El fotógrafo australiano Warren Richardson ganó este jueves el World Press Photo con una imagen capturada mientras un grupo de refugiados sirios intentaba traspasar la frontera entre Serbia y Hungría.
En la foto, titulada “Esperanza por una nueva vida”, se ve cómo pasan a un bebé de unos brazos a otros. El jurado consideró que es muy poderosa por su “simplicidad”.
La fotografía, que nunca llegó a ser publicada, fue tomada el 28 de agosto del año pasado, cuando los refugiados sirios trataban de pasar desde Horgos a Roszke. Warren Richardson, quien trabaja como freelance, llevaba cinco noches acampando con el grupo y esa noche vio como 200 personas llegaban a lo largo de los alambres de espinos.
“Jugamos al gato y al perro con la policía durante toda la noche”, explicó el fotógrafo. “Eran un poco más de las tres de la mañana cuando tomé la foto. No podía utilizar el flash porque la policía estaba al acecho, así que aproveché la luz de la luna”, explicó en un comunicado.