Con la designación de José Roa como nuevo jefe del plan “Estadio Seguro” comienza a esclarecerse el futuro de uno de los proyectos emblemáticos del Gobierno de Sebastián Piñera, pero que aún no ha sido ratificado por las nuevas autoridades.
Todo esto en medio de denuncias de vínculos entre dirigentes deportivos con barristas, que fueron expuestas incluso por los salientes encargados del plan, como Cristián Barra.
De hecho, los últimos cuestionamientos al plan Estadio Seguro, surgieron este fin de semana luego de los encuentros entre la “U” y la “UC” y el partido entre Colo Colo y O’Higgins, donde la presencia de fuegos artificiales y lienzos, ambos prohibidos por ley, hicieron que surgiera la interrogante de cómo esos artefactos llegan al Estadio.
A esto hay que sumar el ingreso de un hincha de la UC a la cancha del San Carlos de Apoquindo para encarar al capitán cruzado, Cristián Álvarez, hecho que afortunadamente sólo terminó con la detención del simpatizante de la franja.
Algunos acusan que delegar toda la responsabilidad de la seguridad de los estadios a los clubes es un error, algo que el Intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, se encargó de aclarar.
“Los clubes asumen la responsabilidad de la seguridad del espectáculo deportivo, lo que significa que tienen que haber guardias de acuerdo a la cantidad de personas en una relación de 1 a 50, y en consecuencia dentro del recinto deportivo la responsabilidad primaria le corresponde por supuesto al organizador del evento deportivo”, afirmó la autoridad.
Otro punto importante en esta discusión, es el rol que le cabe a la ANFP a la hora de imponer disciplina. No existe claridad respecto de algún tipo de protocolo que indique qué hacer en caso de disturbios o hechos anómalos en estadio, dejando todo a criterio del árbitro de turno.
De hecho, las sanciones deportivas incluso se podrían posponer más allá del actual campeonato como confirma el presidente del Tribunal de disciplina de la ANFP, Ángel Botto, quien hizo un llamado para que este tema sea tomado en serio por los dirigentes.
“En términos de tiempo procesal hay una posibilidad de que no se cumpla, si es que hay una sanción condenatoria, que esa no se haga efectiva en este campeonato. Yo sigo creyendo que esto pasa por una real decisión del estamento directivo de hacer inversión fuerte en seguridad”, indicó el abogado.
En sus primeras palabras, José Roa sostuvo que este es un trabajo que hay que tomar en serio y se refirió además a los incidentes ocurridos el fin de semana: “Este es un trabajo serio y es un trabajo que requiere la coordinación y participación de distintos actores y esperamos con diálogo y participación poder construir acuerdos permanentes que permitan que los estadios se desempeñen en condiciones adecuadas para la familia. Esperamos que los responsables de seguridad de los respectivos establecimientos den cuenta de su trabajo, indiquen que es lo que falló y cuáles son las medidas que tomarán para que este tipo de situaciones no vuelvan a ocurrir”.
Respecto del futuro del plan Estadio Seguro, este aún permanece en la incertidumbre luego que el ministerio del Interior no haya dado luces aún de si está dispuesto a mantener este programa o simplemente desecharlo para pensar en otra línea de acción.
José Roa es abogado de la Universidad de Chile, Ha ejercido la docencia universitaria, siendo profesor de Protección al Consumidor en nuestra casa de estudios. Fue miembro del grupo consultivo de expertos del programa COMPAL sobre “Competencia y Protección del Consumidor para América Latina” de la UNCTAD.
Es coordinador del área de derechos ciudadanos de la Fundación Dialoga de la Presidenta Michelle Bachelet y ha trabajado, además del Sernac, como profesional del programa Servicio País de la Fundación Nacional para la Superación de la Pobreza.
Con la designación de José Roa como nuevo jefe del plan “Estadio Seguro” comienza a esclarecerse el futuro de uno de los proyectos emblemáticos del Gobierno de Sebastián Piñera, pero que aún no ha sido ratificado por las nuevas autoridades.
Todo esto en medio de denuncias de vínculos entre dirigentes deportivos con barristas, que fueron expuestas incluso por los salientes encargados del plan, como Cristián Barra.
De hecho, los últimos cuestionamientos al plan Estadio Seguro, surgieron este fin de semana luego de los encuentros entre la “U” y la “UC” y el partido entre Colo Colo y O’Higgins, donde la presencia de fuegos artificiales y lienzos, ambos prohibidos por ley, hicieron que surgiera la interrogante de cómo esos artefactos llegan al Estadio.
A esto hay que sumar el ingreso de un hincha de la UC a la cancha del San Carlos de Apoquindo para encarar al capitán cruzado, Cristián Álvarez, hecho que afortunadamente sólo terminó con la detención del simpatizante de la franja.
Algunos acusan que delegar toda la responsabilidad de la seguridad de los estadios a los clubes es un error, algo que el Intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, se encargó de aclarar.
“Los clubes asumen la responsabilidad de la seguridad del espectáculo deportivo, lo que significa que tienen que haber guardias de acuerdo a la cantidad de personas en una relación de 1 a 50, y en consecuencia dentro del recinto deportivo la responsabilidad primaria le corresponde por supuesto al organizador del evento deportivo”, afirmó la autoridad.
Otro punto importante en esta discusión, es el rol que le cabe a la ANFP a la hora de imponer disciplina. No existe claridad respecto de algún tipo de protocolo que indique qué hacer en caso de disturbios o hechos anómalos en estadio, dejando todo a criterio del árbitro de turno.
De hecho, las sanciones deportivas incluso se podrían posponer más allá del actual campeonato como confirma el presidente del Tribunal de disciplina de la ANFP, Ángel Botto, quien hizo un llamado para que este tema sea tomado en serio por los dirigentes.
“En términos de tiempo procesal hay una posibilidad de que no se cumpla, si es que hay una sanción condenatoria, que esa no se haga efectiva en este campeonato. Yo sigo creyendo que esto pasa por una real decisión del estamento directivo de hacer inversión fuerte en seguridad”, indicó el abogado.
En sus primeras palabras, José Roa sostuvo que este es un trabajo que hay que tomar en serio y se refirió además a los incidentes ocurridos el fin de semana: “Este es un trabajo serio y es un trabajo que requiere la coordinación y participación de distintos actores y esperamos con diálogo y participación poder construir acuerdos permanentes que permitan que los estadios se desempeñen en condiciones adecuadas para la familia. Esperamos que los responsables de seguridad de los respectivos establecimientos den cuenta de su trabajo, indiquen que es lo que falló y cuáles son las medidas que tomarán para que este tipo de situaciones no vuelvan a ocurrir”.
Respecto del futuro del plan Estadio Seguro, este aún permanece en la incertidumbre luego que el ministerio del Interior no haya dado luces aún de si está dispuesto a mantener este programa o simplemente desecharlo para pensar en otra línea de acción.
José Roa es abogado de la Universidad de Chile, Ha ejercido la docencia universitaria, siendo profesor de Protección al Consumidor en nuestra casa de estudios. Fue miembro del grupo consultivo de expertos del programa COMPAL sobre “Competencia y Protección del Consumidor para América Latina” de la UNCTAD.
Es coordinador del área de derechos ciudadanos de la Fundación Dialoga de la Presidenta Michelle Bachelet y ha trabajado, además del Sernac, como profesional del programa Servicio País de la Fundación Nacional para la Superación de la Pobreza.
Con la designación de José Roa como nuevo jefe del plan “Estadio Seguro” comienza a esclarecerse el futuro de uno de los proyectos emblemáticos del Gobierno de Sebastián Piñera, pero que aún no ha sido ratificado por las nuevas autoridades.
Todo esto en medio de denuncias de vínculos entre dirigentes deportivos con barristas, que fueron expuestas incluso por los salientes encargados del plan, como Cristián Barra.
De hecho, los últimos cuestionamientos al plan Estadio Seguro, surgieron este fin de semana luego de los encuentros entre la “U” y la “UC” y el partido entre Colo Colo y O’Higgins, donde la presencia de fuegos artificiales y lienzos, ambos prohibidos por ley, hicieron que surgiera la interrogante de cómo esos artefactos llegan al Estadio.
A esto hay que sumar el ingreso de un hincha de la UC a la cancha del San Carlos de Apoquindo para encarar al capitán cruzado, Cristián Álvarez, hecho que afortunadamente sólo terminó con la detención del simpatizante de la franja.
Algunos acusan que delegar toda la responsabilidad de la seguridad de los estadios a los clubes es un error, algo que el Intendente de la Región Metropolitana, Claudio Orrego, se encargó de aclarar.
“Los clubes asumen la responsabilidad de la seguridad del espectáculo deportivo, lo que significa que tienen que haber guardias de acuerdo a la cantidad de personas en una relación de 1 a 50, y en consecuencia dentro del recinto deportivo la responsabilidad primaria le corresponde por supuesto al organizador del evento deportivo”, afirmó la autoridad.
Otro punto importante en esta discusión, es el rol que le cabe a la ANFP a la hora de imponer disciplina. No existe claridad respecto de algún tipo de protocolo que indique qué hacer en caso de disturbios o hechos anómalos en estadio, dejando todo a criterio del árbitro de turno.
De hecho, las sanciones deportivas incluso se podrían posponer más allá del actual campeonato como confirma el presidente del Tribunal de disciplina de la ANFP, Ángel Botto, quien hizo un llamado para que este tema sea tomado en serio por los dirigentes.
“En términos de tiempo procesal hay una posibilidad de que no se cumpla, si es que hay una sanción condenatoria, que esa no se haga efectiva en este campeonato. Yo sigo creyendo que esto pasa por una real decisión del estamento directivo de hacer inversión fuerte en seguridad”, indicó el abogado.
En sus primeras palabras, José Roa sostuvo que este es un trabajo que hay que tomar en serio y se refirió además a los incidentes ocurridos el fin de semana: “Este es un trabajo serio y es un trabajo que requiere la coordinación y participación de distintos actores y esperamos con diálogo y participación poder construir acuerdos permanentes que permitan que los estadios se desempeñen en condiciones adecuadas para la familia. Esperamos que los responsables de seguridad de los respectivos establecimientos den cuenta de su trabajo, indiquen que es lo que falló y cuáles son las medidas que tomarán para que este tipo de situaciones no vuelvan a ocurrir”.
Respecto del futuro del plan Estadio Seguro, este aún permanece en la incertidumbre luego que el ministerio del Interior no haya dado luces aún de si está dispuesto a mantener este programa o simplemente desecharlo para pensar en otra línea de acción.
José Roa es abogado de la Universidad de Chile, Ha ejercido la docencia universitaria, siendo profesor de Protección al Consumidor en nuestra casa de estudios. Fue miembro del grupo consultivo de expertos del programa COMPAL sobre “Competencia y Protección del Consumidor para América Latina” de la UNCTAD.
Es coordinador del área de derechos ciudadanos de la Fundación Dialoga de la Presidenta Michelle Bachelet y ha trabajado, además del Sernac, como profesional del programa Servicio País de la Fundación Nacional para la Superación de la Pobreza.
