Nuevamente se revela una seria inconsistencia entre lo que dicen y lo que hacen nuestros representantes en el Congreso Nacional. Así lo demostró la encuesta 2011 del Observatorio Parlamentario, este año realizada a senadores, quienes fueron consultados sobre su disposición de voto en ocho iniciativas de Derechos Humanos y Democracia.
Este año, a diferencia del anterior donde la encuesta se realizó a diputados, los legisladores de la UDI mostraron una mayor disposición a responder la encuesta, sin embargo fueron de los peores evaluados, a diferencia de los legisladores de la Concertación. Y si bien, en líneas generales, se valoró la alta adhesión a votar por estos proyectos, la inconsistencia se plasmó en hechos.
La abogada del Observatorio Ciudadano, Consuelo Labra, explicó que “son paradigmáticos en este caso el reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, cuyo proyecto ha sido discutido por los pueblos originarios, porque no tiene consulta, porque en el fondo el contenido del proyecto está de acuerdo a los estándares internacionales, pero los parlamentarios muestran en más de un 93 por ciento una aprobación del reconocimiento constitucional de pueblos indígenas. Se trata de una deuda histórica con los pueblos indígenas hace más de 20 años y todavía no ha sido cumplida”.
Este proyecto lleva casi 10 años de tramitación considerando la primera iniciativa presentada. Una situación similar es la del proyecto que establece medidas contra la discriminación, pese a un respaldo de un 76, 7 por ciento, lleva casi siete años en el Congreso. Con menos apoyo están las iniciativas de aborto terapéutico (un 53,3 por ciento) y mostrando una resistencia del mundo parlamentario está el proyecto de ley que consagra un matrimonio igualitario, con un 33 por ciento.
En materia de fortalecimiento de la democracia está la iniciativa popular de ley y con mayor fuerza en un contexto de movilizaciones sociales y descontento ciudadano.
“Estamos hablando del 93 por ciento de senadores que apoyan la iniciativa popular de ley. Se trata de un compromiso de Gobierno porque es un mecanismo de democracia directa que permite a la ciudadanía participar en el proceso legislativo. Por eso, cuesta entender que jamás en el Senado se haya debatido un proyecto en esta materia y que ni siquiera la propuesta del Presidente Piñera de 2010 haya sido considerada”, señaló la abogada de la Corporación Humanas y Coordinadora del Observatorio Parlamentario, Camila Maturana.
En el alto apoyo siguen la reforma al sistema electoral y el establecimiento de plebiscitos nacionales, ambos con un 73,3 por ciento y luego la ley de paridad, que si bien cuenta con un 63 por ciento de apoyo, nunca un senador o senadora ha presentado un proyecto para debatir este tema.
Alberto Coddou, del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales, afirmó que en la clase política esta tendencia está consagrada, por lo que existen fuertes reticencias a cambiar el modelo. Para el especialista, lo mismo se puede ver hoy en la discusión del cambio al sistema binominal.
“El discurso del Gobierno, el discurso del Presidente Piñera, es que mientras no traigan una propuesta perfectamente diseñada no vamos a echar abajo el sistema que actualmente tenemos. Hay un falso dilema, ya que en ningún Congreso del mundo los proyectos se presentan de antemano con todos sus detalles previamente discutidos. La gracia del Parlamento es que sea un foro de discusión, que tiene los mecanismos institucionales para que esas diferencia se vayan resolviendo”, manifestó Coddou.
Por todas estas razones, el Observatorio Parlamentario hizo un llamado a los legisladores a dar un giro en la forma de hacer política y acoger las demandas ciudadanos, por otro lado, instó a los chilenos a estar atentos a la hora de entregar su voto a algún candidato.
Nuevamente se revela una seria inconsistencia entre lo que dicen y lo que hacen nuestros representantes en el Congreso Nacional. Así lo demostró la encuesta 2011 del Observatorio Parlamentario, este año realizada a senadores, quienes fueron consultados sobre su disposición de voto en ocho iniciativas de Derechos Humanos y Democracia.
Este año, a diferencia del anterior donde la encuesta se realizó a diputados, los legisladores de la UDI mostraron una mayor disposición a responder la encuesta, sin embargo fueron de los peores evaluados, a diferencia de los legisladores de la Concertación. Y si bien, en líneas generales, se valoró la alta adhesión a votar por estos proyectos, la inconsistencia se plasmó en hechos.
La abogada del Observatorio Ciudadano, Consuelo Labra, explicó que “son paradigmáticos en este caso el reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, cuyo proyecto ha sido discutido por los pueblos originarios, porque no tiene consulta, porque en el fondo el contenido del proyecto está de acuerdo a los estándares internacionales, pero los parlamentarios muestran en más de un 93 por ciento una aprobación del reconocimiento constitucional de pueblos indígenas. Se trata de una deuda histórica con los pueblos indígenas hace más de 20 años y todavía no ha sido cumplida”.
Este proyecto lleva casi 10 años de tramitación considerando la primera iniciativa presentada. Una situación similar es la del proyecto que establece medidas contra la discriminación, pese a un respaldo de un 76, 7 por ciento, lleva casi siete años en el Congreso. Con menos apoyo están las iniciativas de aborto terapéutico (un 53,3 por ciento) y mostrando una resistencia del mundo parlamentario está el proyecto de ley que consagra un matrimonio igualitario, con un 33 por ciento.
En materia de fortalecimiento de la democracia está la iniciativa popular de ley y con mayor fuerza en un contexto de movilizaciones sociales y descontento ciudadano.
“Estamos hablando del 93 por ciento de senadores que apoyan la iniciativa popular de ley. Se trata de un compromiso de Gobierno porque es un mecanismo de democracia directa que permite a la ciudadanía participar en el proceso legislativo. Por eso, cuesta entender que jamás en el Senado se haya debatido un proyecto en esta materia y que ni siquiera la propuesta del Presidente Piñera de 2010 haya sido considerada”, señaló la abogada de la Corporación Humanas y Coordinadora del Observatorio Parlamentario, Camila Maturana.
En el alto apoyo siguen la reforma al sistema electoral y el establecimiento de plebiscitos nacionales, ambos con un 73,3 por ciento y luego la ley de paridad, que si bien cuenta con un 63 por ciento de apoyo, nunca un senador o senadora ha presentado un proyecto para debatir este tema.
Alberto Coddou, del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales, afirmó que en la clase política esta tendencia está consagrada, por lo que existen fuertes reticencias a cambiar el modelo. Para el especialista, lo mismo se puede ver hoy en la discusión del cambio al sistema binominal.
“El discurso del Gobierno, el discurso del Presidente Piñera, es que mientras no traigan una propuesta perfectamente diseñada no vamos a echar abajo el sistema que actualmente tenemos. Hay un falso dilema, ya que en ningún Congreso del mundo los proyectos se presentan de antemano con todos sus detalles previamente discutidos. La gracia del Parlamento es que sea un foro de discusión, que tiene los mecanismos institucionales para que esas diferencia se vayan resolviendo”, manifestó Coddou.
Por todas estas razones, el Observatorio Parlamentario hizo un llamado a los legisladores a dar un giro en la forma de hacer política y acoger las demandas ciudadanos, por otro lado, instó a los chilenos a estar atentos a la hora de entregar su voto a algún candidato.
Nuevamente se revela una seria inconsistencia entre lo que dicen y lo que hacen nuestros representantes en el Congreso Nacional. Así lo demostró la encuesta 2011 del Observatorio Parlamentario, este año realizada a senadores, quienes fueron consultados sobre su disposición de voto en ocho iniciativas de Derechos Humanos y Democracia.
Este año, a diferencia del anterior donde la encuesta se realizó a diputados, los legisladores de la UDI mostraron una mayor disposición a responder la encuesta, sin embargo fueron de los peores evaluados, a diferencia de los legisladores de la Concertación. Y si bien, en líneas generales, se valoró la alta adhesión a votar por estos proyectos, la inconsistencia se plasmó en hechos.
La abogada del Observatorio Ciudadano, Consuelo Labra, explicó que “son paradigmáticos en este caso el reconocimiento constitucional de los pueblos indígenas, cuyo proyecto ha sido discutido por los pueblos originarios, porque no tiene consulta, porque en el fondo el contenido del proyecto está de acuerdo a los estándares internacionales, pero los parlamentarios muestran en más de un 93 por ciento una aprobación del reconocimiento constitucional de pueblos indígenas. Se trata de una deuda histórica con los pueblos indígenas hace más de 20 años y todavía no ha sido cumplida”.
Este proyecto lleva casi 10 años de tramitación considerando la primera iniciativa presentada. Una situación similar es la del proyecto que establece medidas contra la discriminación, pese a un respaldo de un 76, 7 por ciento, lleva casi siete años en el Congreso. Con menos apoyo están las iniciativas de aborto terapéutico (un 53,3 por ciento) y mostrando una resistencia del mundo parlamentario está el proyecto de ley que consagra un matrimonio igualitario, con un 33 por ciento.
En materia de fortalecimiento de la democracia está la iniciativa popular de ley y con mayor fuerza en un contexto de movilizaciones sociales y descontento ciudadano.
“Estamos hablando del 93 por ciento de senadores que apoyan la iniciativa popular de ley. Se trata de un compromiso de Gobierno porque es un mecanismo de democracia directa que permite a la ciudadanía participar en el proceso legislativo. Por eso, cuesta entender que jamás en el Senado se haya debatido un proyecto en esta materia y que ni siquiera la propuesta del Presidente Piñera de 2010 haya sido considerada”, señaló la abogada de la Corporación Humanas y Coordinadora del Observatorio Parlamentario, Camila Maturana.
En el alto apoyo siguen la reforma al sistema electoral y el establecimiento de plebiscitos nacionales, ambos con un 73,3 por ciento y luego la ley de paridad, que si bien cuenta con un 63 por ciento de apoyo, nunca un senador o senadora ha presentado un proyecto para debatir este tema.
Alberto Coddou, del Centro de Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales, afirmó que en la clase política esta tendencia está consagrada, por lo que existen fuertes reticencias a cambiar el modelo. Para el especialista, lo mismo se puede ver hoy en la discusión del cambio al sistema binominal.
“El discurso del Gobierno, el discurso del Presidente Piñera, es que mientras no traigan una propuesta perfectamente diseñada no vamos a echar abajo el sistema que actualmente tenemos. Hay un falso dilema, ya que en ningún Congreso del mundo los proyectos se presentan de antemano con todos sus detalles previamente discutidos. La gracia del Parlamento es que sea un foro de discusión, que tiene los mecanismos institucionales para que esas diferencia se vayan resolviendo”, manifestó Coddou.
Por todas estas razones, el Observatorio Parlamentario hizo un llamado a los legisladores a dar un giro en la forma de hacer política y acoger las demandas ciudadanos, por otro lado, instó a los chilenos a estar atentos a la hora de entregar su voto a algún candidato.
