A poco tiempo que saliera a la luz pública un documento de trabajo que regulaba las uniones de hecho – que desató algunas desavenencias entre los miembros de la Alianza – un nuevo foco de polémica se encendió en torno a la presentación de de un proyecto de ley que regula las uniones civiles entre personas de distinto y el mismo sexo.
El texto de ley, presentado por parlamentarios de la Concertación, establece la unión civil como “la unión entre personas naturales, ya sean de distinto o del mismo sexo”, explícitamente.
La diputada del PPD María Antonieta Saa, subrayó la importancia de este proyecto, que busca aclarar la histórica demanda de las agrupaciones ciudadanas.
“Hoy las parejas que conviven constituyen el 53 por ciento del total de uniones que hay en el país. No podemos dejar a esta gente sin regulación y esperamos que el Congreso los apoye”, afirmó la parlamentaria.
Visión que fue respaldada por el presidente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, quien señaló que este proyecto interpreta sus demandas originales en cuanto a superar las diferencias existentes en la legislación chilena.
Jiménez indicó además que es la presente iniciativa y no el documento de trabajo que se maneja en la Alianza la que debería tener el respaldo de Sebastián Piñera, para que de esa forma existiera el piso político para su aprobación.
“Si sumamos el respaldo de la Alianza por Chile, que ha señalado que está dispuesta a legislar, se podrá discutir el proyecto de ley que está ingresando. Creemos que existen las condiciones en la sociedad chilena para reconocer de una vez por todas la igualdad de derecho para estos dos millones de personas que están sin protección jurídica respecto de su patrimonio y convivencia”, sentenció el dirigente.
La iniciativa cuenta también con el apoyo del candidato del bloque oficialista, Eduardo Frei, cuya vocera expresó que “la integración de todos los ciudadanos, independiente de su condición y de las opciones que hayan tomado, es un tema de derechos humanos. Nos alegramos que en el debate público la sociedad esté lista para reconocer la diversidad, lo que nos hace más grandes”.
Sin embargo, desmarcándose de las palabras de Sebastián Piñera, el presidente de la UDI, Juan Antonio Coloma, mantuvo la postura mayoritaria del gremialismo.
Coloma incluso responsabilizó a la difusión del documento “Acuerdo de bien común” de los senadores Andrés Allamand de RN y Andrés Chadwick de la UDI de que esta polémica presione a Sebastián Piñera respecto de las uniones civiles
“Soy partidario de un matrimonio entre un hombre y una mujer. Asumo que habrán personas que tengan espacios de convivencia, eso es un problema de cada uno, pero de ahí a intentar que la sociedad genere una institución en función de esa realidad me parece un error”, inquirió el parlamentario.
Una nueva polémica valórica que, una vez más, contrapone las visiones al interior de la Alianza , que en su ala más conservadora se niega a cualquier tipo de legislación que de pie a los matrimonios homosexuales.
A poco tiempo que saliera a la luz pública un documento de trabajo que regulaba las uniones de hecho – que desató algunas desavenencias entre los miembros de la Alianza – un nuevo foco de polémica se encendió en torno a la presentación de de un proyecto de ley que regula las uniones civiles entre personas de distinto y el mismo sexo.
El texto de ley, presentado por parlamentarios de la Concertación, establece la unión civil como “la unión entre personas naturales, ya sean de distinto o del mismo sexo”, explícitamente.
La diputada del PPD María Antonieta Saa, subrayó la importancia de este proyecto, que busca aclarar la histórica demanda de las agrupaciones ciudadanas.
“Hoy las parejas que conviven constituyen el 53 por ciento del total de uniones que hay en el país. No podemos dejar a esta gente sin regulación y esperamos que el Congreso los apoye”, afirmó la parlamentaria.
Visión que fue respaldada por el presidente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, quien señaló que este proyecto interpreta sus demandas originales en cuanto a superar las diferencias existentes en la legislación chilena.
Jiménez indicó además que es la presente iniciativa y no el documento de trabajo que se maneja en la Alianza la que debería tener el respaldo de Sebastián Piñera, para que de esa forma existiera el piso político para su aprobación.
“Si sumamos el respaldo de la Alianza por Chile, que ha señalado que está dispuesta a legislar, se podrá discutir el proyecto de ley que está ingresando. Creemos que existen las condiciones en la sociedad chilena para reconocer de una vez por todas la igualdad de derecho para estos dos millones de personas que están sin protección jurídica respecto de su patrimonio y convivencia”, sentenció el dirigente.
La iniciativa cuenta también con el apoyo del candidato del bloque oficialista, Eduardo Frei, cuya vocera expresó que “la integración de todos los ciudadanos, independiente de su condición y de las opciones que hayan tomado, es un tema de derechos humanos. Nos alegramos que en el debate público la sociedad esté lista para reconocer la diversidad, lo que nos hace más grandes”.
Sin embargo, desmarcándose de las palabras de Sebastián Piñera, el presidente de la UDI, Juan Antonio Coloma, mantuvo la postura mayoritaria del gremialismo.
Coloma incluso responsabilizó a la difusión del documento “Acuerdo de bien común” de los senadores Andrés Allamand de RN y Andrés Chadwick de la UDI de que esta polémica presione a Sebastián Piñera respecto de las uniones civiles
“Soy partidario de un matrimonio entre un hombre y una mujer. Asumo que habrán personas que tengan espacios de convivencia, eso es un problema de cada uno, pero de ahí a intentar que la sociedad genere una institución en función de esa realidad me parece un error”, inquirió el parlamentario.
Una nueva polémica valórica que, una vez más, contrapone las visiones al interior de la Alianza , que en su ala más conservadora se niega a cualquier tipo de legislación que de pie a los matrimonios homosexuales.
A poco tiempo que saliera a la luz pública un documento de trabajo que regulaba las uniones de hecho – que desató algunas desavenencias entre los miembros de la Alianza – un nuevo foco de polémica se encendió en torno a la presentación de de un proyecto de ley que regula las uniones civiles entre personas de distinto y el mismo sexo.
El texto de ley, presentado por parlamentarios de la Concertación, establece la unión civil como “la unión entre personas naturales, ya sean de distinto o del mismo sexo”, explícitamente.
La diputada del PPD María Antonieta Saa, subrayó la importancia de este proyecto, que busca aclarar la histórica demanda de las agrupaciones ciudadanas.
“Hoy las parejas que conviven constituyen el 53 por ciento del total de uniones que hay en el país. No podemos dejar a esta gente sin regulación y esperamos que el Congreso los apoye”, afirmó la parlamentaria.
Visión que fue respaldada por el presidente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, quien señaló que este proyecto interpreta sus demandas originales en cuanto a superar las diferencias existentes en la legislación chilena.
Jiménez indicó además que es la presente iniciativa y no el documento de trabajo que se maneja en la Alianza la que debería tener el respaldo de Sebastián Piñera, para que de esa forma existiera el piso político para su aprobación.
“Si sumamos el respaldo de la Alianza por Chile, que ha señalado que está dispuesta a legislar, se podrá discutir el proyecto de ley que está ingresando. Creemos que existen las condiciones en la sociedad chilena para reconocer de una vez por todas la igualdad de derecho para estos dos millones de personas que están sin protección jurídica respecto de su patrimonio y convivencia”, sentenció el dirigente.
La iniciativa cuenta también con el apoyo del candidato del bloque oficialista, Eduardo Frei, cuya vocera expresó que “la integración de todos los ciudadanos, independiente de su condición y de las opciones que hayan tomado, es un tema de derechos humanos. Nos alegramos que en el debate público la sociedad esté lista para reconocer la diversidad, lo que nos hace más grandes”.
Sin embargo, desmarcándose de las palabras de Sebastián Piñera, el presidente de la UDI, Juan Antonio Coloma, mantuvo la postura mayoritaria del gremialismo.
Coloma incluso responsabilizó a la difusión del documento “Acuerdo de bien común” de los senadores Andrés Allamand de RN y Andrés Chadwick de la UDI de que esta polémica presione a Sebastián Piñera respecto de las uniones civiles
“Soy partidario de un matrimonio entre un hombre y una mujer. Asumo que habrán personas que tengan espacios de convivencia, eso es un problema de cada uno, pero de ahí a intentar que la sociedad genere una institución en función de esa realidad me parece un error”, inquirió el parlamentario.
Una nueva polémica valórica que, una vez más, contrapone las visiones al interior de la Alianza , que en su ala más conservadora se niega a cualquier tipo de legislación que de pie a los matrimonios homosexuales.
