En este contexto de reacciones a la Reforma Tributaria, esta mañana los partidos oficialistas representados por el vicepresidente de Renovación Nacional, Baldo Prokurica, y el presidente de la Unión Demócrata Independiente (UDI), salieron al paso de las críticas formuladas por algunos sectores de la oposición, sobre la iniciativa.

Cabe señalar que entre las críticas que más se escuchó está en considerar al proyecto de ley como “insuficiente” para poder financiar la reforma educacional que viene planteando desde el año pasado el movimiento estudiantil.

En relación a las críticas formuladas por la Concertación, el presidente del gremialismo Patricio Melero dijo que esta iniciativa “es cuantitativa moderada y cualitativamente muy amplia, desde el momento que innova con impuestos denominados verdes, que van a generar estímulos a la preservación, al reciclaje, como también a castigar las externalidades negativas que generan el mal manejo de algunos residuos hacia el medioambiente. Además, pone énfasis en reducir impuestos, en los de segunda categoría, que van a beneficiar a los sectores medios de la población, no a los más ricos”.

En tanto, el Vicepresidente RN, Senador Baldo Prokurica, señaló que “estas declaraciones adolecen de una fuerte dosis de Alzheimer y por otro lado, de miopía. Pareciera que los parlamentarios y dirigentes políticos de la Concertación, olvidan como le entregaron al gobierno del Presidente Piñera la educación. Ellos olvidan que nunca hicieron una reforma tributaria para beneficiar a la clase media”.

Además, los parlamentarios de gobierno destacaron el hecho de que la oposición se olvida que nunca hizo una reforma tributaria que apoyara a la clase media chilena y a los sectores más vulnerables.

Luego de la serie de cuestionamientos lanzados contra el proyecto que, busca recaudar entre 700 y mil millones de dólares para financiar la reforma educacional, el mismo Presidente Piñera respondió a través de una entrevista que publicó hoy el diario La Tercera.

En el texto el Mandatario se refiere a los reparos provenientes del bloque opositor que en conjunto con el Partido Comunista elaboraron una propuesta de reforma con la cual se podrían obtener 7 mil millones de dólares por año.

Respecto de esto, el Jefe de Estado señaló “¿Qué autoridad tiene la Concertación para criticarnos por estar haciendo lo que ellos nunca fueron capaces de hacer? Si son tan críticos con esta reforma tributaria, ¿por qué entonces no la plantearon en el programa del candidato de la Concertación, el senador Frei?”.

Piñera dijo que cree que la Concertación no va a buscar un acuerdo para este proyecto de ley y que van a mantener su posición de proponer una reforma que recaude hasta 7 mil millones de dólares, una cifra que estimó muy lejana de las posibilidades de la economía chilena.

Ante la pregunta de que si haría cambios para alcanzar el acuerdo necesario, el Presidente indicó que “No voy a decir que no cambiaré una coma de este proyecto ni por un millón de votos. Pero esta es una reforma tributaria muy bien estudiada, y en consecuencia, de su base y estructura central no nos vamos a mover”.

Mientras tanto, desde el mundo de los universitarios el presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Noam Titelman, denunció contradicción en subsidio para la educación que beneficiará a quienes paguen impuesto a la renta y afirmó que es una medida regresiva.

Un aspecto criticado y resaltado por el doctor en Ciencias Económicas y director del programa económico de la Fundación Chile 21, Eugenio Rivera, es la necesidad de aumentar no en 75 mil sino en 750 mil los cupos para la enseñanza pre escolar, ámbito que por sí solo requería mil 200 millones de dólares.

Además, la duplicación de la subvención escolar directa y la gratuidad para la clase media en establecimientos municipales y subvencionados necesitaría de 6 mil millones más, por lo que el experto afirmó que los anuncios del Gobierno sólo cubren una mínima parte.

Cabe señalar que la base de los cambios tributarios está dada por un incremento a los tributos de las utilidades de las empresas de un 17 a un 20 por ciento. Por otro lado, contempla una rebaja al impuesto a la renta, que fluctuará entre el 10 y el 15 por ciento, cuyo tope beneficiará a los sectores de menores ingresos y además de un descuento del 50 por ciento de los gastos que  la clase media efectúe en la educación de sus hijos.