Bellas Artes y Museo Nacional de San Carlos se unen en exposición que revisa el arte europeo desde América Latina

La museografía reproduce simbólicamente el trabajo de investigación y catalogación en depósitos, para potenciar las preguntas iniciales planteadas por el equipo curatorial: ¿qué hacen estas obras en los museos latinoamericanos?

La museografía reproduce simbólicamente el trabajo de investigación y catalogación en depósitos, para potenciar las preguntas iniciales planteadas por el equipo curatorial: ¿qué hacen estas obras en los museos latinoamericanos?

Una curatoría conjunta entre el Museo Nacional de Bellas Artes (Chile) y el Museo Nacional de San Carlos (México) se presenta a partir del 8 de abril, con la exposición internacional El canon revisitado. Una mirada al arte europeo desde América Latina, que revisa 70 obras pertenecientes a ambos acervos, para reflexionar sobre las ideas y principios del canon occidental que se instauraron en el continente, a través de la circulación de las imágenes.

Se trata de un largo y extenso proyecto que, a través de obras realizadas en Europa entre los siglos XVI y XVIII, permitirá comprender de forma crítica las colecciones e imaginarios que ambos museos comparten. Para la selección de las piezas y el desarrollo del guion museográfico, se conformó un equipo curatorial integrado por Claudia Garay Molina y Mariano Meza Marroquín de México, y por Gloria Cortés Aliaga, Eva Cancino Fuentes y Manuel Alvarado Cornejo de Chile. En la investigación participaron Jaime Cuevas Pérez de Chile y Paola López Eguiluz de México. Además, los profesionales de mediación de ambas instituciones se involucraron activamente, a través de una propuesta que invitará al público a participar e internalizar los contenidos de la muestra a partir de su propia experiencia.

“Mediante esta muestra queremos invitar no solo a disfrutar de grandes creaciones artísticas, sino también a mirar e interpretar qué nos dicen estas obras, qué valores intentan transmitir, cómo se insertan en una matriz de ideas y sistema de principios que dan forma al canon occidental, definido y potenciado por la circulación de imágenes, como el más efectivo instrumento de la colonización ideológica”, explica el equipo curatorial.

Se escogieron producciones entendidas como universales, elaboradas por artistas como Tintoretto, el Pontormo, José de Rivera, Francisco de Zurbarán o Andrea Vaccaro, entre otros nombres. Son originales y copias que circularon ampliamente por territorios americanos. En ellas se reflejan las grandes exclusiones, como las mujeres. Tal es el caso de Joanna Vergouwen, la única artista presente en la exposición o la copia de una obra de Ginevra Cantofoli, por más de 300 años atribuida a Guido Reni.

“Para el MNBA constituye un gran logro concretar esta exposición conjunta. En primer lugar, constituye una posibilidad de diálogo entre dos instituciones culturales latinoamericanas. Ello significa diálogo de obras, diálogo de instituciones, diálogo de equipos. La inserción del museo en redes internacionales y específicamente latinoamericanas, tanto como el fortalecimiento de las mismas, forma parte de nuestra misión como museo”, explica Fernando Pérez, director del Museo Nacional de Bellas Artes.

“En segundo lugar, la exposición permitirá ofrecer a nuestros públicos un maravilloso conjunto de obras, con un contenido iconológico e iconográfico de enorme potencia y de una gran carga histórica y estética. Se pondrán en discusión temas significativos, como es el de la circulación de obras de arte, la formación y estructuración de cánones estéticos y las relaciones entre centros y periferias. La sala Matta del MNBA con su iluminación completamente renovada constituirá un marco adecuado para esta excepcional concentración de producción artística”, agrega el director MNBA.

WhatsApp Image 2022-04-07 at 17.57.32 (1)

Para Mireida Velázquez Torres, directora del Museo Nacional de San Carlos de México, esta muestra “es resultado de un esfuerzo colaborativo entre los equipos de ambos museos, que refleja los cuestionamientos contemporáneos a dos colecciones históricas que son resultado de una mirada eurocentrista. Para nosotros era fundamental poder trabajar con un museo latinoamericano de la envergadura del MNBA, pues ello significaba la oportunidad de hablar de historias y de procesos artísticos compartidos, pero también de fortalecer los lazos que siempre nos han unido con Chile. Es importante enfatizar que la curaduría entre los equipos de ambas instituciones fue un proceso enriquecedor y de pleno diálogo que da como resultado final una muestra de la más alta calidad”.

Puesta en escena

La museografía reproduce simbólicamente el trabajo de investigación y catalogación en depósitos, para potenciar las preguntas iniciales planteadas por el equipo curatorial: ¿qué hacen estas obras en los museos latinoamericanos?

El público podrá interactuar a través de preguntas abiertas que podrán contestar desde un formulario online, cuyas respuestas se mostrarán en un monitor en la misma exhibición. En tanto que siete pantones extraídos de las obras que dan cuenta de la diversidad de colores de piel, invitarán a reflexionar sobre cómo los rasgos físicos influyen en los estereotipos y prejuicios. Además, se integrarán videos en lengua de señas chilenas, audiodescripciones para algunas piezas y un texto en lenguaje sencillo, de alto contraste (macrotipo) para personas con discapacidad visual, lo que permitirá que la muestra sea más accesible.

Dividido en temas y subtemas que abordan críticamente las piezas seleccionadas, el guion se podrá escuchar activando un código de la cuenta de Spotify del Museo: MNBAChile. Las música de estos audios corresponde a la pieza barroca Sonata I (Dario Castello), interpretada por el grupo Syntagma Musicum de la Universidad de Santiago de Chile.





Presione Escape para Salir o haga clic en la X