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Año XVI, 17 de julio de 2024


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Comienza cuenta regresiva para rescatar a los 33 mineros

El ministro de Salud, Jaime Mañalich, dijo que el próximo martes se iniciaría el operativo de rescate para sacar a los 33 mineros atrapados desde el 5 de agosto. Sin embargo, el titular de Minería se apresuró en poner paños fríos y dijo que todo dependerá de la decisión de encamisar o no el ducto, por lo que el podrían tardar entre "tres, ocho o diez días" en comenzar el rescate, esto, si se cumplen con las expectativas de que la perforadora T-130, que tiene un avance de 585 metros, llegue este viernes o la madrugada del sábado al refugio.

Ninoska Leiva y Cristián Zúñiga

  Viernes 8 de octubre 2010 15:28 hrs. 
Foto: Alex FuentesFoto: Alex Fuentes

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Todo indicaría que el proceso de rescate los 33 trabajadores atrapados en la mina San José desde el 5 de agosto se iniciará el próximo martes 12 de octubre, luego que el ministro de Salud, Jaime Mañalich, señaló que el rompimiento de la perforadora T-130, el Plan B puede llegar al taller donde están los mineros la noche de hoy.

Mañalich encabeza las medidas sanitarias implementadas para la estabilización y cuidado de los mineros, y del plan a los que se les someterá al salir a la superficie.

El secretario de Estado dijo que se encamisará con tubería sólo el primer tercio del pozo, lo que es equivalente a unos 200 metros, agregando que el Plan B ya alcanzó los 585 metros, por lo que se encuentra a sólo 40 de hacer contacto con los mineros atrapados a más de 700 metros de profundidad.

Sin embargo, el ministro de Minería, Laurence Golborne, le puso paños fríos a las expectativas generadas por el titular de Salud y aclaró que se siguen “manejando los plazos que se habían señalado anteriormente”.

Golborne aclaró que, si bien el “rompimiento”  de la galería donde se encuentran los mineros se producirá “en las próximas 24 horas, esta noche o la madrugada del sábado”, el rescate se realizará “en tres, ocho o diez días más, según la decisión que tomen los técnicos” respecto de encamisar o no la salida.

Golborne enfatizó que la decisión relativa al encamisado se tomará sólo cuando se produzca el rompimiento y “cuando tengamos toda la información”.

En el transcurso de la mañana se detuvo el trabajo de la T-130 para hacerle una mantención a los martillos que trabajaron toda la noche. Sin embargo, la autoridad sanitaria explicó que “el percance está programado porque la última parte probablemente va a ser en roca viva, no encamisada, por lo que  necesita ser muy bien pulida” y añadió “en la noche llegamos”.

Pero nuevamente Goldborne salió al paso y aclaró que “la celeridad de ese rompimiento va a depender de la velocidad de cambio de martillo, introducción de barras, que toma una seis horas cada uno de esos procesos, luego la velocidad de perforación que efectivamente el martillo esté dando. Hay que llegar con menos velocidad al punto de ruptura porque es necesario que el martillo no pase en banda en el aire. Con todos esos elementos estimamos que puede ocurrir está noche o madrugada de mañana, pero no tenemos una certeza exacta de la hora”.

Algunos parlamentarios que llegaron a la zona prefirieron guardar cautela. La senadora Isabel Allende (PS) llamó a tomar todas las precauciones necesarias para no correr riesgos en el rescate.

“Tengo la sensación que su impresión (de Mañalich) es que puede ocurrir el martes, pero creo que se debe ser bien serios en el sentido que esto lo tiene que determinar después de que se rompa, y de los estudios que analicen cuánto encamisamiento se debe hacer, y dependerá mucho de eso. El ministro me informó que su equipo de salud estará preparado a contar del lunes en la  medianoche. Él piensa que si no se va a encamisar todo podría ocurrir el martes”, explicó la parlamentaria.

En tanto, el jefe del equipo de ingenieros a cargo del rescate de los mineros, Andrés Sougarret, insistió en que se trata de un proceso delicado, ya que está en juego la vida de 33 personas que deben salir sin problemas por lo que no se debe escatimar ningún cuidados.

“En las próximas 24 horas esperamos la rotura de no mediar un problema. Luego se necesita hacer el escaneo final del pozo para poder determinar cuál es la condición final en la que quedaron las paredes del ducto y adoptar la decisión del encamisado, que puede variar entre cuatro a ocho días”, dijo el ingeniero.

La noticia fue recibida con alegría por los familiares de los mineros que reaccionaron emocionados al conocer que en los próximos días se podrían reencontrar con sus seres queridos.

De manera simultánea, el plan C, la máquina petrolera, continúa avanzando y se encuentra en los 372 metros. Su objetivo es llegar a los 612 metros de profundidad. Se estima que este lunes alcanzaría el objetivo. Sin embargo, esta perforación había presentado un desvío, lo que obligó hace unos días a reducir su diámetro de 28 pulgadas a 17,5.

Ayer, los 33 mineros continuaron enviando a la superficie elementos personales que durante estos más de dos meses los han acompañado.

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