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Preocupación por crisis ambiental en zona de Puchuncaví y Quintero

La crisis ambiental de la Bahía de Quintero preocupa a toda la comunidad ya que ha sido afectado todo el ecosistema en que viven. Las organizaciones piden más fiscalización y cuestionan plan maestro para mitigar el impacto de las industrias en la zona.

Cristián Pacheco

  Jueves 8 de septiembre 2011 0:28 hrs. 
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Nuevamente se reunió la comisión de Recursos Naturales y Medio Ambiente de la Cámara de Diputados para analizar la crítica situación en los sectores cercanos a la bahía de Quinteros, donde se investiga la contaminación de la tierra, el aire, el suelo y el agua, que como  ha sido corroborado por distintos estudios, daña progresivamente la salud de los habitantes de la zona.

En esta sesión de la instancia que preside la diputada Andrea Molina, participaron los seremis de Salud, Medio Ambiente y Vivienda de la región de Valparaíso, a quienes se les convocó para discutir las acciones realizadas hasta el momento, como los exámenes aplicados a las personas afectadas, el pre acuerdo de proyecto de producción limpia y además la modificación al Plan Regulador que involucra la extensión del suelo disponible para instalar nuevas industrias, lo que preocupa a la parlamentaria, que además representa al distrito afectado.

“Queremos que definitivamente se saquen estas 400 hectáreas que se estaban presentando para instalar parques industriales en la zona de Puchuncaví. Como diputada me niego rotundamente a que se siga ampliando esto, ya que el área está absolutamente saturada”, comentó la legisladora.

En la anterior reunión de los diputados, participó el Intendente Raúl Celis, quien manifestó su voluntad y propuso lineamientos para generar un Plan Maestro en el sector que mitigue el impacto en la bahía de Quintero, donde en la actualidad existen 19 industrias, para lo cual el gobierno ha facilitado 670 millones para realizar la investigación que durará 18 meses y que mide el nivel de contaminación de la tierra, aguas subterráneas, superficiales y del aire en la zona de Puchuncaví – Quintero.

Sin embargo, la diputada Molina cree que lo más importante es buscar soluciones ahora, luego investigar, y después pensar en un plan maestro, además de buscar los responsables de la crisis ambiental que afecta a ambas comunas.

“No existe la posibilidad de generar ningún Plan Maestro mientras no estén los estudios del Ministerio del Medio Ambiente. Se están realizando cuatro licitaciones donde se va a abordar Concón, Puchuncaví y Quintero en que se analizará el suelo, aire y el agua. Mientras esos estudios no estén definidos, no hay plan que valga”, dijo Andrea Molina.

Por último, la parlamentaria solicitó recursos especiales para dar solución a las urgencias del sector, como la implementación del hospital ante los casos de intoxicación, y accesos adecuados en la zona. <

Por otra parte, se ha planteado que el impacto contaminante de las empresas es de 20 kilómetros a la redonda, lo que ha dañado el ecosistema en su totalidad. No sólo el suelo, el aire y las aguas subterráneas están contaminadas, sino que también el mar.

Roberto Monardes, integrante del Consejo Ecológico Puchuncaví-Quintero y asesor de las caletas unidas de esa zona, señala que existe falta de fiscalización por parte del Estado a las industrias del sector que funcionaron por más de 20 años sin los permisos ambientales correspondientes.

Hay diversos antecedentes de demandas por derrames de petróleo y otros desechos que incluso fueron analizados por investigadores de la Universidad del Mar, y que dio como resultado la presencia de metales pesados en pescados y mariscos de la bahía de Quintero compuesta por siete caletas, Horcón, Sindicato Las Ventanas, Cooperativa Ventanas, Loncura, El Manzano, El Embarcadero y Papagallo.

Monardes pide que los pescadores también sean incluidos en la investigación y en el futuro plan maestro, porque el impacto es generalizado, y porque sus familias y fuente laboral también ha sido dañada.

“Tienen que tomar muestras del sedimento marino, del agua, de los recursos, es decir, un análisis completo. Los niños de La Greda estaba intoxicados y nuestros mariscos también lo están. Los pescadores antiguos hemos crecido comiendo mariscos y ese podría ser un punto que podrían tomar en cuenta las autoridades”, indicó el dirigente.

Monardes, espera que se aprueben pronto los tribunales ambientales, ya que a su juicio la nueva instancia hubiese evitado muchos de estos problemas años anteriores o al menos hubiese facilitado la investigación.

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