El senador demócrata cristiano Jorge Pizarro fue elegido para suceder al socialista Camilo Escalona y convertirse en el nuevo presidente del Senado, por 18 votos contra 13 que el oficialismo dio al UDI Jaime Orpis.
Mientras, el radical José Antonio Gómez asumió la vicepresidencia de la Cámara Alta, ocupando el puesto que pertenecía al senador del MAS, Alejandro Navarro.
En su intervención de despedida, Escalona dio “gracias a la vida por haber estado un año en esta testera. Sobre todo, por el peso de los imprevistos suscitados”. Asimismo, el parlamentario destacó que tuvieron que pasar 40 años para que un socialista volviera a asumir la presidencia del Senado, recordando que Salvador Allende había sido el último miembro de su partido en ocupar ese cargo.
Una vez asumido como presidente, Jorge Pizarro afirmó que uno de los principales desafíos de la institución es recuperar la confianza en la ciudadanía. “La desconfianza hacia las instituciones, las desigualdades entre una minoría pudiente y una mayoría vulnerable y la indefensión de las personas son males que han aparecido en nuestra sociedad y que debemos remediar mediante reformas que sean debatidas democráticamente”, advirtió en su discurso.
Además, admitió que “en educación no hemos hecho lo suficiente como país”, puesto que “sigue existiendo una enorme brecha en la calidad educativa y a mi juicio, ella no puede depender de la capacidad de pago de cada familia, lo que sólo hace consolidar las desigualdades sociales y culturales”.
Para finalizar, Pizarro entregó un mensaje a sus “colegas de la Alianza”, asegurando que procurará “ser garantía de diálogo y cooperación entre las distintas visiones” que conviven en el Senado.
La nueva mesa directiva se desempeñará en el cargo hasta marzo del próximo año, según el acuerdo político adoptado al inicio del período legislativo.