Diario y Radio Universidad Chile

Año XVI, 26 de abril de 2024


Escritorio

Gabriel Silber: “Los chilenos no entenderían que el Congreso termine en manos de la derecha”

En entrevista con Radio Universidad de Chile el diputado de la Democracia Cristiana, Gabriel Silber abordó la situación que se vive en la oposición ad portas de que el Frente Amplio decida ratificar o desechar el pacto administrativo que le permitiría convertirse en el próximo presidente e la Cámara de Diputados. Según señala, respetar este acuerdo es el mínimo para avanzar en una mayor articulación del sector.

Montserrat Rollano

  Domingo 24 de febrero 2019 10:52 hrs. 
silver

Compartir en

La ratificación del acuerdo administrativo para presidir la Cámara de Diputados será clave para determinar el futuro de la oposición. A juicio de varios dirigentes políticos, la evidente fragmentación del sector ha impedido generar un contrapeso a las reformas impulsadas por el Ejecutivo.

De ahí la relevancia de las conversaciones que puedan generarse a partir de marzo, luego que desde el Frente Amplio acusaran a la Democracia Cristiana  de votar con el Gobierno, razón por la que pusieron en duda su respaldo al acuerdo.

En ese escenario, en entrevista con Radio Universidad de Chile, el diputado y posible presidente de la Cámara de Diputados, Gabriel Silber, abordó el estado actual de la centroizquierda y la posibilidad de una articulación en el corto plazo.

Hace algunos días Catalina Pérez aseguró que “en el Frente Amplio están las puertas abiertas para llegar a acuerdos concretos con la DC y toda la oposición”. ¿Cómo valora esta disposición de, al menos, una parte del bloque?

Siempre va a ser positivo este cambio de tono respecto de liderazgos nuevos en el Frente Amplio. Recordemos que hacia fines de enero entre dimes y diretes de uno y otro sector parecía imposible sentarse a conversar a pesar del debate que se instaló, así que nosotros vemos muy bien estas declaraciones y esperamos a partir de marzo, desde el punto de vista político, instalar una mesa de conversación con todas las fuerzas de oposición que hoy tienen representación en el Congreso.

La diputada apuntaba también a que tiene que existir algún cambio y señalaba que bajo las condiciones que existían en diciembre pasado es inviable un acuerdo con la Democracia Cristiana. ¿Ustedes hacen alguna autocrítica?

Yo creo que lo importante es que nos sentemos a conversar sin etiquetas y sin caricaturas. Así como desde le Democracia Cristiana hay perfecta comprensión respecto de los puntos que plantea el Frente Amplio, hay que evitar el ninguneo hacia otros partidos, lo mismo el Frente Amplio respecto de la Democracia Cristiana, sus parlamentarios se ganaron con sus votos el derecho a estar en el Congreso. Siempre se expresó cuál iba a ser el tipo de oposición desde la DC y, en consecuencia, nadie hoy día puede acusar sorpresa de la votación de uno u otro partido. Lo que nadie entendería es que siendo mayoría la oposición en el Congreso, terminemos regalándoles las principales comisiones de la Cámara o su propia Mesa al Gobierno, cuando lo que esperan los chilenos es altura de miras y entender que desde el Congreso hay que hacer un contrapeso a la derecha y al Gobierno de Sebastián Piñera.

El ex ministro Francisco Vidal criticó la falta de articulación de la oposición durante las últimas semanas y mencionó una reunión en la que van a participar varios partidos de la oposición, sin la DC. ¿Qué le parecen estos intentos de articulación de un sector de la oposición, la DC está disponible para participar de aquello?

Nosotros tuvimos la última reunión política con nuestros jefes de bancada en la cual participó la Democracia Cristiana. Nosotros hacemos también el mea culpa colectivo de que los chilenos no están percibiendo a una oposición de manera transversal y prueba de ello es lo que ocurrió en el verano, donde el Gobierno de Sebastián Piñera gobernó sin ningún contrapeso desde el punto de vista de la acción fiscalizadora o un contrapunto en materia de contenidos o de carácter más político. Yo creo que la gente entiende a partir de cambio al sistema binominal que hoy ya no hay un duopolio, hay mucha más diversidad y comprensión a partir del nuevo sistema electoral y eso también debe expresarse en una oposición distinta, mucho más flexible, donde se respete la diferencia, pero eso no obsta que deben haber mínimos comunes en los cuales se debe operar con unidad. Prueba de ello son importantes varas legislativas que vamos a tener el 2019 como el tema tributario, el tema pensiones, las propuestas laborales o las reformas planteadas por parte de Piñera que son sin duda retrocesos donde la oposición debiera trabajar de manera articulada. Son estos mínimos donde debiéramos trabajar de manera colectiva y el resto respetar la independencia en materia de contenidos o propuestas de cada partido.

Gabriel Silver

¿Ustedes han tenido acercamientos con los otros partidos de la oposición? Desde el Frente Amplio, por ejemplo, han sostenido reuniones con el PS y el PC para abordar estos “mínimos comunes”.

Sí, en la última reunión que participaron los jefes de bancada con los demás partidos de oposición y esperamos que a partir de la próxima semana también desde lo legislativo abordar los puntos de confluencia o de convergencia dentro de la oposición, por el contrario, la Democracia Cristiana también quiere participar de este llamado a la unidad, pero sin etiquetas, sin caricaturas, sin descalificaciones, porque aquí debemos respetarnos desde la diferencia, desde la tolerancia, una construcción distinta a lo que eran tal vez otras coaliciones políticas como lo fue la Concertación o la Nueva Mayoría que buscaba la articulación en bloque, aquí los tiempos han cambiado y debemos respetar la independencia de cada uno de los partidos.

¿A su juicio, desde el punto de vista de la oposición, qué riesgos se corren si el Frente Amplio decide no apoyar el pacto administrativo en la Cámara de Diputados?

Nosotros hemos señalado que quien quiere lo más, debe cumplir con lo menos y por eso que el pacto administrativo tuvo sentido porque incluso a solicitud del propio Frente Amplio se despejaron temas de política o de contenidos, o de índole programático para darle posibilidad a cada partido de hacer la diferencia con sus votos en el Congreso. El desde tiene que ver con cumplir con un pacto que tiene por objeto que las fuerzas de la oposición hagan un contrapeso real al Gobierno y los chilenos no entenderían que siendo mayoría la oposición en el Congreso finalmente termine en manos de la derecha. Más allá del Congreso, a mi juicio a partir de lo que ocurra en el mes de marzo y la posibilidad de acuerdo dentro de las distintas fuerzas de la oposición, vamos a poder discutir otro tipo de puntos, ya no desde el pacto administrativo, sino que el día de mañana en materia de contenidos, de programas, o también algunos acuerdos electorales en materia de alcaldes, gobernadores y parlamentarios. Si no cumplimos lo mínimo, va a ser muy difícil seguir adelante con una construcción política de mayor envergadura.

¿Se cierran en el corto plazo a explorar una eventual coalición con otras fuerzas políticas de la centroizquierda?

No, yo creo que nadie desahucia nada antes de comenzar. La Democracia Cristiana va a estar disponible para establecer la discusión y el debate en las instancias que corresponden. Lo que sucede es que el desde es cumplir con la palabra empeñada, quien quiere lo más, tiene que al menos cumplir lo menos. No cumplir este acuerdo puede sin duda antelar la posibilidad de que podamos discutir temas más importantes como eventuales acuerdos electorales o temas más sustantivos en materia programática, donde los chilenos esperan comunes denominadores como oposición.

Durante las últimas semanas se ha especulado con la eventual salida del subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo. La Democracia Cristiana viene exigiendo su remoción desde hace meses. ¿Qué viene ahora, qué va a pasar si el Gobierno no cede ente esta petición?

Si bien antes era una demanda de la Democracia Cristiana, a partir del fallo de la justicia y el pronunciamiento del juez Madrid es un imperativo de carácter ético. Un Gobierno no puede sostener en el cargo a una persona cuestionada en un fallo de un tribunal de la República y aquí el tema ya no es si somos de izquierda o de derecha o cuál es el color político del Gobierno, sino que efectivamente se hace insostenible por un tema ético la mantención de Castillo en el Gobierno. Nosotros hubiéramos esperado que, a días o semanas del fallo, la administración Piñera hubiese reaccionado de manera unilateral, este no es un tema transaccional para la Democracia Cristiana, es un tema de valores, aquí hablamos del asesinato del ex Presidente Frei Montalva y, en consecuencia, hubiésemos esperado el compromiso de la República y de todas sus instituciones en la búsqueda de verdad en torno a un tema tan sensible para la memoria histórica de Chile. La Democracia Cristiana tiene congelada cualquier tipo de conversación o diálogo con el Gobierno a partir de la situación generada luego del fallo del juez Madrid.

 

Síguenos en