El 25 de octubre quedó registrado como un día decidor para los libros de historia. El triunfo de la opción Apruebo en el Plebiscito determinó el inicio de un proceso de creación de una nueva Carta Fundamental que refleje a la nueva sociedad chilena.
El presidente de la Democracia Cristiana, Fuad Chahín, analizó lo sucedido en la pasada jornada y aseguró que este es solo el principio de un camino que tiene una meta clara: el plebiscito de salida que valide un nuevo pacto social redactado íntegramente por personas delegdas especialmente para tal efecto.
“Como en muchos momentos de nuestra historia, el pueblo de Chile ha optado por el camino de la participación, por el de la paz, de la institucionalidad para poder impulsar los cambios que nuestro país necesita con urgencia y ha desafiado todo: la pandemia, la campaña del terror y la desinformación y masivamente se volcó a los lugares de votación a dar una señal muy contundente.
En ese sentido es muy importante considerar la participación de los jóvenes. Cuando hay grandes causas e ideales en juego participan y se movilizan, o los adultos mayores que a pesar de la pandemia fueron a votar y en este contexto tenemos un mandato claro, primero en la forma porque los chilenos quieres ser protagonistas y que las cosas no sean sin ellos, dejar de ser objeto de decisiones y transformarse en sujetos activos, por lo tanto, la primera gran responsabilidad que tenemos es que este camino que se inició el domingo y que es bastante largo, es que tenemos que hacerlo con los ciudadanos, no como espectadores, sino como protagonistas”, manifestó en conversación con nuestro medio.
“La segunda gran responsabilidad es que este camino tiene un destino: una constitución nueva que profundice y modernice nuestra democracia para que sea más participativa y descentralizada y supere el modelo de desarrollo neoliberal. Hay que generar un nuevo pacto para un modelo de desarrollo más humano, más sustentable, donde logremos que la dignidad no sea un privilegio de algunos sino que sea la garantía mínima que debemos tener todos y donde tengamos un modelo con justicia social e inclusión. Eso requiere que el proceso que iniciamos sea amplio, convocante, generoso y muy participativo”, agregó.
En cuanto al rol que le compete jugar desde ahora a los partidos políticos, el presidente de la DC aseguró que éste es el de la construcción de los caminos que la propia ciudadanía ha señalado.
“La ciudadanía entrega su visión, pero el acuerdo de los partidos el 15 de noviembre fue el que en definitiva habilitó este proceso y generó el contexto que lo hizo posible, pero quienes generaron la presión para que sucediera fueron los ciudadanos movilizados y desconocer eso sería absolutamente irreal e injusto. Los partidos nos pusimos de acuerdo y logramos este proceso y no todos los partidos estuvieron disponibles e incluso algunos nos trataron como traidores al pueblo, entonces los partidos tenemos que tener el coraje de poder construir caminos de solución democrática cuando se generan crisis producto de visiones distintas de lo que tiene que ser una sociedad al extremo de expresarse como lo hizo efectivamente producto de la falta de empatía, de ética”.
“¿Por qué se alejó la ciudadanía de la política?”, cuestionó el político durante su reflexión post plebiscito. “Porque se perdió el sentido épico y ético sobre todo para los jóvenes, que no se seducen por el debate de la mera administración de cuotas de poder, sino que se seducen cuando hay ideales en juego y se actúa de acuerdo a principios y valores, y no por intereses mezquinos y personales. Por eso los partidos tenemos la responsabilidad de la rectificación y de ser capaces de liderar colaborativa y participativamente el camino que viene”.
Relativo al papel que le corresponde jugar a las distintas tiendas en este nuevo proceso, Chahín señaló que les compete una participación fundamental.
“Los partidos son insustituibles para lo que viene, pero no podemos hacerlo solos sino que hay que hacerlo con los ciudadanos que quieren ser protagonistas y esa es la base de legitimidad del proceso que viene”.
Consultado sobre el fin del modelo neoliberal y cómo ese ha sido un objetivo desde el gobierno de Patricio Aylwin, el presidente de la Falange señaló que los cambios tributarios, el aumento del gasto social ya sea para caminos, agua potable, vivienda fueron notables, pero no pudieron modificar las bases del modelo socioeconómico.
“Recordemos que los primeros gobiernos tenían a los senadores designados, teníamos sistema binominal y había una tutela del poder militar a través del Consejo de Seguridad Nacional, la inamovilidad de los Comandantes en Jefe y de a poco se fueron derribando esas instituciones pero quedaba la más importante: la Constitución con sus quórums supra mayoritarios que impedían los cambios. Sin embargo creo que al principio no se pudo, pero después se fue perdiendo la épica y la fuerza transformadora y se empezó a administrar un modelo que empezó a ser cómodo para algunos y después de eso se empezó a perder la ética y permeó la corrupción. Por eso la gente dejó de confiar en que tuviéramos capacidad de dar gobernabilidad. La clave es hoy ser capaces de construir una alternativa de cambio y gobernabilidad, porque la gente quiere un camino institucional pacífico para hacer los cambios y resolver las diferencias. Eso es lo que queremos construir desde Unidad Constituyente: abrir las puertas para dialogar con las fuerzas políticas de oposición”.
Consultado sobre las razones qué tendría la ciudadanía para volver a creer en aquellos que ya estuvieron en el poder y no realizaron cambios el dirigente de la DC aseveró que es necesario comprender que efectivamente sí hubo cambios significativos entre la dictadura y la democracia.
“Indudablemente hubo cambios enormes, por cierto que insuficientes y con el tiempo se perdió ese impulso transformador, pero actualmente hay un cambio de prioridades y paradigmas. Por eso digo que el camino de la política es el de la rectificación, no basta con ser comentarista de lo que ocurre. Creo que no haber tenido primarias de toda la oposición para la elección de gobernadores regionales fue un tremendo retroceso, porque son lo hechos, la práctica política la que hará que la ciudadanía confíe en nosotros”.
En cuanto al sistema cómo se elegirán los miembros de la Convención Constituyente y la dificultad que ello implica para la elección de independientes, Chahín aclaró que hay dos elementos importantes a considerar: la paridad y el que los independientes podrán conformar listas y plantear una posición colectiva desde su posición independiente.
“Eso ya está aprobado y esperamos que también se apruebe lo de los escaños reservados para los pueblos originarios y la DC ha tenido sus votos comprometidos para eso. Los partidos tenemos que abrir espacios, de hecho nuestro único candidato a la Convención es justamente un independiente, el ex presidente de la Fundación Iguales Juan Enrique Pi, porque queremos dar una señal. Tenemos que buscar un equilibrio, porque si vamos muy divididos vamos a terminar subsidiando a la derecha que con solo con un tercio de los votos puede sacar la mitad de los convencionales si vamos muy divididos.
Nuestro compromiso como partido es tener independientes y diversidad desde la perspectiva social con dirigentes sociales, sindicales, el mundo de la cultura, académicos. De todo, porque en la medida que el menú de opciones para los ciudadanos sea lo más variado posible y que la Convención sea la mejor expresión de lo que es la diversidad de nuestro país, seguiremos transitando este camino que partió el domingo en una dirección correcta: una Constitución que garantice un estado social y democrático de derecho”, manifestó.
El timonel de la DC también tuvo palabras para analizar las distintas alianzas entre la oposición y, particularmente, sobre la posibilidad de la DC de llevar una lista en común con el Partido Comunista.
“El PC ni siquiera estuvo a favor del acuerdo del 15 de noviembre y votó en contra de la Reforma Constitucional que permitió lo que pasó ayer. Obviamente tenemos diferencias, pero en los temas sustantivos vamos a tener unos niveles importantes de coincidencias y eso se verá en la convención, pero siendo francos, no entramos todos en una lista. ¿Cómo expresas la diversidad de la oposición en 4 cupos, con dos hombres y dos mujeres más el mundo independiente? Eso es imposible. Creo que lo razonable es tener dos listas porque así se garantiza la diversidad, participación de independientes y que nadie quede excluido, no hay otra fórmula. Una sola lista es inviable y todos lo sabemos”, concluyó.