La Octava Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago emitió una orden al Seremi de Justicia Metropolitano, José Ramón Gutiérrez, de conceder la libertad condicional a Patricio Cereceda, ex mayor del Ejército y responsable de la muerte de 45 jóvenes en los faldeos del volcán Antuco, durante en mayo de 2005.
El tribunal de alzada reafirmó la decisión en votación unánime, luego de que en primera instancia se negara la libertad a Cereceda, quien ya ha cumplido la mitad de su condena en el Penal de Punta Peuco, donde ingresó en enero de 2008.
El abogado querellante en la causa, Alfredo Morgado, manifestó su disconformidad por la decisión judicial y declaró además su intención porque la Corte Suprema revoque el fallo, quien presentará un recurso de apelación ante el máximo tribunal chileno.
“La extensión del mal ocasionado, 45 fallecidos, las circunstancias en que ocurre, una orden con absoluto desprecio de la integridad física de las personas, son antecedentes que deben ser ponderados adecuadamente por la Corte Suprema a través del recurso de apelación y dejar sin efecto este recurso de protección que permite que recupere prontamente su libertad”, señaló Morgado.
Por su parte, los familiares de las víctimas reaccionaron con dolor e indignación ante la noticia. La presidenta de la Agrupación de Familiares de Víctimas de Antuco, Angélica Monares, enfatizó sobre la mínima condena que recibió Cereceda, apenas 5 años y un día, además de ser encausado como único responsable de la tragedia militar.
La dirigente sostuvo que “a pesar de todo este proceso, este gasto de energía que se hizo para tener a alguien encausado, se logró sólo mantenerlo a él, apenas 5 años para la cantidad de gente que fue muerta es la nada misma. Nos sentimos muy desamparados y muy amargados ante la posibilidad que salga en libertad, fue mezquina y miserable la justicia que se nos dio, y todos los días se nos amenaza con que se puede quitar la orden, que puede salir en cualquier momento”.
Un aspecto importante de esta resolución es el papel del Seremi de Justicia, cuya justificación ante la negativa de libertad condicional fue considerada insuficiente por los jueces, situación que favoreció la solicitud de Cereceda. Ante ello, el ministro de Justicia, Teodoro Ribera, declaró que el Gobierno trabaja por suprimir la participación del Ejecutivo en resoluciones netamente judiciales, en peticiones como la libertad condicional.
Ribera informó que “han existido en el pasado muchos casos donde las personas privadas de libertad provisional recurren a la justicia, invocando que los seremis no han fundamentado adecuadamente y lo han obtenido. Por eso estamos modificando la ley para que sea una decisión netamente judicial, con absoluta participación de los jueces sin intervención del ministerio de Justicia”.
El ex mayor ingresó en enero de 2008 al penal Punta Peuco, para cumplir una condena de 5 años y un día. Transcurrida poco más de la mitad de la condena, su defensa tramitó en tres ocasiones una libertad condicional, siendo en tercera instancia que la justicia resuelve favorablemente a su salida. Cereceda fue indicado como el único responsable por la marcha en el volcán Antuco que causó la muerte por congelamiento de 45 conscriptos, conocida como “la mayor tragedia del Ejército chileno en tiempos de paz”.
La Octava Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago emitió una orden al Seremi de Justicia Metropolitano, José Ramón Gutiérrez, de conceder la libertad condicional a Patricio Cereceda, ex mayor del Ejército y responsable de la muerte de 45 jóvenes en los faldeos del volcán Antuco, durante en mayo de 2005.
El tribunal de alzada reafirmó la decisión en votación unánime, luego de que en primera instancia se negara la libertad a Cereceda, quien ya ha cumplido la mitad de su condena en el Penal de Punta Peuco, donde ingresó en enero de 2008.
El abogado querellante en la causa, Alfredo Morgado, manifestó su disconformidad por la decisión judicial y declaró además su intención porque la Corte Suprema revoque el fallo, quien presentará un recurso de apelación ante el máximo tribunal chileno.
“La extensión del mal ocasionado, 45 fallecidos, las circunstancias en que ocurre, una orden con absoluto desprecio de la integridad física de las personas, son antecedentes que deben ser ponderados adecuadamente por la Corte Suprema a través del recurso de apelación y dejar sin efecto este recurso de protección que permite que recupere prontamente su libertad”, señaló Morgado.
Por su parte, los familiares de las víctimas reaccionaron con dolor e indignación ante la noticia. La presidenta de la Agrupación de Familiares de Víctimas de Antuco, Angélica Monares, enfatizó sobre la mínima condena que recibió Cereceda, apenas 5 años y un día, además de ser encausado como único responsable de la tragedia militar.
La dirigente sostuvo que “a pesar de todo este proceso, este gasto de energía que se hizo para tener a alguien encausado, se logró sólo mantenerlo a él, apenas 5 años para la cantidad de gente que fue muerta es la nada misma. Nos sentimos muy desamparados y muy amargados ante la posibilidad que salga en libertad, fue mezquina y miserable la justicia que se nos dio, y todos los días se nos amenaza con que se puede quitar la orden, que puede salir en cualquier momento”.
Un aspecto importante de esta resolución es el papel del Seremi de Justicia, cuya justificación ante la negativa de libertad condicional fue considerada insuficiente por los jueces, situación que favoreció la solicitud de Cereceda. Ante ello, el ministro de Justicia, Teodoro Ribera, declaró que el Gobierno trabaja por suprimir la participación del Ejecutivo en resoluciones netamente judiciales, en peticiones como la libertad condicional.
Ribera informó que “han existido en el pasado muchos casos donde las personas privadas de libertad provisional recurren a la justicia, invocando que los seremis no han fundamentado adecuadamente y lo han obtenido. Por eso estamos modificando la ley para que sea una decisión netamente judicial, con absoluta participación de los jueces sin intervención del ministerio de Justicia”.
El ex mayor ingresó en enero de 2008 al penal Punta Peuco, para cumplir una condena de 5 años y un día. Transcurrida poco más de la mitad de la condena, su defensa tramitó en tres ocasiones una libertad condicional, siendo en tercera instancia que la justicia resuelve favorablemente a su salida. Cereceda fue indicado como el único responsable por la marcha en el volcán Antuco que causó la muerte por congelamiento de 45 conscriptos, conocida como “la mayor tragedia del Ejército chileno en tiempos de paz”.
La Octava Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago emitió una orden al Seremi de Justicia Metropolitano, José Ramón Gutiérrez, de conceder la libertad condicional a Patricio Cereceda, ex mayor del Ejército y responsable de la muerte de 45 jóvenes en los faldeos del volcán Antuco, durante en mayo de 2005.
El tribunal de alzada reafirmó la decisión en votación unánime, luego de que en primera instancia se negara la libertad a Cereceda, quien ya ha cumplido la mitad de su condena en el Penal de Punta Peuco, donde ingresó en enero de 2008.
El abogado querellante en la causa, Alfredo Morgado, manifestó su disconformidad por la decisión judicial y declaró además su intención porque la Corte Suprema revoque el fallo, quien presentará un recurso de apelación ante el máximo tribunal chileno.
“La extensión del mal ocasionado, 45 fallecidos, las circunstancias en que ocurre, una orden con absoluto desprecio de la integridad física de las personas, son antecedentes que deben ser ponderados adecuadamente por la Corte Suprema a través del recurso de apelación y dejar sin efecto este recurso de protección que permite que recupere prontamente su libertad”, señaló Morgado.
Por su parte, los familiares de las víctimas reaccionaron con dolor e indignación ante la noticia. La presidenta de la Agrupación de Familiares de Víctimas de Antuco, Angélica Monares, enfatizó sobre la mínima condena que recibió Cereceda, apenas 5 años y un día, además de ser encausado como único responsable de la tragedia militar.
La dirigente sostuvo que “a pesar de todo este proceso, este gasto de energía que se hizo para tener a alguien encausado, se logró sólo mantenerlo a él, apenas 5 años para la cantidad de gente que fue muerta es la nada misma. Nos sentimos muy desamparados y muy amargados ante la posibilidad que salga en libertad, fue mezquina y miserable la justicia que se nos dio, y todos los días se nos amenaza con que se puede quitar la orden, que puede salir en cualquier momento”.
Un aspecto importante de esta resolución es el papel del Seremi de Justicia, cuya justificación ante la negativa de libertad condicional fue considerada insuficiente por los jueces, situación que favoreció la solicitud de Cereceda. Ante ello, el ministro de Justicia, Teodoro Ribera, declaró que el Gobierno trabaja por suprimir la participación del Ejecutivo en resoluciones netamente judiciales, en peticiones como la libertad condicional.
Ribera informó que “han existido en el pasado muchos casos donde las personas privadas de libertad provisional recurren a la justicia, invocando que los seremis no han fundamentado adecuadamente y lo han obtenido. Por eso estamos modificando la ley para que sea una decisión netamente judicial, con absoluta participación de los jueces sin intervención del ministerio de Justicia”.
El ex mayor ingresó en enero de 2008 al penal Punta Peuco, para cumplir una condena de 5 años y un día. Transcurrida poco más de la mitad de la condena, su defensa tramitó en tres ocasiones una libertad condicional, siendo en tercera instancia que la justicia resuelve favorablemente a su salida. Cereceda fue indicado como el único responsable por la marcha en el volcán Antuco que causó la muerte por congelamiento de 45 conscriptos, conocida como “la mayor tragedia del Ejército chileno en tiempos de paz”.
