La medallista de oro en los 400 metros plano de Santiago 2023, Martina Weil, se refirió a la polémica que surgió en el atletismo durante las últimas horas luego de la denuncia que publicó en sus redes sociales la atleta Poulette Cardoch quien acusó ser “bajada” a última hora de la posta 4×400 sin que existiera un fundamento de peso para tomar esa decisión.
Dicha denuncia fue confirmada por otra de las afectadas, la joven atleta Berdine Castillo, quien fue más allá y acusó actos de “clasismo y discriminación” por parte de quienes estuvieron detrás de esa decisión y apuntó también a la madre de Martina Weil, Ximena Restrepo, quien fue parte del altercado que se vivió previo a la prueba.
Ante esta situación y también a través de sus redes sociales, la medallista panamericana salió al paso de la situación y expresó su frustración por cómo se desarrolló este caso y la manera en que impactó en el equipo de 4×400.
“Fue la peor experiencia que he tenido en mi vida. En un momento dije ‘me cagaron los Panamericanos’. Llegamos a la pista, anuncian al equipo y la cosa se empieza a descontrolar. Quedamos en shock de la gente externa que empezó a llegar. Empezaron a pelear, entrenadores, dirigentes de la federación, otros atletas”, comentó Martina respecto de lo vivido en la previa de esta prueba en el Estadio Nacional.
La atleta agregó que “No tengo nada más que pedir perdón de que mis compañeras de equipo se hayan sentido así. De que realmente estén haciendo estas acusaciones, de que sientan que el proceso fuera tan poco transparente. Fue una decisión técnica que se tomó por separado de las atletas, esto viene de arriba”.
En esa línea, la medallista panamericana relató que “llegó la Berdine, le agarré la mano, la felicité por los 800m… Pero ahora mirando para atrás, puede que no haya sido suficiente… Y le pido perdón. Era un matadero, todavía no entiendo cómo fue que corrimos. Me da mucha pena y mucha rabia, por falta de liderazgo, de manejo, en la única que es colectiva no había nadie velando por el bien del equipo. A nadie le importó cómo se sentían las personas que iban a correr”.
Respecto de la acusación contra su madre, Martina Weil afirmó que “Entiendo por qué la gente está enojada. Aunque yo no haya escuchado lo que dijo mi mamá, me vio llorando, diciéndole mis Panamericanos se acabaron y fueron lo mejor del mundo, vernos a todas nosotros en ese estado fue muy duro para ella también. Desde mi punto de vista, cada una lo pasó la peor de la otra. Cada uno trató de lidiar con lo mejor que pudo. Yo estaba enrabiada, no entendía cómo técnicos, entrenadores, tenían esta pelea armada en la pista”.
Finalmente, la medallista de oro reiteró sus compañeras y añadió que “a Poulette y Berdine, perdón por no haber sido mejor capitana de equipo. Si no salí a defenderlas más temprano hoy es porque no entendía qué estaba pasando. Las aprecio mucho. Ojalá haya un cambio, esta vez sí. Y que las reglas queden claras. Esto pasa por falta de liderazgo”.