A días de su aprobación en la Cámara de Diputados, el controvertido TPP-11 sigue recibiendo críticas ya no solo de la sociedad civil, sino también de los mismos senadores que tendrán que ratificar o no la decisión de la Cámara Baja.
Una de las situaciones más polémicas que ha suscitado el paso del TPP-11 por el Senado es que solo será discutido por la Comisión de Relaciones Exteriores antes de ser votado en sala.
Pese al bloqueo impuesto por la UDI para que el proyecto no pase por otras instancias, un grupo de senadores exigió que la Comisión de Relaciones Exteriores funcione en conjunto con otras para que la discusión tenga algo más de perspectiva.
Uno de los parlamentarios que levantó dicha exigencia fue el senador Alejandro Navarro, quien sostuvo para nuestro medio que esto permitirá “tener un debate más intenso”.
“Hemos dicho que, ante la imposibilidad de debatir y hacer modificaciones, el Senado exige, y así lo hemos acordado, que esto sea tratado por las diversas comisiones. Por lo tanto, la Comisión de Relaciones Exteriores va a funcionar como comisiones unidas con la Comisión de Agricultura, con la Comisión de Derechos Humanos, con la Comisión de Trabajo, con la Comisión de Salud. Es decir, vamos a tener un debate intenso”
Además, el ex candidato presidencial criticó el procedimiento legislativo de los tratados internacionales, pues estos solo se pueden aprobar o rechazar, sin posibilidad de ser modificados. Por lo mismo y, porque según él, el pacto lesiona los intereses nacionales, Navarro anunció su voto en contra para la ratificación del TPP-11.
“Los tratados tienen una fórmula de procedimiento legislativo muy compleja, no podemos agregar ni sacar nada, solo podemos aprobar o rechazar, por lo tanto, es un impedimento esencial que impide mejorarlos y nos pone en la vereda de aprobar o rechazar. En este sentido, estamos por rechazar, porque un conjunto de elementos contenidos en el tratado apunta, de manera severa, a lesionar intereses nacionales, en este caso particular, de los trabajadores y de las capacidades propias de nuestra autonomía como país”.
Alejandro Navarro reconoció que este pacto podría tener bonanzas económicas para el país, pero se cuestionó el costo que traería para la población.
“Chile no necesita más tratados de libre comercio, tenemos más de 32 tratados, y este tratado TPP 11 es con los mismos países que ya tenemos tratados de libre comercio, con el agravante que esto aumenta franquicias que no benefician la autonomía y la soberanía nacional. Si bien puede permitir un crecimiento económico, la pregunta es ¿a qué costo?”.
El TPP-11 logró sortear la Cámara de Diputados con 77 votos a favor y 68 en contra, resultado que no dejó de sorprender a quienes daban por seguro una holgada victoria del tratado.
Actualmente la oposición se encuentra dividida ante la votación en la Cámara Alta del TPP-11.