Pérdidas de 25 mil millones de dólares sufrieron los fondos de pensiones entre abril y septiembre de este año, según denunció el diputado PPD, Felipe Harboe, quien además exigió al gobierno hacer modificaciones urgentes en el sistema para evitar que las personas asuman el costo de esta mala inversión.
Harboe añadió que esto va a significar que las personas que están en los fondos A y B y que están en edad de pensionarse durante este año, van a ver drásticamente disminuidas sus pensiones, por lo que insistió en que las autoridades deben intervenir lo antes posible.
“Acá hay un daño patrimonial muy grave para las personas que se pensionarán este año. Aquí tiene la autoridad que intervenir a favor de los miles de pensionados afectados por la mala administración de fondos de pensiones, debiéramos hacer una modificación legal que establezca un grado de responsabilidad de directivos según su propio patrimonio, cuando se producen pérdidas. Parece ilógico que las pérdidas sean de los pensionados y las ganancias de los ejecutivos”, declaró Harboe.
El parlamentario añadió que pedirá una sesión especial en la Cámara para que asista la Superintendenta de Pensiones, Solange Berstein, a dar una explicación sobre la magnitud de la pérdida y las acciones del organismo fiscalizador para contenerla.
Por otro lado, el senador DC, Mariano Ruiz Esquide, dio a conocer un proyecto de acuerdo, donde se solicita al Ejecutivo enviar un proyecto de ley con suma urgencia, en el que les permita a los trabajadores que impusieron en el antiguo sistema volver al ex INP (hoy en manos de la Superintendencia de Pensiones) y prorrogar, en al menos cinco años, las normas para promover así estas desvinculaciones, permitiendo a los trabajadores esperar un momento más oportuno para jubilar.
Esto porque, según afirmó Ruiz Esquide, pese a la publicidad engañosa que ejercieron en su génesis las administradoras de fondos, se pudo comprobar que los pensionados del ex INP reciben ingresos tres o cuatro veces más altos que el de las AFP. Una situación que se origina en la ineficiencia del modelo, la que advirtieron el grueso de los parlamentarios médicos desde su creación.
“El modelo de las AFP, con su equivalente de las isapres, era un sistema que no podría funcionar, porque había un modelo absolutamente de lucro y economicista que no tomaba en cuenta a las personas. Esto sería una fuente de recursos para una concentración económica cada vez mayor, como lo vemos en Chile”, apuntó.
En tanto, el presidente de la organización ciudadana Acusa AFP Chile y académico de nuestra universidad, Ricardo Hormazábal, advirtió que el modelo económico actual no es compatible con el sistema, por lo que es urgente generar cambios estructurales en esta materia. El académico indicó que “en Chile y el mundo se ha privilegiado el trabajo precario. En Chile, más del 50 por ciento de los trabajadores no cotiza sino la mitad de su vida laboral. Es un dato de hace años, este sistema no sirve cuando el trabajador debe trabajar a honorarios, entonces se aplicó un sistema que no sirve”.
Y ya hay varias opciones sobre la mesa para frenar los abusos de las administradoras de fondos. Una de ellos es establecer comisiones de cobranza variables en función de rentabilidades objetivas. Así, si los fondos pierden, las AFP también pierdan.
Otra opción es otorgar una mayor responsabilidad a los directores y ejecutivos ante las pérdidas que se sufren y por cierto, la creación de una AFP estatal, una opción que está tomando fuerza ante la crítica situación del ahorro previsional.
Pérdidas de 25 mil millones de dólares sufrieron los fondos de pensiones entre abril y septiembre de este año, según denunció el diputado PPD, Felipe Harboe, quien además exigió al gobierno hacer modificaciones urgentes en el sistema para evitar que las personas asuman el costo de esta mala inversión.
Harboe añadió que esto va a significar que las personas que están en los fondos A y B y que están en edad de pensionarse durante este año, van a ver drásticamente disminuidas sus pensiones, por lo que insistió en que las autoridades deben intervenir lo antes posible.
“Acá hay un daño patrimonial muy grave para las personas que se pensionarán este año. Aquí tiene la autoridad que intervenir a favor de los miles de pensionados afectados por la mala administración de fondos de pensiones, debiéramos hacer una modificación legal que establezca un grado de responsabilidad de directivos según su propio patrimonio, cuando se producen pérdidas. Parece ilógico que las pérdidas sean de los pensionados y las ganancias de los ejecutivos”, declaró Harboe.
El parlamentario añadió que pedirá una sesión especial en la Cámara para que asista la Superintendenta de Pensiones, Solange Berstein, a dar una explicación sobre la magnitud de la pérdida y las acciones del organismo fiscalizador para contenerla.
Por otro lado, el senador DC, Mariano Ruiz Esquide, dio a conocer un proyecto de acuerdo, donde se solicita al Ejecutivo enviar un proyecto de ley con suma urgencia, en el que les permita a los trabajadores que impusieron en el antiguo sistema volver al ex INP (hoy en manos de la Superintendencia de Pensiones) y prorrogar, en al menos cinco años, las normas para promover así estas desvinculaciones, permitiendo a los trabajadores esperar un momento más oportuno para jubilar.
Esto porque, según afirmó Ruiz Esquide, pese a la publicidad engañosa que ejercieron en su génesis las administradoras de fondos, se pudo comprobar que los pensionados del ex INP reciben ingresos tres o cuatro veces más altos que el de las AFP. Una situación que se origina en la ineficiencia del modelo, la que advirtieron el grueso de los parlamentarios médicos desde su creación.
“El modelo de las AFP, con su equivalente de las isapres, era un sistema que no podría funcionar, porque había un modelo absolutamente de lucro y economicista que no tomaba en cuenta a las personas. Esto sería una fuente de recursos para una concentración económica cada vez mayor, como lo vemos en Chile”, apuntó.
En tanto, el presidente de la organización ciudadana Acusa AFP Chile y académico de nuestra universidad, Ricardo Hormazábal, advirtió que el modelo económico actual no es compatible con el sistema, por lo que es urgente generar cambios estructurales en esta materia. El académico indicó que “en Chile y el mundo se ha privilegiado el trabajo precario. En Chile, más del 50 por ciento de los trabajadores no cotiza sino la mitad de su vida laboral. Es un dato de hace años, este sistema no sirve cuando el trabajador debe trabajar a honorarios, entonces se aplicó un sistema que no sirve”.
Y ya hay varias opciones sobre la mesa para frenar los abusos de las administradoras de fondos. Una de ellos es establecer comisiones de cobranza variables en función de rentabilidades objetivas. Así, si los fondos pierden, las AFP también pierdan.
Otra opción es otorgar una mayor responsabilidad a los directores y ejecutivos ante las pérdidas que se sufren y por cierto, la creación de una AFP estatal, una opción que está tomando fuerza ante la crítica situación del ahorro previsional.
Pérdidas de 25 mil millones de dólares sufrieron los fondos de pensiones entre abril y septiembre de este año, según denunció el diputado PPD, Felipe Harboe, quien además exigió al gobierno hacer modificaciones urgentes en el sistema para evitar que las personas asuman el costo de esta mala inversión.
Harboe añadió que esto va a significar que las personas que están en los fondos A y B y que están en edad de pensionarse durante este año, van a ver drásticamente disminuidas sus pensiones, por lo que insistió en que las autoridades deben intervenir lo antes posible.
“Acá hay un daño patrimonial muy grave para las personas que se pensionarán este año. Aquí tiene la autoridad que intervenir a favor de los miles de pensionados afectados por la mala administración de fondos de pensiones, debiéramos hacer una modificación legal que establezca un grado de responsabilidad de directivos según su propio patrimonio, cuando se producen pérdidas. Parece ilógico que las pérdidas sean de los pensionados y las ganancias de los ejecutivos”, declaró Harboe.
El parlamentario añadió que pedirá una sesión especial en la Cámara para que asista la Superintendenta de Pensiones, Solange Berstein, a dar una explicación sobre la magnitud de la pérdida y las acciones del organismo fiscalizador para contenerla.
Por otro lado, el senador DC, Mariano Ruiz Esquide, dio a conocer un proyecto de acuerdo, donde se solicita al Ejecutivo enviar un proyecto de ley con suma urgencia, en el que les permita a los trabajadores que impusieron en el antiguo sistema volver al ex INP (hoy en manos de la Superintendencia de Pensiones) y prorrogar, en al menos cinco años, las normas para promover así estas desvinculaciones, permitiendo a los trabajadores esperar un momento más oportuno para jubilar.
Esto porque, según afirmó Ruiz Esquide, pese a la publicidad engañosa que ejercieron en su génesis las administradoras de fondos, se pudo comprobar que los pensionados del ex INP reciben ingresos tres o cuatro veces más altos que el de las AFP. Una situación que se origina en la ineficiencia del modelo, la que advirtieron el grueso de los parlamentarios médicos desde su creación.
“El modelo de las AFP, con su equivalente de las isapres, era un sistema que no podría funcionar, porque había un modelo absolutamente de lucro y economicista que no tomaba en cuenta a las personas. Esto sería una fuente de recursos para una concentración económica cada vez mayor, como lo vemos en Chile”, apuntó.
En tanto, el presidente de la organización ciudadana Acusa AFP Chile y académico de nuestra universidad, Ricardo Hormazábal, advirtió que el modelo económico actual no es compatible con el sistema, por lo que es urgente generar cambios estructurales en esta materia. El académico indicó que “en Chile y el mundo se ha privilegiado el trabajo precario. En Chile, más del 50 por ciento de los trabajadores no cotiza sino la mitad de su vida laboral. Es un dato de hace años, este sistema no sirve cuando el trabajador debe trabajar a honorarios, entonces se aplicó un sistema que no sirve”.
Y ya hay varias opciones sobre la mesa para frenar los abusos de las administradoras de fondos. Una de ellos es establecer comisiones de cobranza variables en función de rentabilidades objetivas. Así, si los fondos pierden, las AFP también pierdan.
Otra opción es otorgar una mayor responsabilidad a los directores y ejecutivos ante las pérdidas que se sufren y por cierto, la creación de una AFP estatal, una opción que está tomando fuerza ante la crítica situación del ahorro previsional.
