Un sufrido triunfo consiguió Chile en su primera presentación en esta Copa América 2015. La victoria de La Roja por 2-0 ante Ecuador, se dio en medio de un creciente nivel de manifestaciones por la educación, las que incluso llegaron a Pinto Durán.
Desde el extranjero se destacaba en diversas portadas y países el convulsionado ambiente en el que se iba a iniciar el torneo más antiguo del mundo. Los casos de corrupción e irregularidades en la política, sumado al descontento de la mesa social por la educación que demandas mejoras estructurales al sistema, eran la antesala de un torneo que antes del pitazo inicial poco tenía de fútbol.
Por ello, una de las mayores preocupaciones para la jornada inaugural era la presencia de Michelle Bachelet en el Estadio Nacional. Si bien la Presidenta asistió al encuentro, nada de dijo de su presencia en el recinto. Los miles de asistentes ignoraron la presencia de la Mandataria, situación con la que se evitó cualquier tipo de abucheos ciudadanos.
Además y tal como lo reseñó el periódico The New York Times, esta Copa América dio su puntapié inicial bajo una nube de reclamos por corrupción, tanto a nivel del mundo del fútbol, con los golpes que recibió -y seguirá recibiendo- la FIFA, luego de la detención de altos dirigentes del organismo rector del fútbol mundial, lo que provocó la ausencia de la plana mayor, tanto de la FIFA como de la Conmebol, de la jornada inaugural.
Con ese preludio La Roja de Sampaoli trataba de concentrarse en el objetivo principal: quedarse con los puntos en el debut, y si bien la tarea fue cumplida, las horas previas al partido tensionaron al entrenador argentino.
Temprano en la mañana, veintenas de docentes se manifestaron a las afueras del campo de entrenamiento de la selección. A poco andar, el propio DT hizo que la dirigencia del Magisterio ingresara a Pinto Durán, ahí conversaron con el cuerpo técnico y se fotografiaron con los futbolistas: La Roja, en un gesto de apoyo, entregó su apoyo al paro docente iniciado hace once días.
Por la tarde a pocas horas de que comenzara el partido, un grupo de alrededor de 100 profesores se manifestaron en las inmediaciones del Estadio Nacional, gritando la consigna: “Hay plata para la Copa, pero no para la educación”.
Por los mismos motivos, un grupo de estudiantes y docentes se congregaron en la Plaza Italia y la Alameda, en una manifestación que bautizaron como “Peloteo por la educación y los profesores”, en la cual lanzaron cientos de pelotas de plásticas a la calle.
En lo netamente futbolístico, Chile consiguió un sufrido triunfo ante la escuadra de Quinteros, en un partido en el que solo en los minutos finales lo pudo asegurar gracias a la conquista de Eduardo Vargas a los 83 minutos, resultado que cerró el marcador en 2-0.
La primera cifra del encuentro fue anotada, mediante lanzamiento penal, por Arturo Vidal a los 66 minutos de juego, el mismo que recibió la falta que marcó con la pena máxima, el árbitro argentino Nestor Pitana.
Al final, el mediocampista Matías Fernández fue expulsado luego de recibir doble amarilla.
Con este triunfo, Chile logró sus primeros 3 puntos, y quedó como puntero del Grupo A, el que comparte además con las selecciones de Bolivia y México, lo que alimenta la esperanza de los hinchas nacionales de lograr la primera Copa América de su historia, ahora que cuenta con la que, para muchos, es la mejor generación de su historia.
La jornada inaugural de esta edición del campeonato de selecciones más antiguo del mundo -con 99 años de historia-, contó con un show pirotécnico y de danza 45 minutos antes del inicio de la brega, el cual contó con la presencia de un grupo de baile de Rapa-Nui, y luego de bailarinas y luces.
Llamó la atención que en el sector conocido como la escotilla 8, en la cual se mantiene un área con los tablones de madera antiguos del principal recinto deportivo del país, se iluminó la frase “Un pueblo sin memoria es un pueblo sin futuro”, haciendo alusión al oscuro pasado que tuvo el Estadio Nacional como recinto de prisión política y tortura en los primeros meses de la Dictadura.
Cabe destacar que, atendiendo el llamado hecho por la Unicef y Fútbol Más en su campaña “América Nos Une, No Hagas Tú La Diferencia”, el público asistente escuchó con respeto el himno nacional de Ecuador, mientras levantaban tarjetas verdes.