Este martes se canceló la remuneración a los funcionarios de la Asociación Nacional del Ministerio de Educación (Andime), y los 34 trabajadores despedidos tendrían su último ingreso regular. Es por ello que, de forma simbólica, el gremio a nivel nacional paralizó la actividad en sus oficinas desde Arica a Magallanes.
Uno de los focos del conflicto es Iquique, donde el paro comenzó el 30 de noviembre a raíz del despido de siete funcionarios, los que, además, estaban considerados en listas de distinción.
Ema Marín, presidenta de la Secretaría de Educación de la zona, apuntó que “están calificados en lista 1, no hay un proceso que respalde que estén en malas prácticas laborales. Tienen sus hojas limpias, y esa evaluación es de sus jefes directos, entonces el despido es un balde de agua helada, sobretodo en una fecha tan sensible”.
Los funcionarios sostuvieron una serie de conversaciones con las Seremias locales solicitando la incorporación de los trabajadores. Mientras en el sur también existen problemas. Juan Carlos Fuentes, presidente de la sede provincial de Talca indicó que en el Maule hay cuatro trabajadores despedidos en la misma situacióm.
El dirigente indicó que no se condice con el protocolo que firmaron los trabajadores de la ANEF en el marco de la negociación por el reajuste, texto que permitió que este año no se movilizaran. Sin embargo, las determinaciones no se han respetado, lo que complica el funcionamiento más aún en regiones como el Maule.
“Al día siguiente al acuerdo se despidió gente. Un gobierno de excelencia dice la verdad, pero acá hubo mentiras. Es una zona complicada, cuesta conseguir trabajo, y nos parece complicado. Hemos tenido reuniones con el Intendente y otras autoridades para revertir esta situación”, señaló el dirigente.
El presidente nacional del gremio, Nelson Viveros, afirmó que esta situación contribuye a ampliar las desconfianzas en una cartera que además, está en centro del debate nacional por el lucro y las irregularidades en los procesos de fiscalización.
En ese sentido, para el dirigente habría una clara explicación para estos despidos: “Es sintomático que los despidos ocurren donde los alcaldes oficialistas perdieron la elección. La conclusión es que se desplaza gente de los municipios al aparato público, gente que son de confianza política del gobierno”.
Los dirigentes de Andime expusieron en el Senado en Valparaíso sobre la situación que los afecta y acerca del incumplimiento del protocolo con el gobierno, ya que como parlamentarios, ellos debieron aprobar el acuerdo y, “por eso –afirmó el dirigente- les corresponde reaccionar frente a lo que está haciendo otro poder del Estado”.
Este martes se canceló la remuneración a los funcionarios de la Asociación Nacional del Ministerio de Educación (Andime), y los 34 trabajadores despedidos tendrían su último ingreso regular. Es por ello que, de forma simbólica, el gremio a nivel nacional paralizó la actividad en sus oficinas desde Arica a Magallanes.
Uno de los focos del conflicto es Iquique, donde el paro comenzó el 30 de noviembre a raíz del despido de siete funcionarios, los que, además, estaban considerados en listas de distinción.
Ema Marín, presidenta de la Secretaría de Educación de la zona, apuntó que “están calificados en lista 1, no hay un proceso que respalde que estén en malas prácticas laborales. Tienen sus hojas limpias, y esa evaluación es de sus jefes directos, entonces el despido es un balde de agua helada, sobretodo en una fecha tan sensible”.
Los funcionarios sostuvieron una serie de conversaciones con las Seremias locales solicitando la incorporación de los trabajadores. Mientras en el sur también existen problemas. Juan Carlos Fuentes, presidente de la sede provincial de Talca indicó que en el Maule hay cuatro trabajadores despedidos en la misma situacióm.
El dirigente indicó que no se condice con el protocolo que firmaron los trabajadores de la ANEF en el marco de la negociación por el reajuste, texto que permitió que este año no se movilizaran. Sin embargo, las determinaciones no se han respetado, lo que complica el funcionamiento más aún en regiones como el Maule.
“Al día siguiente al acuerdo se despidió gente. Un gobierno de excelencia dice la verdad, pero acá hubo mentiras. Es una zona complicada, cuesta conseguir trabajo, y nos parece complicado. Hemos tenido reuniones con el Intendente y otras autoridades para revertir esta situación”, señaló el dirigente.
El presidente nacional del gremio, Nelson Viveros, afirmó que esta situación contribuye a ampliar las desconfianzas en una cartera que además, está en centro del debate nacional por el lucro y las irregularidades en los procesos de fiscalización.
En ese sentido, para el dirigente habría una clara explicación para estos despidos: “Es sintomático que los despidos ocurren donde los alcaldes oficialistas perdieron la elección. La conclusión es que se desplaza gente de los municipios al aparato público, gente que son de confianza política del gobierno”.
Los dirigentes de Andime expusieron en el Senado en Valparaíso sobre la situación que los afecta y acerca del incumplimiento del protocolo con el gobierno, ya que como parlamentarios, ellos debieron aprobar el acuerdo y, “por eso –afirmó el dirigente- les corresponde reaccionar frente a lo que está haciendo otro poder del Estado”.
Este martes se canceló la remuneración a los funcionarios de la Asociación Nacional del Ministerio de Educación (Andime), y los 34 trabajadores despedidos tendrían su último ingreso regular. Es por ello que, de forma simbólica, el gremio a nivel nacional paralizó la actividad en sus oficinas desde Arica a Magallanes.
Uno de los focos del conflicto es Iquique, donde el paro comenzó el 30 de noviembre a raíz del despido de siete funcionarios, los que, además, estaban considerados en listas de distinción.
Ema Marín, presidenta de la Secretaría de Educación de la zona, apuntó que “están calificados en lista 1, no hay un proceso que respalde que estén en malas prácticas laborales. Tienen sus hojas limpias, y esa evaluación es de sus jefes directos, entonces el despido es un balde de agua helada, sobretodo en una fecha tan sensible”.
Los funcionarios sostuvieron una serie de conversaciones con las Seremias locales solicitando la incorporación de los trabajadores. Mientras en el sur también existen problemas. Juan Carlos Fuentes, presidente de la sede provincial de Talca indicó que en el Maule hay cuatro trabajadores despedidos en la misma situacióm.
El dirigente indicó que no se condice con el protocolo que firmaron los trabajadores de la ANEF en el marco de la negociación por el reajuste, texto que permitió que este año no se movilizaran. Sin embargo, las determinaciones no se han respetado, lo que complica el funcionamiento más aún en regiones como el Maule.
“Al día siguiente al acuerdo se despidió gente. Un gobierno de excelencia dice la verdad, pero acá hubo mentiras. Es una zona complicada, cuesta conseguir trabajo, y nos parece complicado. Hemos tenido reuniones con el Intendente y otras autoridades para revertir esta situación”, señaló el dirigente.
El presidente nacional del gremio, Nelson Viveros, afirmó que esta situación contribuye a ampliar las desconfianzas en una cartera que además, está en centro del debate nacional por el lucro y las irregularidades en los procesos de fiscalización.
En ese sentido, para el dirigente habría una clara explicación para estos despidos: “Es sintomático que los despidos ocurren donde los alcaldes oficialistas perdieron la elección. La conclusión es que se desplaza gente de los municipios al aparato público, gente que son de confianza política del gobierno”.
Los dirigentes de Andime expusieron en el Senado en Valparaíso sobre la situación que los afecta y acerca del incumplimiento del protocolo con el gobierno, ya que como parlamentarios, ellos debieron aprobar el acuerdo y, “por eso –afirmó el dirigente- les corresponde reaccionar frente a lo que está haciendo otro poder del Estado”.
