Unasur apoya a Ecuador en el caso Assange
El bloque regional, luego de una reunión en Guayaquil, expresó su solidaridad y apoyo al gobierno de Ecuador ante la amenaza de una violación a su embajada en Reino Unido. Quito afirma haber recibido de parte del gobierno inglés una nota en donde señalan estar dispuestos a detener a Assange en la propia delegación diplomática.
Lunes 20 de agosto 2012 1:44 hrs.
La Unión de Naciones Sudamericanas en su declaración final, leída por su Secretario General, el venezolano Alí Rodríguez, indicó que ‘reafirman el principio de derecho internacional en virtud del cual no puede invocarse el derecho interno para no cumplir una obligación de carácter internacional’. Además condenaron la amenaza de la utilización de la fuerza y ‘reafirmaron el principio de inviolabilidad de los locales de las misiones diplomáticas y oficinas consulares en relación a lo establecido en la convención de Viena’.
El texto final, de siete puntos, reiteró también el derecho soberano de los Estados a conceder asilo y refugio para ‘proteger los derechos humanos de las personas que consideran que su vida o integridad física se encuentra amenazada’.
Los cancilleres de los doce Estados miembros de la Unasur hicieron también una llamado a Ecuador y Reino Unido a entablar una negociación directa para solucionar el conflicto que se originó el jueves pasado cuando Quito decidió otorgarle el asilo diplomático al fundador de Wikileaks, refugiado en su embajada en Londres desde hace dos meses.
Unasur concuerda así con lo afirmado la víspera por los integrantes del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), que luego de una reunión advirtieron a Reino Unido de las ‘graves consecuencias que se desencadenarían en todo el mundo’ en caso de una intrusión a la embajada ecuatoriana en Londres.
América Latina aparece en bloque defendiendo a Ecuador en esta crisis diplomática. Algo se presentía ya el viernes pasado cuando la Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) acordó, con las excepciones de Estados Unidos, Canadá y Trinidad y Tobago, realizar una reunión de cancilleres para tratar el tema de la inviolabilidad de la embajada ecuatoriana, cita que se llevará a cabo el próximo 24 de agosto en la sede del organismo en Washington.
Una defensa que según Marco Moreno, analista internacional de la Universidad Central de Chile, se explica por ‘la fragilidad de nuestras instituciones que hace que el derecho internacional sea muy importante para las naciones latinoamericanas’. Interrogado por RFI, el analista también agregó que ‘Ecuador está utilizando esta situación para tener una proyección internacional que hoy no tiene. También hay un exceso de parte del gobierno británico en una interpretación que no respeta ni reconoce el derecho de los otros, eso es lo que genera la solidaridad del resto de los países latinoamericanos’.
Una solidaridad que este domingo también fue reconocida por el propio Julian Assange, que en su intervención en el balcón de la embajada de Ecuador en Londres agradeció a los países de América que ‘intervinieron para reconocer el derecho de asilo’.
La Unión de Naciones Sudamericanas en su declaración final, leída por su Secretario General, el venezolano Alí Rodríguez, indicó que ‘reafirman el principio de derecho internacional en virtud del cual no puede invocarse el derecho interno para no cumplir una obligación de carácter internacional’. Además condenaron la amenaza de la utilización de la fuerza y ‘reafirmaron el principio de inviolabilidad de los locales de las misiones diplomáticas y oficinas consulares en relación a lo establecido en la convención de Viena’.
El texto final, de siete puntos, reiteró también el derecho soberano de los Estados a conceder asilo y refugio para ‘proteger los derechos humanos de las personas que consideran que su vida o integridad física se encuentra amenazada’.
Los cancilleres de los doce Estados miembros de la Unasur hicieron también una llamado a Ecuador y Reino Unido a entablar una negociación directa para solucionar el conflicto que se originó el jueves pasado cuando Quito decidió otorgarle el asilo diplomático al fundador de Wikileaks, refugiado en su embajada en Londres desde hace dos meses.
Unasur concuerda así con lo afirmado la víspera por los integrantes del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), que luego de una reunión advirtieron a Reino Unido de las ‘graves consecuencias que se desencadenarían en todo el mundo’ en caso de una intrusión a la embajada ecuatoriana en Londres.
América Latina aparece en bloque defendiendo a Ecuador en esta crisis diplomática. Algo se presentía ya el viernes pasado cuando la Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) acordó, con las excepciones de Estados Unidos, Canadá y Trinidad y Tobago, realizar una reunión de cancilleres para tratar el tema de la inviolabilidad de la embajada ecuatoriana, cita que se llevará a cabo el próximo 24 de agosto en la sede del organismo en Washington.
Una defensa que según Marco Moreno, analista internacional de la Universidad Central de Chile, se explica por ‘la fragilidad de nuestras instituciones que hace que el derecho internacional sea muy importante para las naciones latinoamericanas’. Interrogado por RFI, el analista también agregó que ‘Ecuador está utilizando esta situación para tener una proyección internacional que hoy no tiene. También hay un exceso de parte del gobierno británico en una interpretación que no respeta ni reconoce el derecho de los otros, eso es lo que genera la solidaridad del resto de los países latinoamericanos’.
Una solidaridad que este domingo también fue reconocida por el propio Julian Assange, que en su intervención en el balcón de la embajada de Ecuador en Londres agradeció a los países de América que ‘intervinieron para reconocer el derecho de asilo’.
La Unión de Naciones Sudamericanas en su declaración final, leída por su Secretario General, el venezolano Alí Rodríguez, indicó que ‘reafirman el principio de derecho internacional en virtud del cual no puede invocarse el derecho interno para no cumplir una obligación de carácter internacional’. Además condenaron la amenaza de la utilización de la fuerza y ‘reafirmaron el principio de inviolabilidad de los locales de las misiones diplomáticas y oficinas consulares en relación a lo establecido en la convención de Viena’.
El texto final, de siete puntos, reiteró también el derecho soberano de los Estados a conceder asilo y refugio para ‘proteger los derechos humanos de las personas que consideran que su vida o integridad física se encuentra amenazada’.
Los cancilleres de los doce Estados miembros de la Unasur hicieron también una llamado a Ecuador y Reino Unido a entablar una negociación directa para solucionar el conflicto que se originó el jueves pasado cuando Quito decidió otorgarle el asilo diplomático al fundador de Wikileaks, refugiado en su embajada en Londres desde hace dos meses.
Unasur concuerda así con lo afirmado la víspera por los integrantes del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América), que luego de una reunión advirtieron a Reino Unido de las ‘graves consecuencias que se desencadenarían en todo el mundo’ en caso de una intrusión a la embajada ecuatoriana en Londres.
América Latina aparece en bloque defendiendo a Ecuador en esta crisis diplomática. Algo se presentía ya el viernes pasado cuando la Asamblea de la Organización de Estados Americanos (OEA) acordó, con las excepciones de Estados Unidos, Canadá y Trinidad y Tobago, realizar una reunión de cancilleres para tratar el tema de la inviolabilidad de la embajada ecuatoriana, cita que se llevará a cabo el próximo 24 de agosto en la sede del organismo en Washington.
Una defensa que según Marco Moreno, analista internacional de la Universidad Central de Chile, se explica por ‘la fragilidad de nuestras instituciones que hace que el derecho internacional sea muy importante para las naciones latinoamericanas’. Interrogado por RFI, el analista también agregó que ‘Ecuador está utilizando esta situación para tener una proyección internacional que hoy no tiene. También hay un exceso de parte del gobierno británico en una interpretación que no respeta ni reconoce el derecho de los otros, eso es lo que genera la solidaridad del resto de los países latinoamericanos’.
Una solidaridad que este domingo también fue reconocida por el propio Julian Assange, que en su intervención en el balcón de la embajada de Ecuador en Londres agradeció a los países de América que ‘intervinieron para reconocer el derecho de asilo’.
