Para Maisa Rojas, climatóloga chilena y doctora en física de la atmósfera de la Universidad de Oxford, el análisis es uno: “El cambio climático es el síntoma más agudo de la crisis que está viviendo la humanidad”, afirma. Y es que en su opinión, hoy el sistema ha generado una seguidilla de situaciones que sumadas han amplificado el problema medioambiental de nuestro plantea.
“Esta crisis involucra no sólo las emisiones de gases invernadero, que es lo que finalmente produce el cambio climático, sino que a todo nuestro estilo de vida y nuestra manera de relacionarnos con el planeta. La contaminación está súper presente. Tiene que ver con el cambio climático, pero también se relaciona con una cosa local”, dice.
El punto, señala, es que actualmente existen conductas- como la alimenticia e incluso la vestimenta- que provocan fuertes impactos en nuestro ecosistema.
Sobre la alimentación, por ejemplo, Maisa Rojas señala que actualmente un tercio de la producción mundial de comida se pierde o se bota. “Esta es una cantidad gigantesca cuando estamos hablando de gente que todavía no tiene suficiente comida para comer”, subraya.
“Pero no solamente eso: si toda esa comida que se pierde y se bota fuera una país, éste sería el tercer emisor más grande de gases efectos invernaderos después de China y Estados Unidos. Así que no solamente es un tema ético-moral de alimentación, sino que contribuye enormemente al cambio climático”, agrega.
Respecto de la industria de ropa, la experta también tiene su crítica. Según comenta, “la vestimenta barata que ha hecho que todos tengamos acceso a mucha ropa, se hace en países que tienen muy malas legislaciones o tratos laborales”.
“Entonces, se hacen en esos países donde se paga muy mal, donde no hay seguridad, no hay sindicalización, etc. Por ende, hay un aspecto social que es complicado. Entonces, la industria de la vestimenta produce no solamente un problema social, sino que también es un gran contribuidor en gases de efectos invernaderos”, añade.
La experta también señala que uno de los países que mejores resultados ha tenido respecto del cuidado medioambiental es Costa Rica. Para ella, en este país se ha realizado un proceso participativo que ha dado resultados positivos en el sentido de que se ha invertido en energías renovables.
Sobre este punto, la experta advierte que Chile aún se encuentra en una etapa de desarrollo. “En los últimos años en Chile ha habido una gran revolución de las energías renovables no convencionales. Para nuestro país esta es una tremenda oportunidad, porque hace muy poco tiempo atrás no estaba tan claro el potencial de las energías renovables y eso ahora, ha cambiado enormemente”, concluye.