto y que estamos dando pasos importantes para aumentar la participación de las mujeres en el empleo formal”.
El secretario de Estado proyectó que para el año 2013 la tasa de desempleo fluctuará entre un 6 y 6,5 por ciento, añadiendo que se continuará “sorteando la crisis, como lo hemos hecho hasta ahora, con una demanda interna dinámica y una economía sólida”.
Según Longueira, pese a la crisis internacional, Chile cuenta con un activo mercado laboral y la economía ha alcanzado pleno empleo, que contrario a lo que muchos han advertido, no generará presiones inflacionarias.
Aunque la afirmación sobre el pleno empleo fue desestimada por el economista Andrés Solimano, el positivo escenario es real a nivel estadístico y las proyecciones del ministro de Economía podrían concretarse, según dijo.
“Hay un escenario en que el ritmo de crecimiento se mantiene, aunque las proyecciones de América Latina, en general, que hacen los organismos internacionales muestran una desaceleración para el año que viene y la economía mundial no está en una buena situación. Sin embargo, si Chile sigue creciendo a los ritmos actuales, usando ciertos coeficientes de producción, podrían darse esas proyecciones de empleo”, explicó el ex director de Flacso.
De igual manera, Solimano llamó a hacer radiografía de la calidad del empleo, en todos sus aspectos, lo que debería apoyarse con políticas laborales que vayan en esta línea.
“No hay que mirar solo la cantidad del empleos, sino la calidad de los empleos que se generan. Es importante entrar en una segunda generación de políticas laborales que pongan énfasis en eso. Faltaría trabajar más en esos conceptos, es lo que recomienda la Organización Internacional del Trabajo y el análisis de las cifras laborales debe hacerse incorporando también estas consideraciones, no solamente el número de ocupación”, sostuvo.
El especialista, finalmente, aseguró que en el empleo en Chile se dan muchas informalidades, trabajos de baja productividad, concentración en servicios y comercio, por lo que difícilmente se podría hablar de pleno empleo.
